Hace un mes, Palestino, como club, decidió entregar cajas con mercadería a los
socios de La Cisterna. En esa oportunidad participó el plantel profesional masculino
y femenino. Esta semana la historia se repite, pero con dos diferencias: los que
organizaron esto son los mismos jugadores y será en Estación Central, una de las
comunas golpeadas por el coronavirus.
"Esto nació de un grupo de WhatsApp que tenemos con César Cortés y Agustín Farías, que somos los tres capitanes del equipo. Viendo todo lo que está pasando, decidimos ayudar de alguna manera, intentando incluir a todas las personas que son parte del plantel profesional", explica Jiménez.
Lo primero fue definir de qué forma entregarían la ayuda. "Entendemos que estar en las casas es la forma más segura de poder evitar contagios y entendemos que obviamente hay familias que al no salir de las casas para trabajar, no tienen los recursos para poder generar ingresos y, por ende, se ven disminuidos sus alimentos. Así que nos decidimos por la caja", detalla el capitán.
Los tres capitanes decidieron qué alimentos irían en la caja, basándose en la que había entregado anteriormente el club, pero hicieron un par de cambios. "Hicimos cambios prácticos porque había alimentos que podían servir más que otros. Por ejemplo, queríamos poner fruta en conserva, pero lo cambiamos por legumbres. Son alimentos no perecibles, que la familia la puede usar cuando necesite", explica el Mago.
Lo segundo, era sumar más gente para poder materializar la idea. "Escribimos en el grupo que tenemos como plantel para que se unieran los que quisieran colaborar y se sumó la gran mayoría. Incluso gente del cuerpo técnico, del cuerpo médico, masajistas y fisioterapeutas. Todos se pusieron de alguna manera y logramos lo que estábamos buscando, que era no quedar al margen de esta situación", añade.
La parte más complicada siempre es organizar. "Cada uno iba poniendo cuántas cajas podía donar, dependiendo de la capacidad que tenía cada uno ayudar. Era totalmente voluntario, así que pusimos una cuenta y logramos obtener las 345 cajas. Luego vino el recuento de las cajas y los depósitos. Eso lo vimos los tres y fue bastante fluído", cuenta el mediocampista César Cortés.
Eso sí necesitaban cumplir con la compra de las cajas sin que ningún miembro del plantel saliera de sus casas y se expusiera al contagio. "Luis se consiguió un contacto de un supermercado mayorista, lo que nos facilitó todo. Antes de conseguir el contrato de la distribuidora estuvimos varios días estancados con la idea porque nadie podía salir a comprar y nadie vende esas cantidades de productos. Además teníamos el problema de la distribución", explica Cortés. Además llegaron a un acuerdo: la entrega corre por cuenta de la municipalidad.
"Esto nació de un grupo de WhatsApp que tenemos con César Cortés y Agustín Farías, que somos los tres capitanes del equipo. Viendo todo lo que está pasando, decidimos ayudar de alguna manera, intentando incluir a todas las personas que son parte del plantel profesional", explica Jiménez.
Lo primero fue definir de qué forma entregarían la ayuda. "Entendemos que estar en las casas es la forma más segura de poder evitar contagios y entendemos que obviamente hay familias que al no salir de las casas para trabajar, no tienen los recursos para poder generar ingresos y, por ende, se ven disminuidos sus alimentos. Así que nos decidimos por la caja", detalla el capitán.
Los tres capitanes decidieron qué alimentos irían en la caja, basándose en la que había entregado anteriormente el club, pero hicieron un par de cambios. "Hicimos cambios prácticos porque había alimentos que podían servir más que otros. Por ejemplo, queríamos poner fruta en conserva, pero lo cambiamos por legumbres. Son alimentos no perecibles, que la familia la puede usar cuando necesite", explica el Mago.
Lo segundo, era sumar más gente para poder materializar la idea. "Escribimos en el grupo que tenemos como plantel para que se unieran los que quisieran colaborar y se sumó la gran mayoría. Incluso gente del cuerpo técnico, del cuerpo médico, masajistas y fisioterapeutas. Todos se pusieron de alguna manera y logramos lo que estábamos buscando, que era no quedar al margen de esta situación", añade.
La parte más complicada siempre es organizar. "Cada uno iba poniendo cuántas cajas podía donar, dependiendo de la capacidad que tenía cada uno ayudar. Era totalmente voluntario, así que pusimos una cuenta y logramos obtener las 345 cajas. Luego vino el recuento de las cajas y los depósitos. Eso lo vimos los tres y fue bastante fluído", cuenta el mediocampista César Cortés.
Eso sí necesitaban cumplir con la compra de las cajas sin que ningún miembro del plantel saliera de sus casas y se expusiera al contagio. "Luis se consiguió un contacto de un supermercado mayorista, lo que nos facilitó todo. Antes de conseguir el contrato de la distribuidora estuvimos varios días estancados con la idea porque nadie podía salir a comprar y nadie vende esas cantidades de productos. Además teníamos el problema de la distribución", explica Cortés. Además llegaron a un acuerdo: la entrega corre por cuenta de la municipalidad.