Al estar sometidos a semejante estrés, después de cumplir 40 años -15 0 20 años antes que otras zonas- se empiezan a caer y marcar. Incluso pueden llegar a formar un pliegue que se ve feo y compromete el campo visual.
O sea, pueden provocar que su rostro luzca eternamente cansado y lateado. Y nadie quiere eso.
La cirugía
La opción más conocida para tratar los párpados caídos es una cirugía que se llama blefaroplastia. "Si es por razones funcionales más que estéticas, la isapre le da cobertura a la cirugía. Los párpados caídos producen cansancio visual y se ven mal", dice la doctora Alison Ford, jefa de cirugía plástica y reconstructiva de Clínica Las Condes.En el caso de los párpados superiores, esta cirugía consiste en remover el exceso de piel.
"La cicatriz se deja escondida en el pliegue del párpado. Además, se remueven parcialmente las bolsas de grasa si están herniadas. En el caso de los párpados inferiores, en general el objetivo es remover parte de las bolsas que provocan las ojeras, ya sea por dentro del párpado o a través de la piel por una incisión que queda oculta bajo las pestañas", detalla.
Sin bisturí
Si le tiene miedo al quirófano -pero no a las máquinas de estética- hay una opción que se llama Plasmage y se ofrece en la Clínica High Care."Es una estupenda alternativa para los casos iniciales o medianos. Opera con un mecanismo de plasma; son una especie de micropuntos de alta energía que provocan una contracción de la piel y la dejan más tersa y rejuvenecida", explica el cirujano plástico Héctor Valdés.
Según dice, esta técnica supone varias ventajas respecto al bisturí: se hace en la misma consulta, no requiere anestesia invasiva ni una estadía en la clínica y es más barata. "Cada procedimiento menor que no implique riesgos es una buena idea", define.
Valdés hace hincapié en que Plasmage no es eficaz en casos muy avanzados ni retira las bolsas de los párpados. "Es una excelente técnica de iniciación que da resultados positivos, pero es más limitada en extensión, magnitud y duración que una blefaroplastia. Pero no por eso es poco interesante, el símil sería lo que es una rinomodelación a una rinoplastia".
La doctora Leila Sbir es quien aplica esta técnica en la clínica High Care. Justo el día de la entrevista había aplicado un tratamiento. "La paciente quedó impresionada de cómo el ojo le quedó abierto: sí hay resultados inmediatos", asegura.
Aclara que existen otros tratamientos ambulatorios para la zona, como la radiofrecuencia, pero no dan los mismos resultados: "Con esto los resultados son definitivos, con radiofrecuencia es transitorio. Además, tiene escasos o nulos riesgos".
Pocas cremas
Existe un arsenal de cremas para cuidar la zona ocular y prevenir arrugas, pero para los párpados la oferta es escasa. "La zona del párpado es una de las más delgadas de la piel, por eso no existen muchas cremas en el mercado: al estar cerca de los ojos puede arder e irritar si no se usa el producto adecuado", advierte Christian Urbina, director comercial de CellSkinLab.Su marca vende Cellskin Eye Advance ($37.990), crema tipo gel para el contorno de los ojos, que debería levantar el párpado superior (y también fortalecer y alargar las pestañas). Incluye complejo con extracto de árbol de seda persa que reduce arrugas e hinchazón. "Esto es cosmética inteligente. Tiene un ingrediente activo que actúa con efecto lifting, ofreciendo una alternativa no invasiva a la cirugía de párpado", promete Urbina.
Otra opción es Hada Labo Tokyo Contorno de Ojos ($14.700). "Es una crema multifuncional, formulada para tratar las señales de fatiga y edad. Se puede aplicar alrededor del ojo, incluyendo el párpado superior", explica Luciana Tieppo, gerenta de marketing de la marca.