Se emociona el doctor Giovanni Daneri, director del Centro de Investigación en
Ecosistemas de la Patagonia (Ciep), al comentar el gesto de académicos e
investigadores de la Universidad de Génova, que bautizaron una esponja recién
descubierta en Aysén con su apellido, el mismo que heredó de su abuelo italiano,
emigrante de esa misma zona de Liguria. Se trata de la Acanthella Danerii , hallada a
20 metros de profundidad en el Seno Magdalena y cuya presentación científica se
acaba de publicar en la revista especializada "Zootaxa".
"De buena onda le pusieron mi apellido", dice. "Yo no me lo esperaba, me lo mandaron y me emocionaron un poco", agrega.
Primero, una esponja es un animal "muy primitivo", como dice Daneri, que filtra agua, pero su estado indica cómo está ese ambiente. "Están compuestas por poros, por donde entra el agua y las partículas que hay las van filtrando y las van incorporando a sus tejidos".
Advierte que son bastante pequeñas, pero la mayoría de las personas tiene la percepción de que son más grandes.
El doctor y master en Oceanografía de la Universidad Southampton, Inglaterra, explica que gracias a los investigadores de la Universidad de Génova descubrieron la gran diversidad de esponjas en Chile. "En especies nuevas, en temas de esponjas, ya se describieron dos nuevas para la ciencia el 2017. Ahora tenemos un nuevo manuscrito, que está en revisión, donde están estudiándose seis esponjas más y todas de la zona del canal Puyuhuapi y Magdalena", dice Daneri.
Según cuenta, la gracia está en que en Aysén "tenemos muchas especies que también están en la Antártica o son parientes de especies que hay allá". Pero estas esponjas no sólo tienen esas potencialidades, sino que también pueden ser un polo de turismo científico, porque "sin tener que ir a la Antártica, se puede vivir la misma experiencia de ver a todas estas especies".
Dice que se trabaja a toda velocidad con los europeos, porque "como país hemos perdido los taxónomos que teníamos y estamos un poco complicados".
"De buena onda le pusieron mi apellido", dice. "Yo no me lo esperaba, me lo mandaron y me emocionaron un poco", agrega.
Primero, una esponja es un animal "muy primitivo", como dice Daneri, que filtra agua, pero su estado indica cómo está ese ambiente. "Están compuestas por poros, por donde entra el agua y las partículas que hay las van filtrando y las van incorporando a sus tejidos".
Advierte que son bastante pequeñas, pero la mayoría de las personas tiene la percepción de que son más grandes.
El doctor y master en Oceanografía de la Universidad Southampton, Inglaterra, explica que gracias a los investigadores de la Universidad de Génova descubrieron la gran diversidad de esponjas en Chile. "En especies nuevas, en temas de esponjas, ya se describieron dos nuevas para la ciencia el 2017. Ahora tenemos un nuevo manuscrito, que está en revisión, donde están estudiándose seis esponjas más y todas de la zona del canal Puyuhuapi y Magdalena", dice Daneri.
Según cuenta, la gracia está en que en Aysén "tenemos muchas especies que también están en la Antártica o son parientes de especies que hay allá". Pero estas esponjas no sólo tienen esas potencialidades, sino que también pueden ser un polo de turismo científico, porque "sin tener que ir a la Antártica, se puede vivir la misma experiencia de ver a todas estas especies".
Dice que se trabaja a toda velocidad con los europeos, porque "como país hemos perdido los taxónomos que teníamos y estamos un poco complicados".