Según Carabineros, ambos viajaban a bordo de una motocicleta en dirección al poniente. Tras perder el control, el frágil vehículo impactó contra un muro de contención. No hubo, según los primeros datos de la investigación, otro vehículo que haya participado en el accidente.
Según la policía, el motociclista fallecido usaba un casco de bicicleta al momento del accidente.
El capitán César Sandoval, jefe de laboratorio de la Sección de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT), lamentó que el número de accidentes de motocicletas haya ido en aumento en el último tiempo y pidió no descuidar normas tan elementales como el uso de un casco adecuado. El 2018, dijo, murieron 1.507 personas por accidentes en moto en el país, mientras que el año 2019, la cifra subió a 1.617.
El sello de calidad
En Chile, la Comisión de Seguridad de Tránsito, Conaset, exige que los cascos que se vendan en el país cumplan con alguna de las certificaciones internacionales, ya sea la estadounidense, la europea o la japonesa. Antes de ser comercializados, en todo caso, deben pasar por un proceso de certificación que realiza el Centro de Control y Certificación Vehicular (3CV), del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones.¿Qué mide esta certificación? Factores como la retención en la cabeza tras un impacto y la mantención de su rigidez ya sea a altas o bajas temperaturas, entre otros.
Abiertos y cerrados
Adquirir un casco que cumpla con la normativa vigente minimiza los riesgos, según la Conaset. El logo de certificación, como la sigla DOT (de la norma estadounidense) o la E (de la Comunidad Europea), se encuentra en la parte posterior de la carcasa externa de cada casco.Los motociclistas pueden utilizar cascos abiertos, modulares o convertibles, e integrales. Los cascos abiertos son aquellos que no tienen protección en la parte de la mandíbula. De este tipo, los más seguros son los tipo jet, que tienen protección para la nuca y orejas. Los modulares se consideran más cómodos para transitar por la ciudad, porque a velocidades menores se puede levantar la parte frontal. Sin embargo, la seguridad se ve disminuida por el mecanismo convertible de la parte lateral. Los cascos integrales son considerados los más seguros, ya que una sola pieza cubre por completo la cabeza, la mandíbula y además cuentan con una pantalla protectora para la vista.