Desde el año 2002 no se hacía un
censo de árboles en la Región
Metropolitana. Por esto, Jaime
Hernández, profesor de la Facultad de
Ciencias Forestales y de la Conservación de la Naturaleza de la Universidad
de Chile, se propuso actualizar ese registro y además estudiar el efecto que
tiene la contaminación en los árboles
urbanos.
Según este estudio, que duró tres
años, en total hay 6.692.000 árboles en
Santiago. Las tres especies que tienen
mayor presencia, todas exóticas, son el
liquidámbar (388136), el acer negundo
(327.908) y la robinia o falso acacio (301.140).
Otro de los resultados
fue que en Santiago dominan las especies exóticas.
Solo un 14 por ciento de los
árboles de la capital son
nativos, siendo de ellos el
quillay el más presente en
la zona (234.220). Mientras que un 86 por ciento
son exóticos.
Hernández dice que
"para tener un sistema de
arbolado eficiente y beneficioso debe existir un
equilibrio entre las especies nativas y las exóticas,
porque los servicios ecosistémicos, que son los beneficios que los árboles le entregan a los humanos,
son diversos en ambas y se complementan". Por ejemplo, son servicios
ecosistémicos mejorar la calidad del aire, regular el clima y la temperatura,
generar biodiversidad y controlar la
erosión del suelo, entre otros.
¿Cómo contaron los árboles,
profesor?
Mediante un muestreo estadístico.
En Santiago abarcamos una superficie
de 967 kilómetros cuadrados, que incluye toda la mancha urbana más algunas zonas agrícolas aledañas. Para
efectuar el muestreo se usaron 200 parcelas circulares de 400 metros cuadrados; allí se registraron y midieron todos
los árboles y arbustos. para asignar la
posición de cada parcela en Santiago se
obtuvieron coordenadas geográficas al
azar, que después se ubicaron en terreno con GPS.
¿Y cómo hicieron la estimación?
Se dividió la ciudad en zonas 0 estratos bajo criterios como el nivel socio
económico de las comunas y el porcentaje de cobertura de árboles de cada
una (medido en fotografías aéreas).
Usando los datos de las parcelas de cada estrato se generalizó el resultado,
asumiendo que lo representaban bien.
por ejemplo, si en el estrato Se tenía en promedio tres quillayes por hectárea, y el estrato tiene 1.000 hectáreas, entonces el número total de quillayes en el estrato "A" es de 3.000.