Con el teletrabajo medianamente establecido en algunas empresas, de a poco algunos afortunados chilenos le han ido sacando provecho a la situación. Usan mejor el tiempo que antes se destinaban a los traslados diarios y le toman el gusto a estar en casa con la familia.
Una posibilidad que otros, aún más afortunados, empiezan a considerar es la de tomar maletas y computador para irse un rato a teletrabajar a la playa, como comenzó a hacer el ingeniero comercial Gerardo Manríquez, junto a su pareja y su hijo de casi un año.
"Nosotros nos hemos ido de jueves a lunes, por ejemplo. Pero ahora nos vamos a ir este jueves y volveremos el miércoles de la otra semana", comenta Manríquez, quien trabaja en el área comercial de una empresa internacional. Esta será la tercera vez que se escapa a Algarrobo con su familia.
"Las dinámicas familiares son las mismas, pero con mejor aire. Si fuera práctico, incluso me radicaría. Mi pega es de comercial y ventas internacionales; entonces, si cumplo los objetivos, es irrelevante donde se está", agrega Manríquez, de 39 años.
Leve tendencia
"En las encuestas que hacíamos mucha gente que tenía segundo hogar no estaba arrendando sus propiedades y en general nadie arrendaba", comenta Claudia Castro, gerenta de Clasificados del portal Yapo, empresa que detectó un alza en la cantidad de avisos publicados respecto del mes anterior en las zonas costeras.En Coquimbo, por ejemplo, se incorporaron más de 80 propiedades y en Valparaíso, más de 100.
"De a poco, en porcentajes bajos, pero más cualitativos, empezaron a reactivarse las regiones también, con alza en las búsquedas de arriendos de temporada en zonas como Valparaíso", agrega Castro.
"No sé si haya una gran tendencia, pero si algunas personas están llegando a la zona para teletrabajar, aunque son los menos, yo creo", contrapone Claudia Fuentealba, corredora de propiedades de la Quinta Región. "Algo que se ha visto antes de parte de extranjeros es que vienen por unos cuantos meses y trabajan desde acá, ya que conocieron y les gusta.
Ese fenómeno que describe Fuentealba se llama Workation (algo como trabajaciones ), en una mezcla de trabajo y vacaciones que ha incluso generado una oferta hotelera enfocada en el teletrabajo, con áreas de oficinas y servicios derivados.
La oferta
Precios para todos los gustos es lo que ofrecen los distintos balnearios ubicados en la costa chilena. Como se ve en la tabla, desde departamentos de una pieza y un baño por $20.000 diarios hasta lugares con más alcurnia, más habitaciones y a mayor precio, en una oferta que varía tanto en las instalaciones como en los servicios que ofrecen los departamentos, y donde la existencia de internet es clave si la idea es efectivamente trabajar."Yo llevo banda ancha móvil porque en Algarrobo el servicio de internet es malo, esa es la mejor forma de asegurarse conectividad", recomienda Martínez.
Con su experiencia, aconseja relajar las expectativas familiares.
"Más allá de que uno ande en la playa, es clave organizarse bien con los tiempos para poder disfrutar y aprovechar también", agrega.