"En mi club se exige que todas lleguen listas. Yo debía llegar tarde, competía al mediodía, pero como mi mamá es la directora técnica, llegué a las 7.30 de la mañana. Así que le dije a mi entrenadora que no me iba a hacer el moño a las 5.30 de la mañana, que me demoraba poco y mejor me lo hacía acá. Pero cuando llegué, las niñas me vieron y se derritieron al ver que no tenía moño. '¿Te podemos peinar?', me dijeron, así que fui su muñequita y me peinaron, me pusieron los moños, las mallas y los pinches. Las cosas cambiaron: antes yo tenía que peinarlas a ellas y ahora ellas me lo hacen a mi", dijo Kobler, que compartió el momento en su Instagram (kelleynata).
-¿Cómo se toma la recepción de las más pequeñas con usted, Kelley?
-Me encantan las niñitas, son lo máximo, son un amor. Ayer cuando salí del dueto me decían: "¿Kelley nos podemos sacar una foto contigo?", y yo "aaaaw". Son demasiado lindas.
-¿Cree que hay admiración?
-Yo creo, porque con Natalie Lubascher, mi antigua duet en la Selección, iniciamos esto y logramos subir mucho el nivel de la natación artística de Chile.
La nadadora de 25 años ganó el viernes en categoría equipo técnico y en dueto técnico (con Bianca Consigliere). El sábado hizo lo mismo en combo (equipos de diez) y este domingo en dueto libre (con Catalina Fleckenstein) y equipo libre. "La Cata es muy buena artísticamente y la Bianca muy buena técnicamente. Inventamos una rutina en tres días con la Bianca e intentamos calzar los tiempos todas para entrenar lo máximo posible. Al final, misión cumplida, cinco de cinco de oro", comentó.