La cifra de muertos por el brote del Coronavirus surgido en China ha subido al
menos a 81 personas. Hay más de 2.700 infectados; el virus llegó a más de diez
países, incluyendo Francia, Japón y Estados Unidos, y algunos expertos en salud no
están seguros de que Pekín pueda contener la epidemia aislando ciudades enteras o
con la elaboración de una vacuna.
Esos titulares del fin de semana ahondaron más el miedo entre los inversionistas de que esta enfermedad se siga extendiendo y le pegue de lleno a la economía del gigante asiático y eso en cadena contagie al crecimiento del mundo.
La consecuencia inmediata este lunes fue que todas las bolsas del mundo se fueron a pique, con un cierre de Wall Street en -1,57%, golpeadas especialmente por las acciones de aerolíneas y turismo, porque se teme que menos gente viaje. Santiago también fue arrastrada a zona negativa, bajó 1,71 %.
Pero no sólo fueron impactados los mercados bursátiles, el precio de los commodities ha venido disminuyendo constantemente y la baja de este lunes fue la novena consecutiva para el cobre al caer 3,17% y cerrar en US$2,6213 la libra. Esto, por la menor entrada de divisas, le pegó directamente al precio del dólar, que se apreció 13 pesos y llegó a los 791 pesos, el mayor nivel desde el 4 de diciembre pasado.
"Los efectos en los mercados son meramente expectativas, pero en la medida que no se encuentren vacunas exitosas, que se propague rápidamente y que hayan más muertes puede gatillar en efectos económicos más directos", dijo Juan Pablo Medina, académico de la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez.
Tomás Flores, economista del LyD, aunque dice que es imposible saber las consecuencias económicas por el Coronavirus, ejemplifica el impacto con el virus Sars que afectó entre febrero de 2003 a julio de ese año a China, que infectó a 8.076 personas y en que fallecieron 794. "Esa tasa de mortalidad es más alta que el Coronavirus y generó un efecto económico relevante en China. Cayó la cantidad de visitantes, bajaron las ventas del retail y también pegó en la construcción. Si eso llega a pasar con el Coronavirus afecta a todos los alimentos chilenos que exportamos y que llegan a los supermercados chinos y al cobre también por el impacto que puede producir en la infraestructura".
El ministro de Hacienda, Ignacio Briones, tiene más que claro el impacto que podría tener en Chile si aumenta el contagio y la mortalidad del Coronavirus: "China es nuestro principal comprador de cobre, en consecuencia lo que ocurra con las perspectivas de crecimiento económico en ese país son relevantes", comentó.
Esos titulares del fin de semana ahondaron más el miedo entre los inversionistas de que esta enfermedad se siga extendiendo y le pegue de lleno a la economía del gigante asiático y eso en cadena contagie al crecimiento del mundo.
La consecuencia inmediata este lunes fue que todas las bolsas del mundo se fueron a pique, con un cierre de Wall Street en -1,57%, golpeadas especialmente por las acciones de aerolíneas y turismo, porque se teme que menos gente viaje. Santiago también fue arrastrada a zona negativa, bajó 1,71 %.
Pero no sólo fueron impactados los mercados bursátiles, el precio de los commodities ha venido disminuyendo constantemente y la baja de este lunes fue la novena consecutiva para el cobre al caer 3,17% y cerrar en US$2,6213 la libra. Esto, por la menor entrada de divisas, le pegó directamente al precio del dólar, que se apreció 13 pesos y llegó a los 791 pesos, el mayor nivel desde el 4 de diciembre pasado.
"Los efectos en los mercados son meramente expectativas, pero en la medida que no se encuentren vacunas exitosas, que se propague rápidamente y que hayan más muertes puede gatillar en efectos económicos más directos", dijo Juan Pablo Medina, académico de la Escuela de Negocios de la Universidad Adolfo Ibáñez.
Tomás Flores, economista del LyD, aunque dice que es imposible saber las consecuencias económicas por el Coronavirus, ejemplifica el impacto con el virus Sars que afectó entre febrero de 2003 a julio de ese año a China, que infectó a 8.076 personas y en que fallecieron 794. "Esa tasa de mortalidad es más alta que el Coronavirus y generó un efecto económico relevante en China. Cayó la cantidad de visitantes, bajaron las ventas del retail y también pegó en la construcción. Si eso llega a pasar con el Coronavirus afecta a todos los alimentos chilenos que exportamos y que llegan a los supermercados chinos y al cobre también por el impacto que puede producir en la infraestructura".
El ministro de Hacienda, Ignacio Briones, tiene más que claro el impacto que podría tener en Chile si aumenta el contagio y la mortalidad del Coronavirus: "China es nuestro principal comprador de cobre, en consecuencia lo que ocurra con las perspectivas de crecimiento económico en ese país son relevantes", comentó.