La enorme caja con bultos, que fue recibida por la Aduana Regional, traía una documentación que indicaba que las mercancías eran juguetes de plástico para entretención infantil. A los funcionarios de Aduanas, acostumbrados a desconfiar de todo lo que pasa por sus ojos, les llamó la atención aquel dudoso conteiner.
Al abrirlo, confirmaron que en lugar de juguetes, venían 94 miras telescópicas (lentes que permiten aumentar la imagen de manera nítida) de las marcas Vortex, Leupold y Trijicon, además de seis soportes para sostener a los accesorios. La Aduana aseguró que los objetos incautados; generalmente usados en el ámbito militar, para francotiradores o en el área deportiva, tiro al blanco con armas de fuego; están avaluados en más de $20.000.000.
Ana Karina Ochoa, directora de la Aduana Regional de Valparaíso dijo que se cometieron dos infracciones.
"La primera es contrabando, por intentar ingresar mercancías ocultas al país con el objeto de evadir el pago de impuestos. La otra es que al tratarse de accesorios para armas, están sometidos al control de la Ley 17.798, que regula el control de armas y explosivos, por lo que para entrar al país requieren del visto bueno de la Drección de Movilización Nacional del Ejército", describió.