La app Goworq pone a disposición de sus usuarios cientos de esas ofertas
laborales conocidas coloquialmente como pitutos. Más allá de la crisis, de acuerdo a
sus datos el puesto de trabajo temporal más requerido para la próxima temporada
estival será el de garzón. ¿Cuánto pueden ganar? Unos $20.000 diarios en promedio,
según las estadísticas que maneja la propia app (ver tabla).
"En invierno las solicitudes de trabajo se van por el lado más comercial, logístico, operarios de distintas áreas, reponedores o embalaje. Mayoritariamente corresponden a reemplazos, porque en invierno aumentan las ausencias por enfermedad y muchas veces las empresas requieren cubrir puestos por un par de días", detalla Mauricio Ortiz, fundador de la app. En verano, claro, la cosa cambia.
¿Algún truco para quedar en uno de estos pitutos? Hernández cree que es importante que los garzones tengan capacitación ("los clientes están más exigentes, además que es muy necesario empezar a profesionalizar esta área"), postular a trabajos a los que se sabe que se va a poder llegar a tiempo ("para que no se caiga en la impuntualidad reiterada") y enfocar la búsqueda a sectores gastronómicos consolidados como Barrio Italia o Alonso de Córdova.
De acuerdo a Hernández, hoy es recomendable hacer la búsqueda a la antigua: imprimir unas 30 copias del currículum y salir a entregar de restaurante en restaurante. "Es importante que se lo pases en la mano al administrador del restaurante, nunca a otro garzón. Hay que expresar el deseo de trabajar en ese lugar y ser claro en el aporte que uno puede ser para la empresa", sugiere.
¿Y qué se proyecta para este verano tan impredecible? Veloso estima muy probable que caigan las vacantes "dada la contingencia país". A diferencia de otras temporadas, cree que "los empleadores irán evaluando sobre la marcha como se va comportando la demanda para abrir vacantes".
Hernández es más pesimista: a su entender, lo más probable es que haya una merma importante en comparación al verano anterior en cuanto a la cantidad de pitutos disponibles. Las áreas más afectadas serán probablemente la gastronomía, la hotelería y el turismo. "Aún existe incertidumbre, sobre todo de los turistas extranjeros que vendrán a nuestro país", recalca.
Eso sí, aclara que durante la segunda quincena de febrero la cosa de verdad se pone realmente lenta. "Los que toman las decisiones no están", explica.
Las empresas financieras, dice, son las que abren más cupos de trabajo formal en esta época. "En marzo y abril esas compañías realizan los cierres a nivel contable y los balances, y muchas veces necesitan mayor dotación de profesionales. Ese reclutamiento se hace en enero y febrero, pensando en que ya en marzo deben estar totalmente operativos", cierra.
"En invierno las solicitudes de trabajo se van por el lado más comercial, logístico, operarios de distintas áreas, reponedores o embalaje. Mayoritariamente corresponden a reemplazos, porque en invierno aumentan las ausencias por enfermedad y muchas veces las empresas requieren cubrir puestos por un par de días", detalla Mauricio Ortiz, fundador de la app. En verano, claro, la cosa cambia.
Garzones capacitados
Juan Carlos Hernández, director de la escuela Garzones Chile, advierte que durante el verano la demanda por garzones sufre altibajos, más aún proyectando el actual contexto: "En lugares turísticos hay un aumento considerable, además de que hay restaurantes que sólo abren en esa temporada. En Santiago la demanda o baja o se mantiene, porque disminuye la afluencia de público".¿Algún truco para quedar en uno de estos pitutos? Hernández cree que es importante que los garzones tengan capacitación ("los clientes están más exigentes, además que es muy necesario empezar a profesionalizar esta área"), postular a trabajos a los que se sabe que se va a poder llegar a tiempo ("para que no se caiga en la impuntualidad reiterada") y enfocar la búsqueda a sectores gastronómicos consolidados como Barrio Italia o Alonso de Córdova.
De acuerdo a Hernández, hoy es recomendable hacer la búsqueda a la antigua: imprimir unas 30 copias del currículum y salir a entregar de restaurante en restaurante. "Es importante que se lo pases en la mano al administrador del restaurante, nunca a otro garzón. Hay que expresar el deseo de trabajar en ese lugar y ser claro en el aporte que uno puede ser para la empresa", sugiere.
Futurología estival
Paola Veloso, sales manager de la agencia de servicios de RR.HH. Visma Raet Chile, contextualiza cómo opera el empleo temporal en un verano normal: "Los empleadores en general buscan cubrir reemplazos por vacaciones, ordenar la casa haciendo inventarios u otras actividades administrativas que durante el año fueron quedando pendientes. O simplemente se generan posiciones part time para dar frente a la demanda de público".¿Y qué se proyecta para este verano tan impredecible? Veloso estima muy probable que caigan las vacantes "dada la contingencia país". A diferencia de otras temporadas, cree que "los empleadores irán evaluando sobre la marcha como se va comportando la demanda para abrir vacantes".
Hernández es más pesimista: a su entender, lo más probable es que haya una merma importante en comparación al verano anterior en cuanto a la cantidad de pitutos disponibles. Las áreas más afectadas serán probablemente la gastronomía, la hotelería y el turismo. "Aún existe incertidumbre, sobre todo de los turistas extranjeros que vendrán a nuestro país", recalca.
Enero no está muerto
Se suele pensar que el verano es pésimo para los profesionales que están en búsqueda de trabajo formal. ¿Es tan así? "Son meses bastante más movidos de lo que uno tendería a pensar", dice Benjamín Wechsler, manager sales & marketing de Spring Professional. "Los procesos de contratación, en especial los más complejos, tardan en promedio no menos de dos meses. Por lo tanto, en diciembre y especialmente enero las compañías tienden a cerrar los procesos de contratación, para que la persona tenga el tiempo prudente para dejar su actual compañía en enero o febrero y comience directamente a trabajar en marzo".Eso sí, aclara que durante la segunda quincena de febrero la cosa de verdad se pone realmente lenta. "Los que toman las decisiones no están", explica.
Las empresas financieras, dice, son las que abren más cupos de trabajo formal en esta época. "En marzo y abril esas compañías realizan los cierres a nivel contable y los balances, y muchas veces necesitan mayor dotación de profesionales. Ese reclutamiento se hace en enero y febrero, pensando en que ya en marzo deben estar totalmente operativos", cierra.