Central de Carabineros, 13:30 horas del pasado martes 13 de agosto. La operadora Marianela Ortiz responde una de las llamadas del día:
-Carabineros, buenas tardes. ¿Cuál es su emergencia polidal?
"Hola, hay alguien en mi casa", responden desde el otro lado con una voz muy baja y respiración fuerte. Era un niño de 14 años que estaba solo en su hogar, ubicada en la comuna de Ta-lagante, y al parecer la operadora no lo oye bien, porque le vuelve a preguntar:
-¿Aló? Usted está llamando a Carabineros. ¿Qué le sucedió?
"Hay alguien en mi casa", repite el niño, ahora un poco más fuerte, pero todavía con la respiración agitada. "Ya rompieron un vidrio", acota.
Ya, no me corte por favor. No me corte. ¿Qué edad tiene usted? ¿Está solo?
-Catorce.
Tranquilito, yo le voy a enviar rápidamente a Carabineros al lugar. Pero no me corte. Escuchó que rompieron un vidrio entonces, ¿están ingresando a su casa o al patio?
Creo que ya están en mi pieza.
¿En qué parte de la casa está usted?
En la pieza de mis papás, que tiene seguro.
Ya, quédese ahí. ¿Escucha algo más?
Sí, están robando.
¿En el primer piso?
En el segundo.
¿Tiene una alarma comunitaria? ¿Usted está en el primer piso o en el segundo?
Segundo.
Mientras pregunta, la operadora manda al lugar al carro policial más cercano e intenta contener al niño: "Va un carro en camino, yo te voy a acompañar todo el rato. No me cortes. Por favor, mi niño, no salgas todavía. Tranquilito, yo voy a estar contigo, nada malo te va a pasar", le dice.
La llamada dura tres minutos y medio hasta que la ayuda llega.
-"Sí, ya estoy con un carabnero", es lo último que se escucha decir al niño. "
Lo primero para mí era contener al menor para poder obtener la dirección de su casa y entregársela al carro que esté más cerca de lugar", cuenta la operadora Marianela Ortiz a "24 Horas". El capitán Patricio Gallardo Canales de la 23a comisaría de Talagante fue uno de los seis efectivos que llegaron a la casa del menor. "El personal del plan cuadrante que se encontraba rondando por ese sector recibió el llamado del 133 y se demoró menos de dos minutos en llegar al domicilio", relata. "A llegar, nos encontramos con dos individuos que estaban cargando electrodomésticos en un vehículo Station Wagon color verde petróleo, que estaba abierto y con algunas cosas ya cargadas, como un televisor de 50 pulgadas que sustrajeron de a casa", agrega el capitán. Fueron detenidos de inmediato. Sobre el niño que llamó, Gallardo indicó que "se quedó solo en el domicilio cuando sus padres salieron y en ese momento ocurrió el robo".