En la semana entre el sábado 20 y el viernes 26 de junio, la Comisaría Virtual de
Carabineros otorgó 5.811.3589 permisos para los ciudadanos que se encuentran en
cuarentenas a nivel nacional. La mayor mayor parte de las solicitudes se cursó para
realizar compras de insumos básicos, con notables diferencias entre algunos días.
Según las cifras, en la jornada del sábado 20 de junio se solicitaron más de 850 mil permisos para compras. Con sólo dos permisos semanales disponibles para la ciudadanía (incluyendo los de otro tipo), es crucial optimizar los tiempos y las prioridades de cada familia, según explica Roberto Zúñig, jefe de carrera de Logística y Comercio Exterior del Instituto Profesional y Centro de Formación Técnica Santo Tomás: "Lo primero que hay que hacer es organizar cuál es el nivel de compras que necesito, si son alimentos de primera necesidad. Una idea es categorizar los productos y organizarnos por período de tiempo, no salir a comprar para el día o dos. Lo ideal es favorecer el consumo de productos no perecibles y organizarlo a través del tiempo".
¿Sigue siendo buena idea ir una vez a la semana o es mejor disminuirlo? "Hay que aprovechar que estamos en la casa y dejar la costumbre que tenemos de ir el sábado a comprar a la feria o al supermercado y ojalá ir entre martes y jueves. Tenemos que organizar dependiendo del número de personas que componen el grupo familiar. Organizarse para comprar una vez a la semana y ojalá cada 15 días", destaca Zúñiga.
¿Comprar mercadería para un mes, podría terminar en un sobreestock para la casa? "Cuando uno no se organiza pasa eso. Si compras cosas que no tienes contemplado ocupar tiendes a sobrestokear la despensa. Es fundamental organizarse, especialmente en tiempos de pandemia, hay que pensar que no es la normalidad a la que estábamos acostumbrados", agrega.
Bernardita Silva, gerente de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio, estima que las cifras de permisos están en línea con el comportamiento que existía antes de la pandemia. "Si uno mira las compras en los supermercados, los días fuertes en el sector son viernes, sábado y domingo. Se debe a que en esos días las personas tienen más tiempo. Aunque estemos en cuarentena hay gente con teletrabajo, tareas de niños o labores de hogar y, probablemente, siguen con la rutina de comprar el fin de semana", sostiene.
Fernando Valenzuela, doctor en sociología, destaca que los datos corresponden a una sola semana, por lo que es difícil generalizar el comportamiento. "Según eso, las prácticas de compras pueden responder, por un lado, a una hipótesis estructural que tiene que ver con las necesidades de las familias y otra que corresponde a los hábitos", plantea el director de la carrera de sociología de la Universidad Andrés Bello, sede Viña del Mar.
"En el escenario anterior las personas podían salir a comprar durante la semana porque el horario del trabajo era delimitado. Hoy en día los horarios de trabajo se han extendido muchísimo. No es que las personas quieran comprar los fines de semana sino que las responsabilidades de trabajo se distribuyen en los días hábiles", explica el sociólogo.
"Los hábitos pueden ser muy valiosos en estos tiempos, cuando se hace difícil anticipar eventos futuros dada la profunda incertidumbre que estamos viviendo. Los hábitos más que nunca son estructuras que cimientan y estabilizan nuestra experiencia cotidiana del mundo. Nos dan un sentido de seguridad en un entorno altamente incierto", reflexiona Valenzuela.
Según las cifras, en la jornada del sábado 20 de junio se solicitaron más de 850 mil permisos para compras. Con sólo dos permisos semanales disponibles para la ciudadanía (incluyendo los de otro tipo), es crucial optimizar los tiempos y las prioridades de cada familia, según explica Roberto Zúñig, jefe de carrera de Logística y Comercio Exterior del Instituto Profesional y Centro de Formación Técnica Santo Tomás: "Lo primero que hay que hacer es organizar cuál es el nivel de compras que necesito, si son alimentos de primera necesidad. Una idea es categorizar los productos y organizarnos por período de tiempo, no salir a comprar para el día o dos. Lo ideal es favorecer el consumo de productos no perecibles y organizarlo a través del tiempo".
¿Sigue siendo buena idea ir una vez a la semana o es mejor disminuirlo? "Hay que aprovechar que estamos en la casa y dejar la costumbre que tenemos de ir el sábado a comprar a la feria o al supermercado y ojalá ir entre martes y jueves. Tenemos que organizar dependiendo del número de personas que componen el grupo familiar. Organizarse para comprar una vez a la semana y ojalá cada 15 días", destaca Zúñiga.
¿Comprar mercadería para un mes, podría terminar en un sobreestock para la casa? "Cuando uno no se organiza pasa eso. Si compras cosas que no tienes contemplado ocupar tiendes a sobrestokear la despensa. Es fundamental organizarse, especialmente en tiempos de pandemia, hay que pensar que no es la normalidad a la que estábamos acostumbrados", agrega.
Bernardita Silva, gerente de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio, estima que las cifras de permisos están en línea con el comportamiento que existía antes de la pandemia. "Si uno mira las compras en los supermercados, los días fuertes en el sector son viernes, sábado y domingo. Se debe a que en esos días las personas tienen más tiempo. Aunque estemos en cuarentena hay gente con teletrabajo, tareas de niños o labores de hogar y, probablemente, siguen con la rutina de comprar el fin de semana", sostiene.
Fernando Valenzuela, doctor en sociología, destaca que los datos corresponden a una sola semana, por lo que es difícil generalizar el comportamiento. "Según eso, las prácticas de compras pueden responder, por un lado, a una hipótesis estructural que tiene que ver con las necesidades de las familias y otra que corresponde a los hábitos", plantea el director de la carrera de sociología de la Universidad Andrés Bello, sede Viña del Mar.
"En el escenario anterior las personas podían salir a comprar durante la semana porque el horario del trabajo era delimitado. Hoy en día los horarios de trabajo se han extendido muchísimo. No es que las personas quieran comprar los fines de semana sino que las responsabilidades de trabajo se distribuyen en los días hábiles", explica el sociólogo.
"Los hábitos pueden ser muy valiosos en estos tiempos, cuando se hace difícil anticipar eventos futuros dada la profunda incertidumbre que estamos viviendo. Los hábitos más que nunca son estructuras que cimientan y estabilizan nuestra experiencia cotidiana del mundo. Nos dan un sentido de seguridad en un entorno altamente incierto", reflexiona Valenzuela.