"Esa condición se llama mucositis severa. Es un daño en la cavidad oral a nivel de la faringe, que produce mucho dolor para tragar. A veces requiere hospitalización y uso de morfina. Los pacientes con tumores de cabeza y cuello presentan mucositis severa por la radiación, sobre todo cuando la terapia incluye radiación y quimioterapia", menciona el médico.
La situación de los pacientes de Letelier cambió cuando dos investigadores, padre e hijo, el ingeniero químico Felipe Galván y su padre Tomás, que es cirujano dentista, le ofrecieron participar en un estudio para probar la efectividad y seguridad de un enjuague bucal llamado Dentoxol. Letelier, entusiasmado con mejorar la calidad de vida de sus pacientes, aceptó. Con 108 personas, providentes del Hospital de Antofagasta, Clínica Iram, Fundación Arturo López Pérez, Instituto Nacional de Cáncer y el Hospital de Valdivia, los científicos lograron probar las bondades del producto.
Felipe Galván dice que Dentoxol, desarrollado por la empresa nacional Ingalfarma , apoyada por la Fundación Ciencia y Vida, permite tratar úlceras bucales, desde heridas simples como las aftas hasta la mucositis oral.
"Lo que hace es estimular la regeneración de las células de la boca para que cierren la herida. Estimula a que las mismas células sanas que le quedan a la persona, se regeneren y cubran la herida hasta cerrarla. Se usan 7,5 mililitros cinco veces al día, durante todo el tratamiento oncológico", describe.
Felipe dice que crearon el producto debido a los pacientes con cáncer que llegaban a atenderse a la consulta de su padre Tomás. Su padre montó un laboratorio y Felipe se unió para ayudarlo.
Una radioterapia, agrega Galván, dura entre seis y ocho semanas. La mucositis oral severa, agrega, se desarrolla a partir de la segunda semana de tratamiento. Pero para que una radioterapia tenga el efecto deseado, explica, es necesario irradiar al menos por seis semanas.
"A la tercera semana de radioterapia, el 66% de los pacientes tiene mucositis oral severa. No pueden alimentarse vía bucal y algunos abandonan la terapia porque no la toleran. Con el enjuague bucal logramos que la aparición de la mucositis oral se retrasara a la quinta semana de radioterapia, así el paciente evita tener que abandonar el tratamiento", destaca.
En el estudio Galván demostró que el enjuague bucal no tiene efectos adversos. Además, hubo una reducción de 25% de la mucositis oral severa en los pacientes oncológicos. Paralelamente a la investigación de cáncer de cabeza y cuello, Galván probó el enjuague en personas con aftas, una herida común y corriente.
"La recuperación de aftas comunes fue a los cuatro días, cuando lo normal es que ocurra de 10 a 14 días. También tiene efectos positivos en pacientes con trauma por frenillos", dice. Dentoxol, agrega, está autorizado por el Instituto de Salud Pública y con venta en farmacias.
Letelier destaca la originalidad del enjuague bucal de los Galván. "Es tremendamente novedoso plantear un estudio de esas características, ya que habitualmente las investigaciones son sobre drogas patrocinadas por laboratorios extranjeros. Este es un producto hecho en Chile y probado en centros nacionales públicos y privados. Nosotros participamos con once pacientes y la experiencia fue muy buena", celebra.
"Este es un producto hecho en Chile y probado en centros nacionales públicos y privados", dice el oncólogo radiólogo.