En la categoría de pequeños dramas de la vida moderna , uno recurrente es
atrasarse a tal extremo de tener que salir sin haber cargado el smartphone. O no
tener el tiempo suficiente como para alcanzar un nivel de carga decente antes de
alejarse de un enchufe.
Lo bueno es que la autonomía del teléfono es una preocupación perpetua de los fabricantes: pensando en todo lo que implica quedarse sin celular a mitad del día, han sumado mejoras como baterías más potentes y la carga rápida. O sea, la posibilidad de suministrar una mayor potencia (watts) a la batería para que tarde menos en completar el ciclo de carga.
Y vaya que es rápida: dependiendo del fabricante y el modelo, un teléfono puede llegar al 80% de carga en sólo 20 minutos (o al 50% en 10 minutos).
Eso sí, no es llegar y enchufar su teléfono convencional a la corriente con un cargador súper rápido para apurar la cosa, pues la magia funciona solo con equipos diseñados para admitir la carga flash.
Por ejemplo, los modelos convencionales de smartphones, más antiguos pero aún vigentes, suelen admitir una potencia de carga de 10 watts (W). Mientras el plegable Huawei Mate Xs está diseñado para una potencia de carga de 55W. La tabla adjunta muestra todos los smartphones a la venta en Chile con más de 25W de potencia de carga.
Por lo bajo, explica Jonathan Frez, académico de la Escuela de Ingeniería Informática y Telecomunicaciones de la Universidad Diego Portales, "un celular de carga rápida al mínimo equivale al máximo de carga de los celulares normales".
¿Esto significa que si se enchufa un teléfono común y corriente en un cargador veloz podría explotar? No. Como mucho el equipo se cargará a la misma velocidad de siempre o, en último caso, no lo hará.
"Si el cargador es de carga rápida, súper rápida o ultra rápida el teléfono lo va a detectar y va a permitir esa velocidad dentro del celular. De hecho, lo más probable es que te indique qué tipo de carga usa al momento de enchufar el USB tipo C en los smartphones Samsung. En cambio, si tu teléfono tiene la suficiente potencia para carga rápida y súper rápida, pero el cargador no, no podrás cargarlo en este modo", cuenta Marcelo Fuster, gerente de Smartphones de Samsung Chile.
Para evitar inesperadas alzas de voltaje que dañen la batería, David Moheno, director de Relaciones Públicas de Huawei para Latinoamérica, explica que sus teléfonos "ajustan la tensión y corriente de carga automáticamente según el tipo de cargador y el cable usados. Si se ocupa otro cargador que no soporta la tecnología SuperCharge, el equipo deshabilitará la carga automáticamente".
MediaTek, otro fabricante de procesadores, también tiene su estándar de carga rápida, que se llama Pump Express, y cargadores flash certificados. Si opta por uno de estos, solo debe fijarse en que la potencia de carga sea la correcta.
Lo bueno es que la autonomía del teléfono es una preocupación perpetua de los fabricantes: pensando en todo lo que implica quedarse sin celular a mitad del día, han sumado mejoras como baterías más potentes y la carga rápida. O sea, la posibilidad de suministrar una mayor potencia (watts) a la batería para que tarde menos en completar el ciclo de carga.
Y vaya que es rápida: dependiendo del fabricante y el modelo, un teléfono puede llegar al 80% de carga en sólo 20 minutos (o al 50% en 10 minutos).
Eso sí, no es llegar y enchufar su teléfono convencional a la corriente con un cargador súper rápido para apurar la cosa, pues la magia funciona solo con equipos diseñados para admitir la carga flash.
Por ejemplo, los modelos convencionales de smartphones, más antiguos pero aún vigentes, suelen admitir una potencia de carga de 10 watts (W). Mientras el plegable Huawei Mate Xs está diseñado para una potencia de carga de 55W. La tabla adjunta muestra todos los smartphones a la venta en Chile con más de 25W de potencia de carga.
Por lo bajo, explica Jonathan Frez, académico de la Escuela de Ingeniería Informática y Telecomunicaciones de la Universidad Diego Portales, "un celular de carga rápida al mínimo equivale al máximo de carga de los celulares normales".
¿Esto significa que si se enchufa un teléfono común y corriente en un cargador veloz podría explotar? No. Como mucho el equipo se cargará a la misma velocidad de siempre o, en último caso, no lo hará.
Ajuste automático
El término carga rápida es relativamente nuevo y no solo ha modernizado los teléfonos sino que también cables y cargadores. Gracias a eso, un celular hoy es capaz de detectar de forma automática si se le está suministrando mucha o poca potencia, y regular ese flujo para evitar que sobrepase el 100%."Si el cargador es de carga rápida, súper rápida o ultra rápida el teléfono lo va a detectar y va a permitir esa velocidad dentro del celular. De hecho, lo más probable es que te indique qué tipo de carga usa al momento de enchufar el USB tipo C en los smartphones Samsung. En cambio, si tu teléfono tiene la suficiente potencia para carga rápida y súper rápida, pero el cargador no, no podrás cargarlo en este modo", cuenta Marcelo Fuster, gerente de Smartphones de Samsung Chile.
Para evitar inesperadas alzas de voltaje que dañen la batería, David Moheno, director de Relaciones Públicas de Huawei para Latinoamérica, explica que sus teléfonos "ajustan la tensión y corriente de carga automáticamente según el tipo de cargador y el cable usados. Si se ocupa otro cargador que no soporta la tecnología SuperCharge, el equipo deshabilitará la carga automáticamente".
Cargadores universales
Aunque todos los fabricantes recomiendan utilizar cargadores y cables de la marca, hay accesorios universales. Los más seguros son los que tienen certificación Qualcomm Quick Charge, que es un estándar para la carga rápida definida por el fabricante de procesadores. En internet es fácil encontrar la lista con los modelos de teléfonos compatibles.MediaTek, otro fabricante de procesadores, también tiene su estándar de carga rápida, que se llama Pump Express, y cargadores flash certificados. Si opta por uno de estos, solo debe fijarse en que la potencia de carga sea la correcta.