Desde que se inició la crisis, Christell Rodríguez casi no asoma la nariz desde su
departamento. La ex niña cantante de "Rojo" ya tiene 22 años y cursa tercer año de
la carrera de fonoaudiología en Viña del Mac Vive sola con su perro poodle y gracias
a las aplicaciones Zoom y Blackboard ha podido seguir en clases con los 7 ramos
que ha tomado para el año 2020.
"Ha sido difícil por la carga académica, pero he organizado bien mi tiempo", cuenta la cantante que por estos días está promocionado también los productos de su tienda virtual de maquillaje, Be you make up store, posando en su cuenta Instagram.
Entre las complicaciones que se le han presentado a Christell se cuenta que la carrera tiene varios ramos prácticos que en tiempos normales requieren la presencia de los alumnos.
"Una de esas asignaturas es fonoestomatología, donde aprendemos sobre la funcionalidad de las partes del cuerpo involucradas en el habla y la deglución. Deberíamos estar inspeccionando, por ejemplo, las medidas de la boca, la mandíbula y el rostro de nuestros compañeros. Obviamente eso no lo puedo hacer, así que por ahora estoy aplicándolo en mí misma", sostiene.
-¿Con un espejo, por ejemplo?
-Sí, así se puede hacer, pero es algo que hago a la espera de que se reabra la universidad. Otro ramo práctico es audiología, en que deberíamos aprender a medir la capacidad de percibir sonidos de un usuario a través de audiometrías realizadas con una máquina llamada audiómetro. Así sabemos cuánto escucha realmente una persona. ¿Pero cómo podemos hacerlo de la casa y sin los aparatos?
-¿Me lo pregunta a mi?
-No se puede. Por ahora avanzamos con el contenido teórico. Afortunadamente tengo mi notebook y una buena conexión a internet que me permite estar conectada todo el tiempo. Soy bien matea y busquilla, así que tengo mucho material como libros en PDF y lo que nos envía la universidad. Los voy imprimiendo a medida de que los necesito y luego los subrayo y marco con los muchísimos lápices que tengo en casa.
Casandra Araya fue presidenta del Colegio de Fonoaudiólogos y dirige la escuela de fonoaudiología de la Universidad de Los Andes. Sus alumnos siguen en clases empleando las plataformas Canvas y Teams, consiguiendo buenos resultados: no sólo han hecho clases, además se las han arreglado para tomar pruebas.
"La carrera tiene importantes asignaturas prácticas que implican manejar equipos y hacer observación en personas en actividades de laboratorios y campos clínicos, como hospitales o escuelas. Los alumnos aprenden de manera directa. Obviamente eso no se puede hacer por internet y retomaremos cuando podamos volver a la universidad", comenta Araya.
-Christell menciona un ramo práctico de nombre complicado: fonoestomatología.
-Claro, en esa asignatura revisamos el aparato de formación del habla: medimos mandíbulas, posibles alteraciones en la boca, piezas dentales, mordidas, la postura de los labios, etc. Por mucho que podamos adelantar contenido teórico, estrategias que permiten adelantar contenido, no reemplaza el aprendizaje real que se logra al realizar las actividades con el profesor correspondiente.
"Ha sido difícil por la carga académica, pero he organizado bien mi tiempo", cuenta la cantante que por estos días está promocionado también los productos de su tienda virtual de maquillaje, Be you make up store, posando en su cuenta Instagram.
Entre las complicaciones que se le han presentado a Christell se cuenta que la carrera tiene varios ramos prácticos que en tiempos normales requieren la presencia de los alumnos.
"Una de esas asignaturas es fonoestomatología, donde aprendemos sobre la funcionalidad de las partes del cuerpo involucradas en el habla y la deglución. Deberíamos estar inspeccionando, por ejemplo, las medidas de la boca, la mandíbula y el rostro de nuestros compañeros. Obviamente eso no lo puedo hacer, así que por ahora estoy aplicándolo en mí misma", sostiene.
-¿Con un espejo, por ejemplo?
-Sí, así se puede hacer, pero es algo que hago a la espera de que se reabra la universidad. Otro ramo práctico es audiología, en que deberíamos aprender a medir la capacidad de percibir sonidos de un usuario a través de audiometrías realizadas con una máquina llamada audiómetro. Así sabemos cuánto escucha realmente una persona. ¿Pero cómo podemos hacerlo de la casa y sin los aparatos?
-¿Me lo pregunta a mi?
-No se puede. Por ahora avanzamos con el contenido teórico. Afortunadamente tengo mi notebook y una buena conexión a internet que me permite estar conectada todo el tiempo. Soy bien matea y busquilla, así que tengo mucho material como libros en PDF y lo que nos envía la universidad. Los voy imprimiendo a medida de que los necesito y luego los subrayo y marco con los muchísimos lápices que tengo en casa.
Casandra Araya fue presidenta del Colegio de Fonoaudiólogos y dirige la escuela de fonoaudiología de la Universidad de Los Andes. Sus alumnos siguen en clases empleando las plataformas Canvas y Teams, consiguiendo buenos resultados: no sólo han hecho clases, además se las han arreglado para tomar pruebas.
"La carrera tiene importantes asignaturas prácticas que implican manejar equipos y hacer observación en personas en actividades de laboratorios y campos clínicos, como hospitales o escuelas. Los alumnos aprenden de manera directa. Obviamente eso no se puede hacer por internet y retomaremos cuando podamos volver a la universidad", comenta Araya.
-Christell menciona un ramo práctico de nombre complicado: fonoestomatología.
-Claro, en esa asignatura revisamos el aparato de formación del habla: medimos mandíbulas, posibles alteraciones en la boca, piezas dentales, mordidas, la postura de los labios, etc. Por mucho que podamos adelantar contenido teórico, estrategias que permiten adelantar contenido, no reemplaza el aprendizaje real que se logra al realizar las actividades con el profesor correspondiente.