Bravo jugó su último partido el 5 de
agosto en la final de la Community Shield
ante el Chelsea, pero se rompió el tendón
de Aquiles del pie izquierdo 15 días después en un entrenamiento. No tenía tanta barba entonces. Se operó el 23 de
agosto, en Barcelona, con el doctor Ramón Cugat, especialista en cirugía ortopédica (el mismo que intervino a Arturo
Vidal). Volvió en abril a entrenar en Manchester.
El regreso de Bravo se dio mientras
Ederson, el portero titular del City, se encuentra en Sao Paulo de vacaciones, luego de salir campeón de la Copa América
(no disputó ningún minuto, relegado por
Alisson). A Asia también viajó el arquero
inglés Daniel Grimshaw, de 21 años. El sábado jugarán la final del cuadrangular
ante Wolverhampton Wanderers en
Shanghai (el otro participante fue Newcastle).
"Bravo cumplió una sólida actuación,
pero no tuvo mucho trabajo. Ante Chicharito fue una buena tapada, pero casi
le anotaron en el rebote. Me gusta Bravo,
pero no creo que sea una buena alternativa a Ederson esta temporada", desafía
Sam Lee, reportero habitual del City en
Inglaterra y ex periodista de Goal.com.
¿Bravo no puede pelearle el
puesto a Ederson, Sam?
Creo que Bravo tiene un problema de
confianza. Todavía tiene los fantasmas
de la temporada 2016-17, que fue terrible
para él. Ante West Ham, tuvo dos momentos de duda. Primero recibió un pase
atrás y fingió que llevaba la pelota a la
izquierda, pero la movió a la derecha, sin embargo, el delantero le adivinó la jugada y le costó resolver. También hubo un
pase atrás de su defensa que no salió a
buscar la pelota.
Patricio Delgado, ex médico del plantel de Universidad de Chile y traumatólogo de IntegraMédica, asegura que el regreso de Bravo tomó más tiempo del normal, pero esos meses juegan a su favor.
"Los futbolistas vuelven con harto miedo
en los primeros partidos, pero Bravo debió sentirse más seguro porque no apuró
el proceso de recuperación. En general
vuelven a los seis meses después de una
rotura del tendón de Aquiles y él volvió al
año. Está el riesgo de una rerotura, cuya
probabilidad es baja, pero es una lesión
grave", dice el especialista.
El traumatólogo asegura que hay ciertos movimientos a los que Bravo debe
poner cuidado. "Básicamente en el rechazo, al saltar, ahí es cuando más fuerza
el tendón de Aquiles. Siempre va a tener
que hacer ejercicios de elonganción porque ese tendón operado está más expuesto a inflamación y dolor. La lesión no lo limita mayormente, pero después de
los partidos tendrá que ponerse hielo,
mantener kinesiología y fortalecer el tríceps sural, que son los tres músculos que
forman el tendón de Aquiles", dice Delgado.