Dos nuevas ciudades entrarán en cuarentena partir de este martes 9 de junio:
Calama y San Antonio, anunció el ministro de salud Jaime Mañalich en el balance
diario de este domingo. La primera "ha tenido un aumento muy importante de los
casos de coronavirus en los últimos días y semanas, que asociamos
lamentablemente con una desprolijidad en las medidas de distanciamiento social.
Se han mantenido en forma muy intensa las fiestas clandestinas y reuniones
sociales", aseguró el ministro.
Así lo confirmó el alcalde de Calama, Daniel Agusto: "Hemos visto que la gente no respetó el toque de queda, encontramos gran cantidad de fiestas y expendios de alcohol clandestinos e incluso en la última semana hemos vivido delitos violentos durante horarios de toque queda, por lo que tendremos que generar coordinación con las FFAA y Carabineros para poder buscar la mejor manera de control de la cuarentena", comentó.
En el caso de San Antonio, por su parte, "tenemos un constante número muy elevado de casos que afecta y compromete la capacidad asistencial de toda la región", explicó el ministro Mañalich. Además, la comuna ya tenía cordón sanitario.
El último informe epidemiológico, publicado este viernes 5 de junio, alertaba que Calama presentaba 626 casos confirmados, con una tasa de incidencia de 328,9 positivos cada 100.000 habitantes, mientras que San Antonio sumaba 472 confirmados y una tasa de incidencia de 487,8, la mayor de la Quinta Región.
Para el académico de salud pública de la Universidad Católica, Jaime Sapag, esos son solo algunos de los factores epidemiológicos que explican la decisión del ministerio: "Para tomar estas decisiones priman varios componentes, por una parte el número de casos y su evolución en el tiempo, en particular cuántos casos nuevos están apareciendo en proporción al número de habitantes, lo que sería la tasa de incidencia", explica.
"Pero también hay otros factores que se deben considerar, como en qué territorio se están dando estos nuevos casos, la densidad poblacional y otro tema importante: la capacidad de respuesta del sistema sanitario, desde el punto de vista de la infraestructura, como los hospitales y las salas UCI que estén disponibles en ese territorio", añade el académico, quien es director del magister en salud pública de la UC. Ese parece ser el caso de la comuna de San Antonio, según explicó el ministro de salud al momento de anunciar la medida.
Para Sapag, la movilidad poblacional y la cantidad de población flotante que tienen estas ciudades también es un factor importante: "En ese sentido, a simple vista podemos decir que Calama es un sector minero, más distante de otras ciudades pero que presenta mucha población flotante por su actividad económica, mientras que San Antonio es un puerto cercano a la Región Metropolitana, un lugar donde hay muchos casos y que se encuentran en constante comunicación".
"La cuarentena, como medida de prevención, es un mecanismo potente pero muy difícil, que depende a la vez de que otras estrategias como la detección, el aislamiento, la trazabilidad y la respuesta del sistema sanitario también funcionen bien", cierra el académico.
Así lo confirmó el alcalde de Calama, Daniel Agusto: "Hemos visto que la gente no respetó el toque de queda, encontramos gran cantidad de fiestas y expendios de alcohol clandestinos e incluso en la última semana hemos vivido delitos violentos durante horarios de toque queda, por lo que tendremos que generar coordinación con las FFAA y Carabineros para poder buscar la mejor manera de control de la cuarentena", comentó.
En el caso de San Antonio, por su parte, "tenemos un constante número muy elevado de casos que afecta y compromete la capacidad asistencial de toda la región", explicó el ministro Mañalich. Además, la comuna ya tenía cordón sanitario.
El último informe epidemiológico, publicado este viernes 5 de junio, alertaba que Calama presentaba 626 casos confirmados, con una tasa de incidencia de 328,9 positivos cada 100.000 habitantes, mientras que San Antonio sumaba 472 confirmados y una tasa de incidencia de 487,8, la mayor de la Quinta Región.
Para el académico de salud pública de la Universidad Católica, Jaime Sapag, esos son solo algunos de los factores epidemiológicos que explican la decisión del ministerio: "Para tomar estas decisiones priman varios componentes, por una parte el número de casos y su evolución en el tiempo, en particular cuántos casos nuevos están apareciendo en proporción al número de habitantes, lo que sería la tasa de incidencia", explica.
"Pero también hay otros factores que se deben considerar, como en qué territorio se están dando estos nuevos casos, la densidad poblacional y otro tema importante: la capacidad de respuesta del sistema sanitario, desde el punto de vista de la infraestructura, como los hospitales y las salas UCI que estén disponibles en ese territorio", añade el académico, quien es director del magister en salud pública de la UC. Ese parece ser el caso de la comuna de San Antonio, según explicó el ministro de salud al momento de anunciar la medida.
Para Sapag, la movilidad poblacional y la cantidad de población flotante que tienen estas ciudades también es un factor importante: "En ese sentido, a simple vista podemos decir que Calama es un sector minero, más distante de otras ciudades pero que presenta mucha población flotante por su actividad económica, mientras que San Antonio es un puerto cercano a la Región Metropolitana, un lugar donde hay muchos casos y que se encuentran en constante comunicación".
"La cuarentena, como medida de prevención, es un mecanismo potente pero muy difícil, que depende a la vez de que otras estrategias como la detección, el aislamiento, la trazabilidad y la respuesta del sistema sanitario también funcionen bien", cierra el académico.