-->

Escribe y presiona enter

On
Coté López y su libro Tú tampoco eras para mí
Desde hace seis años que María José"Coté" López tenía la idea de escribir una novela. Sólo había redactado 40 páginas cuando llegó el confinamiento por el coronavirus y al instalarse en su casa, en Santiago, terminó ese proyecto y concretó" Tú tampoco eras para mí", una "novela de romance y erotismo" de 208 páginas que, según agrega ella, trata de "Izabella, una joven de 27 años, psicóloga e hija de un dueño de un canal de televisión italiano, que está en búsqueda del amor y no le resulta mucho".

Como un adelanto para sus seguidores, la rubia publicó tres páginas del inicio de su libro en la cuenta de Instagram @tutampocoerasparami. "No me inspiré en ningún hecho real, es todo imaginación. Nada de la historia me pasó a mí, ni a mis conocidos", asegura.

Esos fragmentos del libro los subió para mostrarles a sus seguidores que todo había sido escrito por ella. Dice que no quiso trabajar con una editorial para que no le modificaran su texto. "Muchas palabras las escribí a propósito con tilde (no llevan) porque quería darles una entonación: quería que la gente lo lea como yo quiero que escuchen a la protagonista. Por eso es muy importante que la persona que va a leer, lea para entretenerse y lea tal cual como lo escribí", explica.

Coté López cuenta que siempre le ha gustado leer e inventar historias. "Tengo tanta imaginación, entonces, cada vez que tenía un sueño decía estaría buenísimo escribir algo de esto. De la nada empezaba a imaginar historias y cuando chica me gustaba escribir hasta obras de teatro", confiesa.

-¿Cómo escribía? ¿tenía una rutina?
-Escribía generalmente en la noche, en mi pieza, me quedaba hasta como las cuatro de la mañana escribiendo todos los días y así se los enviaba a quienes lo estaban leyendo conmigo que eran mi nuera (polola de Diego, hijo mayor de Luis Jiménez, su marido) y una amiga, luego se sumaron mis cuñadas. Entonces estaban todo el rato esperando y me presionaban. Cuando les mandaba cinco hojas me decían "pero cómo, me dejaste metida", entonces tenía que mandarles 30 páginas al día, por eso fue súper rápido.

- ¿Por qué escribía sólo de noche?
-El único tiempo que tenía disponible era ese, porque con los niños era difícil durante el día. Sobre todo porque yo no quería que lo leyeran, porque tiene partes elevaditas de tono, entonces cada vez que tomaba el computador se ponían al lado, porque siempre están pegados a mí.

-¿Cómo se sintió escribiendo?
-Escribir me da un poco de entretención, podríamos decir que, en esos ratos, me sacaba de encima lo que estamos viviendo.

El siquiatra Lister Rossel, jefe de la Unidad de Trastornos del Ánimo de la Clínica Las Condes, resalta la importancia de hacer otras actividades, como escribir, en medio de la pandemia: "Escribir, desde luego, es una distracción para los trastornos de ansiedad, principalmente, la ansiedad fóbica, más frecuente en la actualidad por un miedo específico al contagio, a la posible enfermedad y a sus complicaciones. Lo propio de la ansiedad fóbica es el pensamiento continuo del peligro por tanto cualquier actividad que nos distraiga de esos pensamientos es sumamente útil. Es un desvío de atención, que puede ser a través de la escritura, del ejercicio físico o de conversaciones interesantes". Agrega que la escritura "lleva a la reflexión, a tomar distancia de la situación actual y repensarla, tomando distancia de lo cotidiano. Es un recurso frecuente utilizado en terapias sicológicas".

Coté López tiene planeado comenzar a vender el libro el próximo fin de semana a través de una página web que pronto habilitará. Tendrá un valor de $9.990 y las ganancias las transformará en cajas de donaciones. "Me parece bonito que la gente que lo compre sepa que va a estar ayudando", comenta.

Click para comentar