Con 79 votos a favor, 68 en contra y una abstención, la Cámara de Diputados aprobó
este martes el proyecto que crea un subsidio para que los trabajadores contratados
alcancen un ingreso mínimo de $300 mil líquidos.
Los beneficiarios de este subsidio serán los trabajadores contratados que perciban remuneraciones brutas mensuales iguales o superiores a $301 mil e inferiores a $384.363 y que pertenezcan a los nueve primeros deciles socioeconómicos, según detalla el proyecto. El monto que los trabajadores recibirán, por parte del Estado, será la diferencia que le falte a su sueldo bruto para alcanzar el ingreso mínimo líquido antes mencionado ($300 mil). Así, el proyecto pasa a la sala del Senado para ser discutido en esa última instancia.
"Lo que hicimos fue establecer una gradualidad en el beneficio, por lo tanto, es importante que aquellos que tienen un sueldo de $301.000 bruto vayan a recibir un bono o un subsidio permanente de $59.200, pero a medida que vayan aumentando sus ingresos va disminuyendo el subsidio de manera de ir incorporando a la mayor cantidad de trabajadores posible", comenta el ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel.
Aunque el proyecto del gobierno fue aprobado, los parlamentarios apoyaron una indicación que desde el Ejecutivo esperan revertir en el Senado. Dicha indicación consiste en excluir a los trabajadores que pertenecen a empresas cuyos ingresos por ventas anuales exceden las 75 mil UF. El hecho fue lamentado por el ministro Sichel y el oficialismo.
"Algunos parlamentarios de la oposición van a tener que dar una explicación de por qué dejaron a cientos de miles de trabajadores fuera de este beneficio, simplemente, porque trabajan en una empresa grande o en una empresa subcontratada", precisó el ministro a la salida de la votación.
El diputado Tomás Hirsch (del Frente Amplio) aclara el por qué de esa votación. "Voté en contra del proyecto, como lo hizo gran parte de los diputados, porque creemos que como fue presentado no cumple con los requisitos mínimos. No es posible que frente a la demanda de un aumento de salario haya un simple subsidio que va en beneficio de los empresarios, explica el diputado.
Aunque el proyecto, desde sus inicios, establece que el dinero que subsidia el ingreso mínimo va directamente al trabajador a través del pago en una cuenta RUT sin pasar por la empresa, Hirsch insiste en que la iniciativa es "indirectamente un subsidio del Estado a los empresarios, porque no se les obliga a ellos a que hagan el aporte para subir el salario mínimo. Es el empresariado el que tendría que costear desde sus utilidades un alza del salario", explica Hirsch.
"Como gobierno insistiremos en que este beneficio llegue a 668 mil trabajadores que era la meta que nos habíamos impuesto y en el Senado trataremos de reponer esta situación para que no haya esta discriminación arbitraria", precisó Sichel.
¿Qué se entiende por empresa mediana?
"Entre 75 mil y 100 mil UF no se trata de grandes empresas, son pymes; son empresas medianas. Y, por lo tanto, aquí no solo están castigando a los trabajadores de empresas grandes, están castigando a parte importante de trabajadores que se desempeñan en medianas empresas", aseveró el diputado RN Alejandro Santana.
La subsecretaria de Evaluación Social Alejandra Candia detalla que "según la clasificación del Servicio de Impuestos Internos todavía son empresas medianas las que tienen ventas anuales por 75 mil UF, por lo que obviamente esta indicación va a perjudicar al trabajador por características que no dependen de él, si no por la empresa donde trabaja", dice Candia.
Los beneficiarios de este subsidio serán los trabajadores contratados que perciban remuneraciones brutas mensuales iguales o superiores a $301 mil e inferiores a $384.363 y que pertenezcan a los nueve primeros deciles socioeconómicos, según detalla el proyecto. El monto que los trabajadores recibirán, por parte del Estado, será la diferencia que le falte a su sueldo bruto para alcanzar el ingreso mínimo líquido antes mencionado ($300 mil). Así, el proyecto pasa a la sala del Senado para ser discutido en esa última instancia.
"Lo que hicimos fue establecer una gradualidad en el beneficio, por lo tanto, es importante que aquellos que tienen un sueldo de $301.000 bruto vayan a recibir un bono o un subsidio permanente de $59.200, pero a medida que vayan aumentando sus ingresos va disminuyendo el subsidio de manera de ir incorporando a la mayor cantidad de trabajadores posible", comenta el ministro de Desarrollo Social, Sebastián Sichel.
Aunque el proyecto del gobierno fue aprobado, los parlamentarios apoyaron una indicación que desde el Ejecutivo esperan revertir en el Senado. Dicha indicación consiste en excluir a los trabajadores que pertenecen a empresas cuyos ingresos por ventas anuales exceden las 75 mil UF. El hecho fue lamentado por el ministro Sichel y el oficialismo.
"Algunos parlamentarios de la oposición van a tener que dar una explicación de por qué dejaron a cientos de miles de trabajadores fuera de este beneficio, simplemente, porque trabajan en una empresa grande o en una empresa subcontratada", precisó el ministro a la salida de la votación.
El diputado Tomás Hirsch (del Frente Amplio) aclara el por qué de esa votación. "Voté en contra del proyecto, como lo hizo gran parte de los diputados, porque creemos que como fue presentado no cumple con los requisitos mínimos. No es posible que frente a la demanda de un aumento de salario haya un simple subsidio que va en beneficio de los empresarios, explica el diputado.
Aunque el proyecto, desde sus inicios, establece que el dinero que subsidia el ingreso mínimo va directamente al trabajador a través del pago en una cuenta RUT sin pasar por la empresa, Hirsch insiste en que la iniciativa es "indirectamente un subsidio del Estado a los empresarios, porque no se les obliga a ellos a que hagan el aporte para subir el salario mínimo. Es el empresariado el que tendría que costear desde sus utilidades un alza del salario", explica Hirsch.
"Como gobierno insistiremos en que este beneficio llegue a 668 mil trabajadores que era la meta que nos habíamos impuesto y en el Senado trataremos de reponer esta situación para que no haya esta discriminación arbitraria", precisó Sichel.
¿Qué se entiende por empresa mediana?
"Entre 75 mil y 100 mil UF no se trata de grandes empresas, son pymes; son empresas medianas. Y, por lo tanto, aquí no solo están castigando a los trabajadores de empresas grandes, están castigando a parte importante de trabajadores que se desempeñan en medianas empresas", aseveró el diputado RN Alejandro Santana.
La subsecretaria de Evaluación Social Alejandra Candia detalla que "según la clasificación del Servicio de Impuestos Internos todavía son empresas medianas las que tienen ventas anuales por 75 mil UF, por lo que obviamente esta indicación va a perjudicar al trabajador por características que no dependen de él, si no por la empresa donde trabaja", dice Candia.