La ingeniera comercial Camila Anich (29) notó que, desde el verano, comenzó a
recibir crecientes consultas en su Instagram sobre cómo recuperó la figura después
del embarazo.
La señora del periodista Mario Mauriziano tenía una cintura de 61 centímetros, antes de quedar embarazada, y ahora, cuando su hija Jacinta tiene 9 meses, luce 63 centímetros. Durante el proceso de gestación llegó a pesar 69 kilos -pesaba 56-, y ahora está en 53, para una altura de 1,64 metros.
"Me preguntan mucho mujeres que están embarazadas y las que fueron mamás hace poco sobre cómo reducir la cintura. Las consultas son entre 10 a 15 por los stories que publico en relación con el tema. Son números aproximados, porque no llevo la cuenta", explica.
-¿Y qué les responde?
-Les cuento mi experiencia, las trato de motivar con el deporte y la alimentación sana, aparte de compartirles las sensaciones que viví en el embarazo. Las mujeres se interesan en saber qué como, las cantidades y los horarios. Mi recomendación es lograr una mezcla de 70% de alimentación y 30% de deporte.
-¿Cómo lo hace con la alimentación?
-A lo largo de mi vida he ido a nutricionistas y leo mucho sobre el tema. Con todo eso hago un mix y voy variando. En proteínas mi peso lo multiplico por dos. Ejemplo: 53 kilos = 106 gramos de proteínas diarias. No bebo alcohol, pocos lácteos, mucha jalea light de postre y fruta limitada, solo berries, porque me gustan. Consumo cinco comidas diarias, con pollo, carne, huevos, pescado, ensaladas y carbohidratos limitados. A las ocho tomo desayuno; a las 11, batido de proteínas; a las 14, almuerzo; a las 17, té y a las 20, cena.
-¿Hace algún desarreglo?
-Los fines de semana me salgo de la dieta, pero con responsabilidad. Ahí consumo tortas, chocolates o helados. Suprimí, definitivamente, las bebidas gaseosas. Siempre fueron mi perdición, pero aunque sean Zero, en mi caso, empeoran la celulitis. Dedico mucho tiempo a cocinar cosas ricas, pero con ingredientes sanos. Sin azúcar, con harinas de avena, coco y almendras. Endulzo con alulosa, azúcar de coco, tagatosa o dátiles. El chocolate tiene que ser al 70% de cacao, como mínimo.
Anich siguió su vida normal desde que supo que esperaba un hijo. Todo igual con la alimentación y las horas de descanso, pero en el sexto mes tuvo que cambiarlo todo. "Sufrí una pubalgia tremenda (dolor en la zona del pubis y parte interna de la pierna). No sé si me excedí con los entrenamientos. Ahí cambié totalmente la forma de vivir el embarazo. Me relajé con las comidas y reduje mis ejercicios en 50%. En los tres meses que me faltaban para el parto, dupliqué los kilos que había subido. Pasé de seis a 13 kilos. Ahí nació la Jacinta que es una exquisita. Dice papá, mamá. Ella es mi vida entera", afirma.
-¿De qué manera retomó los entrenamientos?
-Después de su nacimiento, volví de a poco. Al mes hacía algo de cardio y a los 40 días, cuando me dieron de alta, comencé con trabajos de pesas, con mi entrenador, Igor Huanquel, con quien trabajo hace cinco años.
-¿Hace ejercicios todos los días?
-Mi rutina se limita a tres días de pesas y uno de cardio. Hago mucho spinning y natación, algunas veces. Con eso me mantengo. Cuesta en esos días de frío y más porque lo hago en la mañana temprano.
La señora del periodista Mario Mauriziano tenía una cintura de 61 centímetros, antes de quedar embarazada, y ahora, cuando su hija Jacinta tiene 9 meses, luce 63 centímetros. Durante el proceso de gestación llegó a pesar 69 kilos -pesaba 56-, y ahora está en 53, para una altura de 1,64 metros.
"Me preguntan mucho mujeres que están embarazadas y las que fueron mamás hace poco sobre cómo reducir la cintura. Las consultas son entre 10 a 15 por los stories que publico en relación con el tema. Son números aproximados, porque no llevo la cuenta", explica.
-¿Y qué les responde?
-Les cuento mi experiencia, las trato de motivar con el deporte y la alimentación sana, aparte de compartirles las sensaciones que viví en el embarazo. Las mujeres se interesan en saber qué como, las cantidades y los horarios. Mi recomendación es lograr una mezcla de 70% de alimentación y 30% de deporte.
-¿Cómo lo hace con la alimentación?
-A lo largo de mi vida he ido a nutricionistas y leo mucho sobre el tema. Con todo eso hago un mix y voy variando. En proteínas mi peso lo multiplico por dos. Ejemplo: 53 kilos = 106 gramos de proteínas diarias. No bebo alcohol, pocos lácteos, mucha jalea light de postre y fruta limitada, solo berries, porque me gustan. Consumo cinco comidas diarias, con pollo, carne, huevos, pescado, ensaladas y carbohidratos limitados. A las ocho tomo desayuno; a las 11, batido de proteínas; a las 14, almuerzo; a las 17, té y a las 20, cena.
-¿Hace algún desarreglo?
-Los fines de semana me salgo de la dieta, pero con responsabilidad. Ahí consumo tortas, chocolates o helados. Suprimí, definitivamente, las bebidas gaseosas. Siempre fueron mi perdición, pero aunque sean Zero, en mi caso, empeoran la celulitis. Dedico mucho tiempo a cocinar cosas ricas, pero con ingredientes sanos. Sin azúcar, con harinas de avena, coco y almendras. Endulzo con alulosa, azúcar de coco, tagatosa o dátiles. El chocolate tiene que ser al 70% de cacao, como mínimo.
Anich siguió su vida normal desde que supo que esperaba un hijo. Todo igual con la alimentación y las horas de descanso, pero en el sexto mes tuvo que cambiarlo todo. "Sufrí una pubalgia tremenda (dolor en la zona del pubis y parte interna de la pierna). No sé si me excedí con los entrenamientos. Ahí cambié totalmente la forma de vivir el embarazo. Me relajé con las comidas y reduje mis ejercicios en 50%. En los tres meses que me faltaban para el parto, dupliqué los kilos que había subido. Pasé de seis a 13 kilos. Ahí nació la Jacinta que es una exquisita. Dice papá, mamá. Ella es mi vida entera", afirma.
-¿De qué manera retomó los entrenamientos?
-Después de su nacimiento, volví de a poco. Al mes hacía algo de cardio y a los 40 días, cuando me dieron de alta, comencé con trabajos de pesas, con mi entrenador, Igor Huanquel, con quien trabajo hace cinco años.
-¿Hace ejercicios todos los días?
-Mi rutina se limita a tres días de pesas y uno de cardio. Hago mucho spinning y natación, algunas veces. Con eso me mantengo. Cuesta en esos días de frío y más porque lo hago en la mañana temprano.