A los 29.950 conductores inscritos en el Registro Nacional de Transporte Escolar
beneficia la modificación legal que, a contar del pasado martes 19, permite a los
transportistas escolares ampliar el giro de sus servicios durante esta contingencia,
debido a que los estudiantes se encuentran en clases online y no presenciales.
Se trata de un cambio en los decretos que regulan esta actividad, lo cual habilitará a estos transportistas para "realizar diversas labores, como repartir cajas de alimentos de las que está entregando el gobierno, apoyar a los municipios en esta misma labor o incluso transportar a personal del área de la salud", explica la ministra de Transportes, Gloria Hutt.
Vanessa Tapia, quien traslada desde 2011 a estudiantes del Colegio Mar Abierto de Valparaíso en su furgón Maxus V80, es una de las beneficiadas por el municipio de su ciudad: tres veces a la semana (martes, jueves y sábado) lleva medicamentos desde la farmacia popular de la comuna hasta las casas de quienes compran por medio del call center o por internet.
"Tengo licencias Clase A3 y A5, por lo que puedo manejar tanto transporte escolar como vehículos de carga. Estoy haciendo entre 12 y 20 entregas por día, me pagan $2.000 por cada una. Gano mucho menos del millón de pesos que me hacía como furgón escolar, pero no me puedo quejar, hay otros que ni siquiera tienen trabajo", comenta.
Tapia detalla que realiza entre 12 y 20 despachos al día junto a una asistente farmacéutica que la acompaña a todos lados. "Ella se encarga de hacer entrega de las recetas, además de orientar a las personas si así lo requieren", dice. Recorre cerca de 80 kilómetros diarios y llena el estanque con 65 litros de diésel una vez a la semana ($35.000).
Sobre esta reconversión laboral, afirma que "es una ayuda que me viene bastante bien porque estaba pasando por una crisis. Tuve que congelarle la carrera universitaria a mi hijo, ya que no podía costear los $375.000 de su mensualidad".
Para quienes no se habían enterado de esta oportunidad laboral, Verónica Contreras, presidenta de la Federación de Transportistas Escolares, informa que pronto se abrirán más vacantes, información que será publicada en la página de Facebook de la entidad (Confentetuch).
"La semana pasada cerramos 30 cupos con la Municipalidad de La Florida: 15 para socios de la federación y otros 15 independientes", explica la dirigente, quien además está promoviendo la misma iniciativa en los municipios de San Bernardo, Temuco y Hualpén.
En La Florida, los transportistas escolares estarán a cargo de repartir las cajas de alimentos que entrega el municipio.
"El contacto se está haciendo principalmente a nivel de las organizaciones gremiales. Ahora mismo estamos generando cupos con dos empresas privadas, donde también se buscará incluir a trabajadores que no sean socios nuestros", añade Contreras.
La iniciativa de ampliar el rubro hacia otras áreas fue promovida por las diputadas Paulina Núñez y Marcela Sabat. Esta última comenta además que se encuentran en conversaciones con la aplicación Didi, donde "están diseñando una sección exclusiva para transportistas escolares".
"Recomiendo ocupar todos los canales posibles para informarse sobre estas oportunidades y así llegar a obtener un cupo en algún municipio", añade.
En cuanto al pago, "debería ser a través de boletas de honorarios porque ellos no formarán parte del gobierno local, sino que la municipalidad los está contratando para que les entregue un servicio transitorio", explica.
Pablo Mac-Carte, ingeniero civil industrial y académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Diego Portales, considera que se trata de "un buen empuje para este rubro que ha estado bastante parado desde el estallido social. Invito a que tanto los municipios como los privados no solo contraten a transportistas de agrupaciones federativas, sino que se abran a los trabajadores independientes. Hay más de 300 municipalidades, por lo que si todas se suman no debería faltarle trabajo a ninguno de ellos".
Se trata de un cambio en los decretos que regulan esta actividad, lo cual habilitará a estos transportistas para "realizar diversas labores, como repartir cajas de alimentos de las que está entregando el gobierno, apoyar a los municipios en esta misma labor o incluso transportar a personal del área de la salud", explica la ministra de Transportes, Gloria Hutt.
Vanessa Tapia, quien traslada desde 2011 a estudiantes del Colegio Mar Abierto de Valparaíso en su furgón Maxus V80, es una de las beneficiadas por el municipio de su ciudad: tres veces a la semana (martes, jueves y sábado) lleva medicamentos desde la farmacia popular de la comuna hasta las casas de quienes compran por medio del call center o por internet.
"Tengo licencias Clase A3 y A5, por lo que puedo manejar tanto transporte escolar como vehículos de carga. Estoy haciendo entre 12 y 20 entregas por día, me pagan $2.000 por cada una. Gano mucho menos del millón de pesos que me hacía como furgón escolar, pero no me puedo quejar, hay otros que ni siquiera tienen trabajo", comenta.
Tapia detalla que realiza entre 12 y 20 despachos al día junto a una asistente farmacéutica que la acompaña a todos lados. "Ella se encarga de hacer entrega de las recetas, además de orientar a las personas si así lo requieren", dice. Recorre cerca de 80 kilómetros diarios y llena el estanque con 65 litros de diésel una vez a la semana ($35.000).
Sobre esta reconversión laboral, afirma que "es una ayuda que me viene bastante bien porque estaba pasando por una crisis. Tuve que congelarle la carrera universitaria a mi hijo, ya que no podía costear los $375.000 de su mensualidad".
Para quienes no se habían enterado de esta oportunidad laboral, Verónica Contreras, presidenta de la Federación de Transportistas Escolares, informa que pronto se abrirán más vacantes, información que será publicada en la página de Facebook de la entidad (Confentetuch).
"La semana pasada cerramos 30 cupos con la Municipalidad de La Florida: 15 para socios de la federación y otros 15 independientes", explica la dirigente, quien además está promoviendo la misma iniciativa en los municipios de San Bernardo, Temuco y Hualpén.
En La Florida, los transportistas escolares estarán a cargo de repartir las cajas de alimentos que entrega el municipio.
"El contacto se está haciendo principalmente a nivel de las organizaciones gremiales. Ahora mismo estamos generando cupos con dos empresas privadas, donde también se buscará incluir a trabajadores que no sean socios nuestros", añade Contreras.
La iniciativa de ampliar el rubro hacia otras áreas fue promovida por las diputadas Paulina Núñez y Marcela Sabat. Esta última comenta además que se encuentran en conversaciones con la aplicación Didi, donde "están diseñando una sección exclusiva para transportistas escolares".
Con los municipios
El economista Tomás Flores, investigador de Libertad y Desarrollo y ex subsecretario, estima esta es "una medida correcta, ya que fue el gobierno el que dejó sin actividad a estos trabajadores al prohibir las clases presenciales. Entonces es una muy buena oportunidad utilizar esa mano de obra con sus respectivos equipos (vehículos) para otras funciones que en estos momentos son muy necesarias"."Recomiendo ocupar todos los canales posibles para informarse sobre estas oportunidades y así llegar a obtener un cupo en algún municipio", añade.
En cuanto al pago, "debería ser a través de boletas de honorarios porque ellos no formarán parte del gobierno local, sino que la municipalidad los está contratando para que les entregue un servicio transitorio", explica.
Pablo Mac-Carte, ingeniero civil industrial y académico de la Facultad de Ingeniería y Ciencias de la Universidad Diego Portales, considera que se trata de "un buen empuje para este rubro que ha estado bastante parado desde el estallido social. Invito a que tanto los municipios como los privados no solo contraten a transportistas de agrupaciones federativas, sino que se abran a los trabajadores independientes. Hay más de 300 municipalidades, por lo que si todas se suman no debería faltarle trabajo a ninguno de ellos".