Los productos de limpieza de uso doméstico vienen en variados formatos y
formulaciones: líquidos, gel, toallitas húmedas y aerosoles. Hoy son protagonistas
en el combate de la pandemia, pero justamente por eso ha proliferado la venta
informal -en la cuneta, la feria o el WhatsApp del edificio- de limpiadores y
desinfectantes de origen y efecto dudosos.
¿Está seguro de que ese producto realmente lo ayudará a inhabilitar el virus? "En Estados Unidos la EPA (Agencia de Protección Ambiental) publicó un listado de los desinfectantes registrados para combatir el virus. Entre los ingredientes activos se encuentra el amonio cuaternario (quats), hipoclorito de sodio, etanol, isopropanol y peróxido de hidrógeno, entre otros", detalla Lorena Lorca, ingeniera química del área de Análisis de Riesgos de la Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria (Achipia). Ella armó la tabla que acompaña esta nota.
¿Cómo saber qué ingredientes tiene el producto? "Revisando la sección de ingredientes en la etiqueta", aconseja Lorca, pero advierte que lo más importante es que el limpiador tenga una etiqueta de verdad: "Más que conocer los ingredientes, creo que es importante indicarle a la población que utilice productos de desinfección que se vendan en locales establecidos y tengan el número de registro del ISP".
¿Por qué son necesarios ambos pasos? "La limpieza se refiere a la eliminación de suciedad e impurezas. Este proceso no mata los gérmenes; por eso, luego se necesita desinfectar, lo que se refiere al uso de productos químicos -como los desinfectantes registrados en la EPA- para matar los gérmenes en las superficies", añade Manuel Meléndrez-Castro, posdoctorado en materiales híbridos y nanocompuestos y profesor de la Universidad de Concepción.
¿Cada cuánto se debe limpiar? "La frecuencia depende del movimiento que tiene su hogar y de las personas o mascotas con las que vive. Por ejemplo, si vive con personas de riesgo -como adultos mayores-, las medidas deben ser más rigurosas: realice una limpieza y desinfección de las superficies de bajo contacto (que se tocan con poca frecuencia) dos veces al día; de alto contacto, cada vez que pueda", recomienda el académico.
¿Qué objetos debiera limpiar con mayor frecuencia? "Interruptores, celulares, el control remoto, escritorios, encimeras, la puerta del refrigerador, picaportes, teclados de computador, llaves de lavamanos y lavaplatos, juguetes. La recomendación es que haga su propia lista, ya que todas las casas tienen flujos distintos. En el caso del auto o moto, no olvidar limpiar manillas, manubrio, puertas, botones, casco y otras superficies que se tocan con frecuencia", precisa.
Otro punto importante es seguir las recomendaciones del proveedor. "La concentración usada en el producto juega un rol muy importante a la hora de su uso. Puede que si lo diluya para rendirlo no funcione, o por el contrario si lo usa muy concentrado afecte la superficie que está limpiando o sea tóxico o corrosivo para las personas", agrega el docente de la UdeC. "Es primordial leer las instrucciones de uso para cada producto y usarlos solo en superficies, no en humanos ni mascotas", subraya Lorca, quien recalca la importancia del uso de guantes: "Nuestra piel es permeable y al usar estos productos se expone a que ingresen sus compuestos al organismo".
¿Está seguro de que ese producto realmente lo ayudará a inhabilitar el virus? "En Estados Unidos la EPA (Agencia de Protección Ambiental) publicó un listado de los desinfectantes registrados para combatir el virus. Entre los ingredientes activos se encuentra el amonio cuaternario (quats), hipoclorito de sodio, etanol, isopropanol y peróxido de hidrógeno, entre otros", detalla Lorena Lorca, ingeniera química del área de Análisis de Riesgos de la Agencia Chilena para la Inocuidad y Calidad Alimentaria (Achipia). Ella armó la tabla que acompaña esta nota.
¿Cómo saber qué ingredientes tiene el producto? "Revisando la sección de ingredientes en la etiqueta", aconseja Lorca, pero advierte que lo más importante es que el limpiador tenga una etiqueta de verdad: "Más que conocer los ingredientes, creo que es importante indicarle a la población que utilice productos de desinfección que se vendan en locales establecidos y tengan el número de registro del ISP".
Limpiar/desinfectar
Para sanitizar una superficie, hay que tener en cuenta dos pasos que suelen confundirse: limpiar y desinfectar. "Primero se empieza con la limpieza, que puede ser física, como barrer o pasar un paño húmedo, con agua o un limpiador, como lavalozas o un desengrasante. Luego viene el desinfectante", aclara Lorena Lorca.¿Por qué son necesarios ambos pasos? "La limpieza se refiere a la eliminación de suciedad e impurezas. Este proceso no mata los gérmenes; por eso, luego se necesita desinfectar, lo que se refiere al uso de productos químicos -como los desinfectantes registrados en la EPA- para matar los gérmenes en las superficies", añade Manuel Meléndrez-Castro, posdoctorado en materiales híbridos y nanocompuestos y profesor de la Universidad de Concepción.
¿Cada cuánto se debe limpiar? "La frecuencia depende del movimiento que tiene su hogar y de las personas o mascotas con las que vive. Por ejemplo, si vive con personas de riesgo -como adultos mayores-, las medidas deben ser más rigurosas: realice una limpieza y desinfección de las superficies de bajo contacto (que se tocan con poca frecuencia) dos veces al día; de alto contacto, cada vez que pueda", recomienda el académico.
¿Qué objetos debiera limpiar con mayor frecuencia? "Interruptores, celulares, el control remoto, escritorios, encimeras, la puerta del refrigerador, picaportes, teclados de computador, llaves de lavamanos y lavaplatos, juguetes. La recomendación es que haga su propia lista, ya que todas las casas tienen flujos distintos. En el caso del auto o moto, no olvidar limpiar manillas, manubrio, puertas, botones, casco y otras superficies que se tocan con frecuencia", precisa.
No mezclar
Ojo: ocupar mucho desinfectante o mezclar dos productos no vuelve más efectiva la limpieza. De hecho, puede ser peor. Un ejemplo: "Si mezcla hipoclorito con limpiadores a base de amoniaco, produce gases tóxicos llamados clorominas, cuya exposición causa tos, dificultad para respirar, dolor en el pecho, náuseas e irritación de garganta, nariz y ojos. Otra mezcla tóxica es blanqueador (de base cloro) con vinagre. Tampoco el alcohol (etanol) con cloro o mezclar dos productos de limpieza diferentes", advierte Meléndrez-Castro.Otro punto importante es seguir las recomendaciones del proveedor. "La concentración usada en el producto juega un rol muy importante a la hora de su uso. Puede que si lo diluya para rendirlo no funcione, o por el contrario si lo usa muy concentrado afecte la superficie que está limpiando o sea tóxico o corrosivo para las personas", agrega el docente de la UdeC. "Es primordial leer las instrucciones de uso para cada producto y usarlos solo en superficies, no en humanos ni mascotas", subraya Lorca, quien recalca la importancia del uso de guantes: "Nuestra piel es permeable y al usar estos productos se expone a que ingresen sus compuestos al organismo".