"Quiero decir que estoy feliz a tu lado. Te amo con locura", dice parte del romántico
mensaje de Instagram que Constanza Piccoli le dedicó a Nicolás Achá en su
cumpleaños número 30. Si no le suena el nombre, le hago un resumen: es publicista,
fundador de la empresa decoración y muebles Decogar (@deco_gar) y pololo hace
cuatro años -viven hace un año y medio juntos- de la ex actriz de "BKN" (Mega, 2004-
2012).
La celebración fue casera y no hubo fiesta de Zoom. "Una como polola quiere que sea el día perfecto, así que le tenía su torta preferida, el almuerzo que pidió y vimos lo que él quería en la tele. Al final son pequeños detalles para que lo pasara bien", explica sobre el regaloneo.
El menú cumpleañero fue de McDonald's. "Intentamos cuidarnos generalmente lo que más podamos, pero en el cumpleaños hay que chanchear y qué mejor que comiendo una hamburguesa o dos", confiesa Achá (@nicoacha), quien pasó la tarde viendo "Selling sunset", el reality inmobiliario de Netflix.
-Me imaginé que le podría gustar ese programa.
-Sí, el rubro de la publicidad no me llenaba ciento por ciento y siempre me gustó mucho la decoración y el mundo inmobiliario, así que hace cuatro años se me ocurrió crear una empresa de decoración personalizada y a la medida para desmarcarme de lo que ofrece el retail, que es más o menos lo mismo.
-¿Cómo lo pasó en su cumpleaños?
-La Coni es la mejor partner que podría tener. Cualquiera diría que un cumpleaños en pandemia es una lata, pero el mío no fue para nada así. Aunque estemos los dos solos lo pasamos súper haciendo cualquier tontería.
-¿Por qué decidió hacerlo ahora?
-No sé, pero me vinieron las ganas el año pasado y no me arrepiento para nada porque lo he pasado súper bien.
-¿Cómo ha sido hacerlo a distancia?
-No me ha costado tanto, quizás porque nunca me acostumbré a las clases presenciales. Igual es un mundo nuevo. La cuarentena, en ese sentido, me ayudó a enfocarme completamente en mis estudios.
-¿Le costó retomar las matemáticas?
-Fue abrumador al principio, pero no me costó tanto nivelarme porque me dediqué sólo a estudiar. Antes les tenía rechazo a las matemáticas, ahora no es que las amé pero las quiero, sí.
La celebración fue casera y no hubo fiesta de Zoom. "Una como polola quiere que sea el día perfecto, así que le tenía su torta preferida, el almuerzo que pidió y vimos lo que él quería en la tele. Al final son pequeños detalles para que lo pasara bien", explica sobre el regaloneo.
El menú cumpleañero fue de McDonald's. "Intentamos cuidarnos generalmente lo que más podamos, pero en el cumpleaños hay que chanchear y qué mejor que comiendo una hamburguesa o dos", confiesa Achá (@nicoacha), quien pasó la tarde viendo "Selling sunset", el reality inmobiliario de Netflix.
-Me imaginé que le podría gustar ese programa.
-Sí, el rubro de la publicidad no me llenaba ciento por ciento y siempre me gustó mucho la decoración y el mundo inmobiliario, así que hace cuatro años se me ocurrió crear una empresa de decoración personalizada y a la medida para desmarcarme de lo que ofrece el retail, que es más o menos lo mismo.
-¿Cómo lo pasó en su cumpleaños?
-La Coni es la mejor partner que podría tener. Cualquiera diría que un cumpleaños en pandemia es una lata, pero el mío no fue para nada así. Aunque estemos los dos solos lo pasamos súper haciendo cualquier tontería.
Aprecio a las matemáticas
La última teleserie de Constanza Piccoli fue "20añero a los 40" (Cana113, 2016). "Ahora estoy estudiando ingeniería comercial y estoy súper feliz", dice la actriz, quien está cursando su primer año. La idea de cambiar de carrera la viene pensando hace años. "Cuando salí del colegio estudié un año (ingeniería comercial), pero me salí porque en esa época estaba trabajando mucho y los horarios en las teleseries son complicados", dice la actriz (@coni_piccoli).-¿Por qué decidió hacerlo ahora?
-No sé, pero me vinieron las ganas el año pasado y no me arrepiento para nada porque lo he pasado súper bien.
-¿Cómo ha sido hacerlo a distancia?
-No me ha costado tanto, quizás porque nunca me acostumbré a las clases presenciales. Igual es un mundo nuevo. La cuarentena, en ese sentido, me ayudó a enfocarme completamente en mis estudios.
-¿Le costó retomar las matemáticas?
-Fue abrumador al principio, pero no me costó tanto nivelarme porque me dediqué sólo a estudiar. Antes les tenía rechazo a las matemáticas, ahora no es que las amé pero las quiero, sí.