El lunes, y en plena evolución del estallido social, el empresario Luciano
Duco les solicitó a una veintena de
trabajadores que se reunieran en
uno de los espacios que tiene habilitados en
la planta de su molinera. Sorprendidos, los
funcionarios se miraron las caras y se juntaron en el lugar con cierta incertidumbre.
"¿Qué pasó? Eso es lo primero que uno se
pregunta", cuenta Antonio Cerda, administrador de esta industria que produce harina y
que está enclavada en Coihueco, en la Región
del Bío Bío.
Luciano Ducó es un hombre de 60 años y es el papá de la lanzadora de bala Natalia Duco. Tiene, además, una empresa de transportes y un complejo deportivo en el que arrienda canchas de fútbol. Y ese día, y varias horas antes de los anuncios sociales de gobierno, Luciano tomó la palabra e informó una medida. "Hoy me reúno con ustedes para anunciarles que subiré las remuneraciones en 50.000 pesos a cada trabajador. Además de un ajuste al actual bono de producción a 50.000 pesos por tramo para enfrentar posibles gastos producto de esta contingencia", dijo.
Los trabajadores, con una mueca de sonrisa, le respondieron con un caluroso aplauso. El gesto no se había hecho público, pero fue la propia Natalia quien lo relató en su cuenta de Instagram.
"Quiero compartir la iniciativa de mi papá en su empresa para que sirva como una Inspiración a todo aquel que tenga a su alcance generar un pequeño cambio. Son gestos como éstos, más grandes o más pequeños, los que unirán a nuestro pueblo y nos permitirán volver a abrazarnos en la paz. Para mí, es un ejemplo mi papá", escribió.
Enterado de lo que hizo su hija, a Luciano Duco no le quedó más remedio que hablar sobre su motivación, la misma que beneficiará de inmediato a una veintena de personas que trabajan en la molinera. "Dentro de la humildad de mi empresa, creo que no cuesta nada aportar un grano, sobre todo en este momento. Hay que ser muy ciego o vivir en otro planeta para no entender lo que está pasando, y uno tiene que tomar el toro por las astas y dar soluciones. Y me di cuenta que si puedo aportar, hay que hacerlo sin medias tintas", contó el empresario.
¿Cree que puede motivar a más empresarios cómo usted?
Hay gente que gana tanta plata que si hace gestos de este tipo no van a quebrar ni tampoco se van a quedar sin comer. Para mi lo principal es que la gente que trabaja conmigo esté contenta. Acá tenemos los sueldos al día, hay espacios para que se recreen y todos sus implementos de seguridad. Yo cumplo con la ley, no más, y es mi obligación, pero falta una mirada distinta de parte de nosotros. No le quiero dar lecciones de moral a nadie, esto es una cuestión de conciencia muy personal. Pero mire usted al señor Luksic, de inmediato tomó medidas. Para mí ese señor es un ejemplo.
¿Cuál es su diagnóstico del estallido social?
Son demasiadas cosas y la gente, las de las pymes, los trabajadores, todos los días ven cuestiones absurdas, como lo que nos pasa con el retail que nos paga a 120 días y cuando les envías 100 bolsas te devuelven 20 por merma que pasa en sus mismos locales.
Para Antonio Cerda, trabajador con cuatro años en la empresa, el gesto de su jefe debería ser replicado. "Estas cosas generan una mística muy grande y esta empresa es reconocida por eso, siempre cumple. Ahora subieron los bonos de producción y se va a llegara a meta, gracias al esfuerzo de todos. Cuando ha habido una situación personal, don Luciano siempre nos ha dado las facilidades", contó.
Luciano Ducó es un hombre de 60 años y es el papá de la lanzadora de bala Natalia Duco. Tiene, además, una empresa de transportes y un complejo deportivo en el que arrienda canchas de fútbol. Y ese día, y varias horas antes de los anuncios sociales de gobierno, Luciano tomó la palabra e informó una medida. "Hoy me reúno con ustedes para anunciarles que subiré las remuneraciones en 50.000 pesos a cada trabajador. Además de un ajuste al actual bono de producción a 50.000 pesos por tramo para enfrentar posibles gastos producto de esta contingencia", dijo.
Los trabajadores, con una mueca de sonrisa, le respondieron con un caluroso aplauso. El gesto no se había hecho público, pero fue la propia Natalia quien lo relató en su cuenta de Instagram.
"Quiero compartir la iniciativa de mi papá en su empresa para que sirva como una Inspiración a todo aquel que tenga a su alcance generar un pequeño cambio. Son gestos como éstos, más grandes o más pequeños, los que unirán a nuestro pueblo y nos permitirán volver a abrazarnos en la paz. Para mí, es un ejemplo mi papá", escribió.
Enterado de lo que hizo su hija, a Luciano Duco no le quedó más remedio que hablar sobre su motivación, la misma que beneficiará de inmediato a una veintena de personas que trabajan en la molinera. "Dentro de la humildad de mi empresa, creo que no cuesta nada aportar un grano, sobre todo en este momento. Hay que ser muy ciego o vivir en otro planeta para no entender lo que está pasando, y uno tiene que tomar el toro por las astas y dar soluciones. Y me di cuenta que si puedo aportar, hay que hacerlo sin medias tintas", contó el empresario.
¿Cree que puede motivar a más empresarios cómo usted?
Hay gente que gana tanta plata que si hace gestos de este tipo no van a quebrar ni tampoco se van a quedar sin comer. Para mi lo principal es que la gente que trabaja conmigo esté contenta. Acá tenemos los sueldos al día, hay espacios para que se recreen y todos sus implementos de seguridad. Yo cumplo con la ley, no más, y es mi obligación, pero falta una mirada distinta de parte de nosotros. No le quiero dar lecciones de moral a nadie, esto es una cuestión de conciencia muy personal. Pero mire usted al señor Luksic, de inmediato tomó medidas. Para mí ese señor es un ejemplo.
¿Cuál es su diagnóstico del estallido social?
Son demasiadas cosas y la gente, las de las pymes, los trabajadores, todos los días ven cuestiones absurdas, como lo que nos pasa con el retail que nos paga a 120 días y cuando les envías 100 bolsas te devuelven 20 por merma que pasa en sus mismos locales.
Para Antonio Cerda, trabajador con cuatro años en la empresa, el gesto de su jefe debería ser replicado. "Estas cosas generan una mística muy grande y esta empresa es reconocida por eso, siempre cumple. Ahora subieron los bonos de producción y se va a llegara a meta, gracias al esfuerzo de todos. Cuando ha habido una situación personal, don Luciano siempre nos ha dado las facilidades", contó.