Los nuevos globos se ubicarán en Camino La Laguna, Avenida La Dehesa con Adolfo Rodríguez y Camino Las Ermitas. Este último, será portátil y tendrá la capacidad de desinstalarse fácilmente, para trasladarlo a un punto de interés determinado según las exigencias de seguridad. Uno de ellos ya fue subido el jueves, este lunes se subirá el segundo y el tercero será subido en enero.
El director de seguridad de la municipalidad de Lo Barnechea, Juan Alfonso Valenzuela, precisó que los globos de televigilancia "se elevan hasta 120 metros de altura y cubren un radio de tres kilómetros. Tienen cámara HD y sistema infrarrojo para grabar de noche. Tienen una gran cobertura de la comuna y están ubicados en sectores estratégicos que nos ayudan a monitorear todos los sectores colindantes de los cerros y sitios eriazos por donde generalmente entran las bandas a realizar robos en lugares habitados".
Uno ejemplo que dio el funcionario fue el del globo ubicado en el sector de Puente Nuevo. "Ahí ocurría el 50% de los delitos en la comuna. El robo por sorpresa, que es el delito que ocurre en los espacios públicos, ha bajado en un 20%, por lo tanto los globos sí dan resultado, cumplen un importante rol disuasivo. También un rol post delito en la persecución penal, para entregar pruebas", cuenta Valenzuela.
Intromisión
El asunto de los globos no es nuevo. En 2015, la ONG Derechos Digitales había impugnado la instalación de los primeros aparatos a través de un recurso de protección presentado en la Corte de Apelaciones. ¿La razón? Su intromisión.Según Pablo Viollier, abogado de Derechos Digitales, iniciativas como estas vulneran derechos fundamentales como el de la privacidad, expresión y el de reunión. Y en el mejor de los casos, advierte, solo trasladan la delincuencia de un lugar a otro.
"Son políticas públicas que la gente ve y le da la sensación de seguridad, pero no son efectivos. En esa comuna ya no existe el derecho de circular de forma tranquila, sin ser vigilados de manera constante por el poder político", argumenta.
Según recuerda, el recurso de protección presentado en 2015 escaló hasta la Corte Suprema, la que finalmente aceptó su uso, pero impuso ciertos requisitos: limitarse a lugares públicos y a espacios abiertos cuando se trate de un hecho que pueda constituir un delito. Además, se estableció la supervisión mensual de un funcionario que corrobore que ningún espacio privado fuera grabado, y la destrucción de las grabaciones luego de 30 días. Además, se estipuló que cualquier ciudadano tenga acceso a las grabaciones mediante una solicitud.
En el 2017, la misma ONG solicitó que las municipalidades de Lo Barnechea y Las Condes entregaran las estadísticas de cuántas grabaciones realizadas por los globos habían sido enviadas a la Fiscalía para ser utilizadas como pruebas en procesos penales del año 2016. "La respuesta que nos entregaron en marzo de 2017, vía Transparencia, fue que no habían ocupado ninguna imagen de los globos de vigilancia para persecución penal en ambos municipios. Supuestamente el objetivo es generar pruebas para la persecución penal, pero no se había generado ni un video que fuera utilizable", afirma el abogado.