Son las 11:49 de la mañana de este lunes 30 de diciembre y en la pantalla de Mega,
más puntualmente en "Mucho gusto", el notero Simón Oliveros hace un contacto en
vivo mostrando el cotillón para Año Nuevo. En el estudio, Karla Constant se carcajea
con las salidas del periodista. Se ve feliz y todos en el matinal son pura risa. Pocas
horas después, en una reunión privada, la animadora suelta una bomba y el ánimo es
otro: se va del canal y este martes es su último programa.
Tras cinco años en Mega (llegó en 2014 desde Canal 13), la conductora, quien tuvo a su cargo realities y el matinal, terminaba su contrato este martes y hubo conversaciones, pero ella prefiere dejar eso en el ámbito privado, aunque aclara "esta decisión la tomé hace un tiempo atrás y por eso estoy tranquila".
-¿Por qué se va?
-Por inquietudes profesionales nuevas, proyectos nuevos y porque quiero probar cosas que se ajusten a lo que quiero hacer ahora. Quiero hacer cosas que tengan más conexión con lo social dentro de un abanico de posibilidades. Quiero que mi año 2020 esté marcado por eso.
-¿Entonces se va a otro canal?
-Por ahora no puedo decir nada, pero sí puedo decir que el estallido social trajo para mí nuevas propuestas que están más conectadas con eso (...) me han presentado propuestas de distinta índole, pero lo que más me interesa es lo social.
-¿Lo que estaba haciendo en "Mucho gusto" no le llenaba por completo?
-No, para nada, no tiene que ver con eso, uno siempre se está replanteando qué cosas quiere hacer en los próximos años. Para mi la crisis social me permitió ver dónde quiero estar conectada. El matinal me permitió estar en un minuto súper importante para el destino del país y el canal me dio la oportunidad de estar ahí, no sólo dentro del estudio sino que también fuera conectando con la gente. Eso me hizo un click súper importante que no quiero perder.
-¿Su canal de destino está sellado?
-Hay un acercamiento importante.
-¿Cuándo tomó la decisión de irse?
-Hace mucho tiempo definí que quería encausar mi camino hacia lo social. Luego ocurrió el estallido y dije "esto es un match entre los deseos personales y un momento súper importante para la gente y el país", hubo una conexión entre mis deseos y la contingencia. Es una decisión pensada, súper conciente y segura de lo que quiero hacer.
-¿Lo habló con alguien del "Mucho gusto"?
-No, tomé la decisión sola, con mi marido, y era todo tan claro que fue un sí sin duda (a la partida).
-¿Cuándo se lo contó a sus compañeros?
-Este lunes recién conversé con ellos porque no quería que se filtrara (...) fue una reunión muy bonita, muy conversada y que nos hizo muy bien. Este martes me despido en cámara, pero lo más importante era conversar con ellos y que nos dijéramos todo. Reconozco que fue muy difícil porque lo que más me cuesta de dejar el "Mucho gusto" es perder la cotidianeidad con mis amigos. Ellos son mis amigos, yo no puedo estar en un trabajo sin entablar relaciones fuertes y profundas. Me voy con la satisfacción no sólo de haber aportado en lo profesional, sino que con amistades bonitas. Este para mí, de todas maneras, ha sido el mejor año profesional. Estoy cerrando un ciclo en el matinal de más alta sintonía y todas esas cosas te dan una sensación de decir "yo pertenecí a esto, pero ya era hora de cambiar".
-¿Se emocionó en la despedida?
-Mucho y mis compañeros también porque nunca di pistas de nada, pero me gustó. Uno no toma una decisión de un día para otro. Estoy contenta por esta etapa que estoy viviendo, pero me da pena no volver a verlos a ellos.
-¿Que va a extrañar del matinal?
-El vértigo, las emociones, Pablete (Pablo Alvarado, productor ejecutivo del programa) en la muela, jajajá, todo lo cotidiano. Hacer un programa en vivo donde pasan muchas cosas, donde todo es muy rápido, donde tienes que estar muy concentrado y donde hay días que son malos y nos lo decimos y lo compartimos. Llegar temprano, estar con ellos, las intimidades, las confianzas, es difícil, pero son etapas de la vida.
-¿No se podían conciliar sus deseos de enfocarse en lo social y mantenerse en Mega?
-Lo que pasa es que por ahora no se veía esa posibilidad y ahora último empecé a tener ofrecimientos y proyectos que me calzaban súper bien.
Tras cinco años en Mega (llegó en 2014 desde Canal 13), la conductora, quien tuvo a su cargo realities y el matinal, terminaba su contrato este martes y hubo conversaciones, pero ella prefiere dejar eso en el ámbito privado, aunque aclara "esta decisión la tomé hace un tiempo atrás y por eso estoy tranquila".
-¿Por qué se va?
-Por inquietudes profesionales nuevas, proyectos nuevos y porque quiero probar cosas que se ajusten a lo que quiero hacer ahora. Quiero hacer cosas que tengan más conexión con lo social dentro de un abanico de posibilidades. Quiero que mi año 2020 esté marcado por eso.
-¿Entonces se va a otro canal?
-Por ahora no puedo decir nada, pero sí puedo decir que el estallido social trajo para mí nuevas propuestas que están más conectadas con eso (...) me han presentado propuestas de distinta índole, pero lo que más me interesa es lo social.
-¿Lo que estaba haciendo en "Mucho gusto" no le llenaba por completo?
-No, para nada, no tiene que ver con eso, uno siempre se está replanteando qué cosas quiere hacer en los próximos años. Para mi la crisis social me permitió ver dónde quiero estar conectada. El matinal me permitió estar en un minuto súper importante para el destino del país y el canal me dio la oportunidad de estar ahí, no sólo dentro del estudio sino que también fuera conectando con la gente. Eso me hizo un click súper importante que no quiero perder.
-¿Su canal de destino está sellado?
-Hay un acercamiento importante.
-¿Cuándo tomó la decisión de irse?
-Hace mucho tiempo definí que quería encausar mi camino hacia lo social. Luego ocurrió el estallido y dije "esto es un match entre los deseos personales y un momento súper importante para la gente y el país", hubo una conexión entre mis deseos y la contingencia. Es una decisión pensada, súper conciente y segura de lo que quiero hacer.
-¿Lo habló con alguien del "Mucho gusto"?
-No, tomé la decisión sola, con mi marido, y era todo tan claro que fue un sí sin duda (a la partida).
-¿Cuándo se lo contó a sus compañeros?
-Este lunes recién conversé con ellos porque no quería que se filtrara (...) fue una reunión muy bonita, muy conversada y que nos hizo muy bien. Este martes me despido en cámara, pero lo más importante era conversar con ellos y que nos dijéramos todo. Reconozco que fue muy difícil porque lo que más me cuesta de dejar el "Mucho gusto" es perder la cotidianeidad con mis amigos. Ellos son mis amigos, yo no puedo estar en un trabajo sin entablar relaciones fuertes y profundas. Me voy con la satisfacción no sólo de haber aportado en lo profesional, sino que con amistades bonitas. Este para mí, de todas maneras, ha sido el mejor año profesional. Estoy cerrando un ciclo en el matinal de más alta sintonía y todas esas cosas te dan una sensación de decir "yo pertenecí a esto, pero ya era hora de cambiar".
-¿Se emocionó en la despedida?
-Mucho y mis compañeros también porque nunca di pistas de nada, pero me gustó. Uno no toma una decisión de un día para otro. Estoy contenta por esta etapa que estoy viviendo, pero me da pena no volver a verlos a ellos.
-¿Que va a extrañar del matinal?
-El vértigo, las emociones, Pablete (Pablo Alvarado, productor ejecutivo del programa) en la muela, jajajá, todo lo cotidiano. Hacer un programa en vivo donde pasan muchas cosas, donde todo es muy rápido, donde tienes que estar muy concentrado y donde hay días que son malos y nos lo decimos y lo compartimos. Llegar temprano, estar con ellos, las intimidades, las confianzas, es difícil, pero son etapas de la vida.
-¿No se podían conciliar sus deseos de enfocarse en lo social y mantenerse en Mega?
-Lo que pasa es que por ahora no se veía esa posibilidad y ahora último empecé a tener ofrecimientos y proyectos que me calzaban súper bien.