Alteraciones respiratorias
"Uno de los grandes problemas en esta posición es que el paciente está obligado a girar la cabeza para evitar ahogarse. Y en esta posición puede tener por varias horas su cabeza rotada", dice el kinesiólogo David López, director del programa de Quiropraxia de la Universidad Central."En los lactantes, sobre todo, que duermen boca abajo se ha visto una posibilidad de aumento de alteraciones respiratorias en el sueño y un poco más de riesgo de muerte súbita", precisa la neuróloga Evelyn Benavides, de Clínica Vespucio.
Dolores cervicales
"Al mantener el cuello de lado durante gran parte de la noche, eso puede aumentar los dolores cervicales (cervicalgias) de cuello de origen articular, cabeza y dorsal", precisa López. "El dolor cervical se ve, pero, pero no es tan relevante", resalta la neuróloga.Presión en el estómago
"Si la persona duerme boca abajo y ha tenido una gran ingesta alimenticia, definitivamente tiene mayor tendencia al reflujo", precisa López."Lo ideal es dormir después de dos horas de ingesta de la última comida, cosa que el proceso de digestión ya se haya producido", acota Benavides. "La gente con reflujo debe dormir boca arriba porque de esta manera disminuye el problema o subir la cama cinco centímetros, por el lado de la cabecera", sugiere la neuróloga.
Dolores lumbares
"Al dormir boca abajo aumenta la curvatura lumbar y puede provocar la aparición de lumbalgias entre otros dolores de ligamentos y trastornos músculo-esqueléticos. Se modifican alguna curvaturas naturales de la columna y puede aumentar la hiperlordosis y si hay alguna escoliosis, podría empeorarla", resalta López.Tendinitis
"También se pueden producir tendinitis a nivel del hombro. Las personas cuando duermen boca abajo, la mayoría de las veces lo hacen con los brazos elevados, con las manos a la altura de la boca. Esto significa que el hombro está elevado y en rotación externa, una pésima posición para el hombro para estar varias horas. Esto produce una enfermedad llamada pellizcamiento de hombro ", comenta López. Y da un dato: "No hay colchones para que la gente duerma boca abajo. No existen".Ojo con las arrugas
"Al estar el rostro pegado a la almohada durante muchas horas, hay más probabilidades de que aparezcan arrugas", acota López. La neuróloga recuerda que "las arrugas tienen que ver más con un tema genético, con el tipo de colágeno".Pechos flácidos
"La mujeres que duermen en esta posición corren el riesgo de flacidez en sus pechos", alerta López y explica: "Todo el peso está aplastándolos y no fueron diseñados para resistirlo. Y si esto se prolonga, se aplanan y alargan. Todo tejido que se aplasta responde a las presiones".Ronquidos
"En algunos casos dormir boca abajo evita el ronquido porque está más amplia la vía respiratoria, pero también eso puede llegar a significar el no tener tanta libertad para inspirar profundo porque la parrilla costal anterior, que debe estar libre, estaría apoyada sobre la cama", asegura López. La doctora Benavides acota que "al dormir boca abajo se produce una acumulación de dióxido de carbono en el pequeño espacio que queda entre la abertura boca- nariz y el colchón"."Hay pacientes que dicen que durmiendo boca abajo les alivia el dolor de hombros y brazos, pero son la minoría", comenta López. "Hay harto mito. Las personas se dan vueltas durante la noche. Nadie duerme en una sola posición", puntualiza la neuróloga Benavides.
El doctor Fernando Schiferlli, neurofisiólogo, miembro de la Sociedad Chilena de Medicina del Sueño, resalta que "la posición corporal para dormir es de lado en todos los mamíferos. La excepción es el ser humano que duerme de espalda". Detalla que "dormir de espalda, con la gran cantidad de personas obesas y con apnea en Chile, puede causar alteraciones respiratorias en la noche que pueden ser graves"