En prisión preventiva hasta el 8 de diciembre, acusada de parricidio consumado en calidad de autora, quedó Denisse Llanos Lazcano, madre Ámbar Cornejo, la adolescente asesinada en Villa Alemana el 29 de junio de este año.
La mujer fue trasladada desde Valparaíso al penal de San Miguel, en Santiago, luego de las audiencias de control de detención y formalización, que encabezó la jueza Daniela Rodríguez.
La fiscal regional de Valparaíso, Claudia Perivancich, y la fiscal jefe de Villa Alemana, María José Bowen, expusieron las pruebas contra Llanos.
La fiscal Bowen dijo que Llanos y Hugo Bustamante, pareja de la mujer y primer imputado por el crimen, habrían planificado la muerte de Ámbar, para lo cual citaron a la joven para entregarle la mensualidad que su padre, Ulises Cornejo, le enviaba siempre desde el norte. Para ello pidieron a su otro hijo, de 14 años, que fuera a retirar una canasta de alimentos a su colegio, lo que causó extrañeza al director del establecimiento por lo temprano.
Y así habrían impedido que ambos hermanos se toparan.
Testigos y cámaras de seguridad vieron a Ambar ir, pero jamás volver.
De regreso el muchacho, siempre según el relato de la Fiscalía, la madre le dijo que debían irse a su departamento en Limache, porque desconocidos se lo querrían tomar. Pero el adolescente pasa al baño donde, según su testimonio, escuchó un golpe "como si alguien diera un mal paso en el piso". Hugo le dice que es su madre la que está colgando ropa, lo que la mujer negó después.
"Denisse mantiene contacto permanente con el imputado Hugo Bustamante durante todo el resto del día 29 y la mañana del 30", dijo la fiscal Bowen, completando unas 15 llamadas.
En esas horas también se enviaron mensajes vía Whatsapp.
"Te extraño mucho", le decía ella.
La persecutora asegura que el 30, muy temprano, Llanos ingresó a un local de Limache donde compra dos ceras Brillina y una pintura para pisos, según la boleta que portaba el 6 de agosto, cuando fue entrevistada por la PDI. Dicho documento fue reconocido después por el propio dueño del negocio.
La mujer, según la acusación, volvió y se mantuvo "todo el día 30 junto a Hugo, en el domicilio de calle Covadonga, encerando y pintando el piso que había sido modificado para ocultar el cadáver de su hija".
El 22 de agosto, casi dos semanas de hallado el cuerpo de la joven, la policía ingresó al inmueble.
"Se encontraron las ceras y pintura para pisos ya mencionadas, a medio utilizar, y un par de zapatillas blancas marca Puma, talla 38,5, con restos de cera", aseguró la fiscal.
Bowen agregó que "podemos acreditar que en el lugar había clavos que eran nuevos, compatibles con la bolsa de clavos encontrada en el sitio del suceso".
Además, consignaron el hallazgo del celular de la muchacha quemado y envuelto en papel de aluminio, en el entretecho de la casa de Villa Alemana, en una revisión policial del 22 de agosto.
También aseguró que la mujer no habría dicho la verdad respecto de la supuesta toma del departamento de Limache, como lo aclaró el conserje del lugar, y tampoco hubo una llamada de la hermana de Hugo Bustamante para que volviera a Villa Alemana, como lo aseguró la imputada.
La fiscalía postula que la madre de la víctima tampoco estuvo amenazada por su pareja, como declaró al principio a la PDI. Para afirmar eso mostraron grabaciones de cámaras de seguridad hechas a ambos el 4 de agosto, seis días después del crimen, en dos tiendas de la zona.
"Compran elementos para ocultar su identidad, tales como gorros, lentes de sol, etcétera, y es doña Denisse quien paga", dijo la fiscal.
Dos testigos que los atendieron coincidieron en que "en ningún momento ven a Denisse siendo amenazada o coartada".
El relato fue respondido por el abogado defensor de la mujer, Jaime Vera, quien argumentó que la culpa del delito era de Bustamante.
Ulises Cornejo, el padre de la muchacha, había insistido en que se investigara a la madre. Su abogado Patricio Olivares dijo este viernes que era imposible hablar con él, pero que estaba tranquilo.
"Era el resultado que nosotros queríamos", declaró.
Los detalles que llamaron la atención de la jueza
Daniela Rodríguez Niño, la jueza de garantía de Villa Alemana, acogió los argumentos del Ministerio Público. "Hay una conducta que todos los familiares describen como totalmente extraña", mencionó.
Se refería a detalles como permitir que Ámbar Cornejo ingresara a la casa, cuando era pública la mala relación con Hugo Bustamante, debido a su historia en el crimen de su ex pareja y el hijo de ella el 2005.
Agregó: "Llama la atención y creo yo que da cuenta de una planificación el que se hace salir al menor (hermano) del inmueble".
La magistrada también reparó en que la madre de la joven no sólo compra cera, sino también elementos para pintar madera. La jueza se preguntó a sí misma por la relevancia de este dato: "Claramente aquí hay un propósito de encubrimiento en cuanto era necesario, ya que se habían retirado tablas del piso del inmueble... Claramente es una actividad que se despliega con bastante conocimiento de los hechos y que está destinada a promover la impunidad de este hecho".
Destacó: "La única persona de la población, del círculo cercano de Ámbar que de alguna manera no se preocupa por la desaparición, resulta ser la madre, cuestión que es bastante extraña".