Raimundo Larraín, jefe de la División de Educación General del Ministerio de
Educación, explica el Decreto 67, que aumenta los criterios que se consideran para
decidir si un alumno repite y además establece que los estudiantes ya
no podrán eximirse de algún ramo.
-¿Por qué la repitencia pasa de ser algo automático a algo excepcional?
-El foco central del proceso educativo está en que los estudiantes aprendan lo que deben, según su nivel. Para eso, los establecimientos deben proveer todos los apoyos necesarios para que ello ocurra. A partir de lo anterior, este decreto establece que la repitencia no dependerá solo de los promedios de notas o del porcentaje de asistencia, sino que se realizará un análisis integral de cada caso antes de tomar la decisión. Si es que el estudiante llegara a repetir, va a ser junto a un plan de acompañamiento, conocido por los apoderados. Sabemos que un estudiante que repite, sin un plan de acompañamiento, tiene muchas más probabilidades de desertar.
-¿Con este decreto, qué debe ocurrir para que un alumno repita? ¿Qué diferencia hay con la situación anterior?
-Hasta antes del decreto, la repitencia estaba dada por el promedio de notas y/o el porcentaje de asistencia y se producía en forma automática. La nueva normativa establece que, de presentarse los criterios de notas y/o de asistencia para repetir, se realizará un análisis exhaustivo que considere juicios profesionales pedagógicos y sicosociales, acordados en equipo, donde participen docentes y profesionales que han estado involucrados en el proceso de aprendizaje del estudiante. Además, se debe establecer un proceso de acompañamiento para los estudiantes que estén "en riesgo de repitencia", hayan pasado o no de curso.
-¿Qué significa que ya no se puede eximir un alumno de una materia? ¿Qué pasa con los que tienen problemas para hacer educación física, por ejemplo?
-Uno de los objetivos del decreto es que todos los estudiantes tengan acceso a las oportunidades de aprendizaje y evaluación, razón por la cual se establece que no habrá eximición de asignaturas o módulos completos. Esto implica que las formas de evaluar los contenidos deben diversificarse, teniendo como foco siempre el aprendizaje de los estudiantes. En el caso específico del Programa de Educación Física y Salud, los contenidos no solo pueden evaluarse haciendo un ejercicio específico sino de distintas maneras.
-¿Por qué la repitencia pasa de ser algo automático a algo excepcional?
-El foco central del proceso educativo está en que los estudiantes aprendan lo que deben, según su nivel. Para eso, los establecimientos deben proveer todos los apoyos necesarios para que ello ocurra. A partir de lo anterior, este decreto establece que la repitencia no dependerá solo de los promedios de notas o del porcentaje de asistencia, sino que se realizará un análisis integral de cada caso antes de tomar la decisión. Si es que el estudiante llegara a repetir, va a ser junto a un plan de acompañamiento, conocido por los apoderados. Sabemos que un estudiante que repite, sin un plan de acompañamiento, tiene muchas más probabilidades de desertar.
-¿Con este decreto, qué debe ocurrir para que un alumno repita? ¿Qué diferencia hay con la situación anterior?
-Hasta antes del decreto, la repitencia estaba dada por el promedio de notas y/o el porcentaje de asistencia y se producía en forma automática. La nueva normativa establece que, de presentarse los criterios de notas y/o de asistencia para repetir, se realizará un análisis exhaustivo que considere juicios profesionales pedagógicos y sicosociales, acordados en equipo, donde participen docentes y profesionales que han estado involucrados en el proceso de aprendizaje del estudiante. Además, se debe establecer un proceso de acompañamiento para los estudiantes que estén "en riesgo de repitencia", hayan pasado o no de curso.
-¿Qué significa que ya no se puede eximir un alumno de una materia? ¿Qué pasa con los que tienen problemas para hacer educación física, por ejemplo?
-Uno de los objetivos del decreto es que todos los estudiantes tengan acceso a las oportunidades de aprendizaje y evaluación, razón por la cual se establece que no habrá eximición de asignaturas o módulos completos. Esto implica que las formas de evaluar los contenidos deben diversificarse, teniendo como foco siempre el aprendizaje de los estudiantes. En el caso específico del Programa de Educación Física y Salud, los contenidos no solo pueden evaluarse haciendo un ejercicio específico sino de distintas maneras.