Después de un día de intensos trámites, el ingeniero mecánico
Eduardo Timis (48) se disponía la
noche del martes a descansar, con el fin
de estar 100% lúcido este miércoles,
cuando su hija, Martina, sea trasladada
desde el Hospital de Santiago del Estero,
Argentina, hasta el aeropuerto de Pudahuel, en un avión ambulancia, y desde
allí hasta el Hospital del Trabajador,
donde quedará internada en la Unidad
de Tratamientos Intensivos (UTI).
Que Timis diga que se irá a dormir en una cama no es un tema de menor trascendencia, porque desde que Martina se accidentó, hace16 días, ha dormido junto a ella en el hospital. En el día, los cuidados quedaban en manos de su su madre Marcela Briones, y de su entrenador, Fernando Corzo, quien viajó por tierra hasta Santiago, para recibir a su pupila. Martina (18) corría el Campeonato Mundial de Supercross, en Santiago del Estero, cuando en la primera curva se cayó estrepitosamente. Recibió un fuerte golpe que le causó una laceración en la vértebra 7, con complicación medular. La muchacha fue operada exitosamente en el hospital trasandino, que corrió con todos los gastos médicos.
"En el Hospital del Trabajador será reevaluada para luego comenzar el proceso de rehabilitación neumomotora", explicó Timis.
"Ella se encuentra con movilidad parcial de su cuerpo, aunque recuperó la sensibilidad de los dedos de las manos", agregó.
Timis se fue a descansar a la casa de unos amigos, consciente de que que tiene que estar con toda la energía para afrontar los acontecimientos que se desencadenarán este miércoles.
A las 10.15 horas deberá salir con Martina hacia el aeropuerto, en una ambulancia. Una vez en el avión, dispuesto por el gobierno de Santiago del Estero, emprenderá un vuelo de una hora y veinte minutos hasta Pudahuel. En el vuelo irá un médico, por lo menos. Martina debería viajar conectada a una bolsa de suero, pero sin ningún otro soporte.
Eduardo, Marcela y su hermano Lorenzo, de 14 años, la acompañarán en la cabina.
A la llegada, una ambulancia los esperará en la losa del aeropuerto, para ser trasladada hasta el Hospital del Trabajador, en Vicuña Mackenna con Bilbao. "En Chile, habrá que reevaluar, porque es posible que se sea sometida a una segunda cirugía, para fijar completamente la cervical", dijo Timis.
Martina, desde el primer momento, ha estado consciente.
¿Eduardo, ella le comentó algo sobre el viaje?
Está ansiosa, pero con ganas de regresar a su país. Desea comenzar luego esta segunda etapa. Martina está fuerte y firme.
Que Timis diga que se irá a dormir en una cama no es un tema de menor trascendencia, porque desde que Martina se accidentó, hace16 días, ha dormido junto a ella en el hospital. En el día, los cuidados quedaban en manos de su su madre Marcela Briones, y de su entrenador, Fernando Corzo, quien viajó por tierra hasta Santiago, para recibir a su pupila. Martina (18) corría el Campeonato Mundial de Supercross, en Santiago del Estero, cuando en la primera curva se cayó estrepitosamente. Recibió un fuerte golpe que le causó una laceración en la vértebra 7, con complicación medular. La muchacha fue operada exitosamente en el hospital trasandino, que corrió con todos los gastos médicos.
"En el Hospital del Trabajador será reevaluada para luego comenzar el proceso de rehabilitación neumomotora", explicó Timis.
"Ella se encuentra con movilidad parcial de su cuerpo, aunque recuperó la sensibilidad de los dedos de las manos", agregó.
Timis se fue a descansar a la casa de unos amigos, consciente de que que tiene que estar con toda la energía para afrontar los acontecimientos que se desencadenarán este miércoles.
A las 10.15 horas deberá salir con Martina hacia el aeropuerto, en una ambulancia. Una vez en el avión, dispuesto por el gobierno de Santiago del Estero, emprenderá un vuelo de una hora y veinte minutos hasta Pudahuel. En el vuelo irá un médico, por lo menos. Martina debería viajar conectada a una bolsa de suero, pero sin ningún otro soporte.
Eduardo, Marcela y su hermano Lorenzo, de 14 años, la acompañarán en la cabina.
A la llegada, una ambulancia los esperará en la losa del aeropuerto, para ser trasladada hasta el Hospital del Trabajador, en Vicuña Mackenna con Bilbao. "En Chile, habrá que reevaluar, porque es posible que se sea sometida a una segunda cirugía, para fijar completamente la cervical", dijo Timis.
Martina, desde el primer momento, ha estado consciente.
¿Eduardo, ella le comentó algo sobre el viaje?
Está ansiosa, pero con ganas de regresar a su país. Desea comenzar luego esta segunda etapa. Martina está fuerte y firme.