El uso de ventiladores mecánicos en pacientes con Covid-19 ha ido disminuyendo
considerablemente durante el último mes y medio, según el reciente informe de la
Sociedad Chilena de Medicina Intensiva (Sochimi) que incorpora datos hasta el
viernes 14 de agosto. El día con más pacientes intubados de toda la epidemia fue el
20 de junio pasado, con 1.172 personas. El viernes se contabilizan 798 casos a nivel
nacional (ver gráfico).
El reporte de la Sochimi agrega que casi todos los pacientes ventilados están hospitalizados en Unidades de Cuidados Intensivos, lo que implica una notoria mejoría respecto a lo que sucedía dos meses atrás, cuando la alta presión asistencial obligó a internar a pacientes críticos en áreas improvisadas, como las urgencias, el sector de pabellones y las unidades pediátricas. En un momento hubo 386 personas hospitalizadas en estas unidades; el viernes solo quedaban 26.
El doctor Sebastián Bravo, jefe de la Unidad de Pacientes Críticos del Hospital Clínico de la Universidad Católica, explica que a mediados de julio cesó la renovación constante de enfermos graves. El médico recuerda que en el peor momento de la epidemia, es decir, durante la segunda y tercera semana de junio, recibían a diario entre 5 a 10 pacientes listos para intubar. Esta situación era aún más crítica en los hospitales públicos, cuyas camas intensivas estuvieron a punto de estar copadas al 100%, agrega.
"En un momento tuvimos 75 camas de UCI en el Hospital UC y todas estaban copadas con pacientes Covid ventilados. Hoy nos quedan 14 pacientes Covid ventilados. Hemos ido reconvirtiendo estas camas a lo que eran antes, unidades coronarias, pabellones, aunque manteniendo las camas de intensivo: hoy tenemos 36 camas UCI, pero siempre con la posibilidad de aumentar si es necesario. Ya aprendimos cómo hacerlo", detalla.
El médico asegura que se están quedando con los pacientes crónicos, quienes llevan casi dos meses en ventilación mecánica; y con los enfermos graves de regiones, los que han sido trasladados hacia la capital desde las regiones de Arica, Tarapacá y Antofagasta, donde la epidemia está lejos de estar controlada.
"Hemos tenido un incremento en los fallecimientos en las últimas dos semanas de estos pacientes crónicos con uno o dos meses de evolución en la UCI. No fallecen directamente por Covid, sino por una infección, trombosis o arritmia, por tanto tiempo en intensivo. Pero también hemos dado de alta a pacientes con hasta tres meses en ventilación. Por eso digo que tenemos que pelearlos hasta el final", agrega.
-Profundice en su idea, por favor, doctor.
-A pesar de que nuestra letalidad ha aumentado, porque el cuadro es grave y produce fallecimientos en corto o mediano plazo, hemos descubierto que los pacientes conectados por mucho tiempo no necesariamente van a fallecer sí o sí. Estamos revisando nuestras bases de datos de la Sochimi y de cada centro, para hacer una revisión retrospectiva de la epidemia, pero efectivamente hay un porcentaje no menor de pacientes con ventilaciones prolongadas, de más de 4 semanas, que han sobrevivido y razonablemente bien.
El doctor Bravo asegura que el grueso de las atenciones en los últimos días, al menos en el Hospital de la UC, han sido por enfermedades de mediana gravedad no relacionadas al Covid, las cuales habían sido pospuestas por la pandemia. Por ejemplo, este viernes se hicieron 62 cirugías que estaban pendientes, en su mayoría, a pacientes con tumores en riñones o hígado.
El reporte de la Sochimi agrega que casi todos los pacientes ventilados están hospitalizados en Unidades de Cuidados Intensivos, lo que implica una notoria mejoría respecto a lo que sucedía dos meses atrás, cuando la alta presión asistencial obligó a internar a pacientes críticos en áreas improvisadas, como las urgencias, el sector de pabellones y las unidades pediátricas. En un momento hubo 386 personas hospitalizadas en estas unidades; el viernes solo quedaban 26.
El doctor Sebastián Bravo, jefe de la Unidad de Pacientes Críticos del Hospital Clínico de la Universidad Católica, explica que a mediados de julio cesó la renovación constante de enfermos graves. El médico recuerda que en el peor momento de la epidemia, es decir, durante la segunda y tercera semana de junio, recibían a diario entre 5 a 10 pacientes listos para intubar. Esta situación era aún más crítica en los hospitales públicos, cuyas camas intensivas estuvieron a punto de estar copadas al 100%, agrega.
"En un momento tuvimos 75 camas de UCI en el Hospital UC y todas estaban copadas con pacientes Covid ventilados. Hoy nos quedan 14 pacientes Covid ventilados. Hemos ido reconvirtiendo estas camas a lo que eran antes, unidades coronarias, pabellones, aunque manteniendo las camas de intensivo: hoy tenemos 36 camas UCI, pero siempre con la posibilidad de aumentar si es necesario. Ya aprendimos cómo hacerlo", detalla.
El médico asegura que se están quedando con los pacientes crónicos, quienes llevan casi dos meses en ventilación mecánica; y con los enfermos graves de regiones, los que han sido trasladados hacia la capital desde las regiones de Arica, Tarapacá y Antofagasta, donde la epidemia está lejos de estar controlada.
"Hemos tenido un incremento en los fallecimientos en las últimas dos semanas de estos pacientes crónicos con uno o dos meses de evolución en la UCI. No fallecen directamente por Covid, sino por una infección, trombosis o arritmia, por tanto tiempo en intensivo. Pero también hemos dado de alta a pacientes con hasta tres meses en ventilación. Por eso digo que tenemos que pelearlos hasta el final", agrega.
-Profundice en su idea, por favor, doctor.
-A pesar de que nuestra letalidad ha aumentado, porque el cuadro es grave y produce fallecimientos en corto o mediano plazo, hemos descubierto que los pacientes conectados por mucho tiempo no necesariamente van a fallecer sí o sí. Estamos revisando nuestras bases de datos de la Sochimi y de cada centro, para hacer una revisión retrospectiva de la epidemia, pero efectivamente hay un porcentaje no menor de pacientes con ventilaciones prolongadas, de más de 4 semanas, que han sobrevivido y razonablemente bien.
El doctor Bravo asegura que el grueso de las atenciones en los últimos días, al menos en el Hospital de la UC, han sido por enfermedades de mediana gravedad no relacionadas al Covid, las cuales habían sido pospuestas por la pandemia. Por ejemplo, este viernes se hicieron 62 cirugías que estaban pendientes, en su mayoría, a pacientes con tumores en riñones o hígado.