"Primer plato cocinado por mí. Lo que mejor me quedó son las papas", escribió Pato
Torres (66 años) junto con postear en su Instagram la foto que ilustra esta nota. El
actor y locutor de Radio Corazón, que en septiembre contó que se separó de
Fernanda Titi García-Huidobro tras 16 años de relación y dos hijos juntos, aclara que
"estoy aprendiendo a cocinar platos más elaborados. Ese día fue mi hija mayor y
quise prepararle una comida especial".
Pato detalla que el plato de la foto corresponde a "lomito de cerdo a la cerveza al horno con papas y verduras salteadas. Me quedó buenísimo" y que ya tenía experiencia en la cocina. "Aprendí con mi madre a preparar platos típicos: pantrucas, charquicán, cazuela, conejo a la cacerola con mariscos, carbonada. Ahora estoy en la parada de aprender a hacer platos más sofisticados. Esta cuestión de estar solo te hace buscar cosas nuevas. Cuando viví en Estados Unidos por Sábado gigante (1993) siempre invitaba a mis compañeros de programa a comer a mi departamento. Les preparaba platos bien caseros. Hasta Mario (Kreutzberger) llegaba, lo pasábamos súper bien".
-¿Cómo ha sido volver a vivir solo, Pato?
-Bueno, aquí estoy. Aprovecho de hacer algunas cosas que me gustan a mí, pero lo principal es mantenerme ocupado cuando llego al departamento para no pensar tanto. La cocina ha sido una buena compañía. Prendo el ventilador y me pongo a cocinar muy tranquilo. A veces hago el aseo y lavo ropa, aunque tengo una nana que me ayuda una vez a la semana.
-¿Cómo es la sensación?
-Tremendamente especial. Imagínate. Tras estar años acompañado es muy especial llegar a tu departamento a estar solo. Me trae recuerdos de mi etapa de pensionado en la Universidad de Chile. Tenía 19 años cuando entré a estudiar teatro y, como era de Talca, vivía en el pensionado. Era un sistema bien democrático, dirigido por el centro de alumnos de la facultad de Artes. Habíamos estudiantes de música, danza y teatro. Todo funcionaba perfecto. Cada uno tenía asignada una función: hacer aseo y cocinar.
-¿En esa época también había nostalgia?
-Obviamente. Echaba mucho de menos a mi familia, mi gente, mi ciudad. Nos visitaban las mamás y nos llevaban cositas para comer. Eran otros tiempos. Yo no pagué ni un solo peso mientras estuve en la universidad. Así tiene que volver a ser el sistema. La educación no puede ser un negocio.
-¿Le da pena vivir solo?
-Eeeh, es una pregunta que no te voy a responder ahora. Menos en esta fecha.
-¿Cómo va a ser esta Navidad, Pato?
-Voy a trabajan Aprovechando que estoy solo vamos a tener programación en vivo (martes 24 entre las 22 y 00 horas) en la Radio Corazón. Voy a estar con los teléfonos abiertos (223812040/223812041) y traeremos algo para celebrar con los compañeros del turno. El 25 voy a estar con mis hijos.
Pato detalla que el plato de la foto corresponde a "lomito de cerdo a la cerveza al horno con papas y verduras salteadas. Me quedó buenísimo" y que ya tenía experiencia en la cocina. "Aprendí con mi madre a preparar platos típicos: pantrucas, charquicán, cazuela, conejo a la cacerola con mariscos, carbonada. Ahora estoy en la parada de aprender a hacer platos más sofisticados. Esta cuestión de estar solo te hace buscar cosas nuevas. Cuando viví en Estados Unidos por Sábado gigante (1993) siempre invitaba a mis compañeros de programa a comer a mi departamento. Les preparaba platos bien caseros. Hasta Mario (Kreutzberger) llegaba, lo pasábamos súper bien".
-¿Cómo ha sido volver a vivir solo, Pato?
-Bueno, aquí estoy. Aprovecho de hacer algunas cosas que me gustan a mí, pero lo principal es mantenerme ocupado cuando llego al departamento para no pensar tanto. La cocina ha sido una buena compañía. Prendo el ventilador y me pongo a cocinar muy tranquilo. A veces hago el aseo y lavo ropa, aunque tengo una nana que me ayuda una vez a la semana.
-¿Cómo es la sensación?
-Tremendamente especial. Imagínate. Tras estar años acompañado es muy especial llegar a tu departamento a estar solo. Me trae recuerdos de mi etapa de pensionado en la Universidad de Chile. Tenía 19 años cuando entré a estudiar teatro y, como era de Talca, vivía en el pensionado. Era un sistema bien democrático, dirigido por el centro de alumnos de la facultad de Artes. Habíamos estudiantes de música, danza y teatro. Todo funcionaba perfecto. Cada uno tenía asignada una función: hacer aseo y cocinar.
-¿En esa época también había nostalgia?
-Obviamente. Echaba mucho de menos a mi familia, mi gente, mi ciudad. Nos visitaban las mamás y nos llevaban cositas para comer. Eran otros tiempos. Yo no pagué ni un solo peso mientras estuve en la universidad. Así tiene que volver a ser el sistema. La educación no puede ser un negocio.
-¿Le da pena vivir solo?
-Eeeh, es una pregunta que no te voy a responder ahora. Menos en esta fecha.
-¿Cómo va a ser esta Navidad, Pato?
-Voy a trabajan Aprovechando que estoy solo vamos a tener programación en vivo (martes 24 entre las 22 y 00 horas) en la Radio Corazón. Voy a estar con los teléfonos abiertos (223812040/223812041) y traeremos algo para celebrar con los compañeros del turno. El 25 voy a estar con mis hijos.