"La extraño mucho, además de todo lo que ha hecho por mí es mi mejor amiga". Rodrigo Andrés del Real (38), músico conocido como Rigeo, habla respecto de María Paz Fuentes, su madre, de quien está separada por razones pandémicas. "Es duro no poder abrazarla, sobre todo en días especiales como éste", sigue él.
Del Real se refiere al cumpleaños de su progenitora, madre de cuatro hijos (entre ellos Daniela Aránguiz), que renovaba calendario este viernes. "Pasamos Navidad juntos y después vino una gira que me tocó. La vida del músico es así a veces, toca viajar harto. A fines de enero la vi en vivo por última vez, me tocó harto trabajo y después pasó lo del coronavirus. Ha sido difícil no estar con ella", agrega él, sin revelar qué edad cumplió. "Ella me mata si lo digo, pero está en el grupo de riesgo, así es que tiene que cuidarse", sostiene.
-¿Qué hizo para su cumpleaños?
-Ella está pasando la cuarentena con mi hermana Fernanda (21), y yo fui en auto este jueves como a las siete de la tarde a dejarle un regalo. Se lo dejé en una canastita. Esperé para ver si abría ella, pero no pasó. Me dolió no abrazarla, fue emocionante, triste a la vez. Se hace duro no poder decirle todo lo que la quiero en vivo.
-No es lo mismo, pero también están las videollamadas.
-Claro, o sea, hablamos muy seguido. En la mañana, en la tarde... a la medianoche de este viernes mis hermanos y yo la llamamos por video. Le cantamos el "Cumpleaños feliz" cada uno desde su casa. Conversamos como una hora entre todos, lo tratamos de hacer alegre, pero después de eso quedé achacado.
Tras la videollamada relatada, el cantante y compositor usó su perfil de Instagram (Rigeo, 117 mil seguidores) para rendirle unas sentidas palabras. Ahí la definió como "una mujer valiente, con carácter", que "crió a sus 4 hijos sola". "Nunca un papá se puso con nada y ello no pidió nada. Muchas veces acompañé tu pena y vi tu esfuerzo... Hoy de grande veo todo lo que hiciste por nosotros", le escribió.
El hijo retoma: "A mí me criaron mi abuela y mi mamá. Yo no tuve papá, no lo vi. Cuando tenía problemas en el colegio, ella daba la cara por mí. Mi mamá trabajaba en financieras, bancos, llegaba a la hora del té, toda cansada y se preocupaba igual de todo. Nunca tuvo auto, tomaba micro. Muchas veces la iba a buscar por miedo a que la asaltaran. Mi abuela murió cuando yo tenía 16 años, y ella nos sacó adelante sola. Nos dio valores, nos metió terror con las drogas, era de la vieja escuela y lo agradezco tanto".
-¿Qué te gustaría hacer por ella?
-Abrazarla, estar ahí de nuevo. Yo era de sacarla al menos una vez a la semana a tomar un desayuno rico, a conversar de la vida. Nosotros hablamos mucho, ella sabe todo de mí. A veces nos quedamos horas hablando tras el desayuno, nos da la hora para almorzar y nos quedamos a almorzar. Es de esas mamás choras.
-¿A qué se refiere?
-Ponte tú, si le digo que salgamos ella me acompaña. Salimos, nos tomamos un traguito. Ella siempre aperra, es mi mejor amiga. Pero yo sé que pronto nos vamos a encontrar. Y ahí nadie nos va a separar.