Monckeberg llegó a las 15 horas a Palacio y, tras reunirse con el mandatario, salió al patio de Los Naranjos a contar que al proyecto del gobierno se le inyectó suma urgencia para apurar su tramite legislativo. Además, el titular de Trabajo informó que a dicha iniciativa se le incluirá una indicación para establecer una jornada semana promedio de 41 horas que incorporará la flexibilidad que, inicialmente, tenía la iniciativa de La Moneda. "No está en discusión la rebaja de jornada, lo que sí está en discusión es que esa rebaja se haga bien, en forma responsable y a favor del empleo, no para destruirlo. Desde el primer día hemos promovido mejorar la calidad de vida informando una rebaja responsable e inteligente", dijo el ministro, aludiendo a que el proyecto de la diputada Vallejo no contempla la flexibilidad laboral que permite, por ejemplo, el teletrabajo.
"El proyecto del PC rebaja la jornada, pero mantiene todas las rigideces actuales y finalmente el Estado determina cómo se trabaja y cuántas horas. Nosotros planteamos que esta jornada pueda adaptarse al trabajador y a los ciclos productivos de las empresas", precisó Monckeberg.
Ministro, si son 41 horas promedio, ¿entonces podría ser una hora menos o más que 41?
41 horas promedio a la semana, sin que se trabaje más de las horas legales que se establecen actualmente (10 horas diarias).
¿Cuáles son las rigideces actuales que, usted dice, mantiene el proyecto de Vallejo?
Hoy no se pueden pactar horarios distintos de salida, de entrada, para trabajar desde casa, para trabajar algunos días o semanas más que otras. Hoy existe una rigidez de trabajar diez horas ordinarias a diario, ni en menos de cinco días ni en más de seis días. El proyecto de la diputada Vallejo deja todo igual de rígido, pero en vez de 45 horas propone 40 sin flexibilidad. Nosotros además de reducir la jornada proponemos introducir la flexibilidad en la que se deberá respetar igual el límite de no trabajar más de diez horas diarias.
¿Cómo el proyecto velará para que se respeten los ciclos productivos de las empresas sin que la flexibilidad vaya en desmedro de eso?
Por ejemplo, en una empresa de contadores ese contador trabaja la primera semana de cada mes mucho más que las semanas entremedio.
¿Por qué obligarlo a estar ahí sentado en la oficina con horas muertas?
Hoy la jornada rígida obliga a un trabajador o trabajadora a estar sentado cumpliendo las horas para irse a su casa, independiente si tiene o no carga laboral. La rigidez lo obliga a tener horas muertas.
¿Cuánto tiempo tomará llegar a las 41 horas?
Eso es algo que se está acordando con los parlamentarios y lo estamos evaluando, pero va a ser una gradualidad pertinente. El primer año se bajaría una hora, el otro año otra hora, hasta llegar hasta las 41 horas. Se hará en forma gradual para que las pequeñas y medianas empresas se adapten. Si se hace bruscamente los empleadores pueden verse obligados a rebajar los sueldos.
La diputada Camila Callejo (PC) se refirió a la propuesta de gobierno. "No hay nada nuevo respecto a esta posición. Insisten en querer llevar nuestra propuesta al TC y por otro lado reiteran que su propuesta es la mejor y que básicamente hay que discutir sobre ella, que yo creo que es totalmente opuesta a lo que estamos señalando", dijo la parlamentaria a radio Cooperativa. "Si el gobierno no quiere apoyar, al menos que dejen el proyecto en paz y que camine su propio curso, pero no obstaculizarlo, no declararle la guerra y por cierto, tampoco llevarlo mañosamente al TC", agregó.