Rodrigo Paz es siquiatra con especialidades en siquiatría forense y siquiatría infantojuvenil y, como muchos, ha seguido con interés el caso de Diego Ruiz Restrepo, acusado por la fiscalía de haber cometido siete homicidios en Estación Central. Pero Paz no puede dejar de ser siquiatra ni aunque se lo proponga, así que cada vez que conoce más antecedentes sobre este ciudadano colombiano, más completo se le hace su cuadro psíquico.
"Hay ciertos datos que son importantes", dice. "Este joven tiene 30 años, llegó a Chile el 2012, no estudia y aparentemente no trabaja, sus episodios violentos aparecen por lo menos desde 2017, y estos episodios suelen ocurrir con alcohol y drogas. Sus padres son gente de trabajo".
Y luego, los antecedentes homicidas: "Ataca de madrugada, a personas que viven en la calle, y ataca a varias personas en una noche (la madrugada del 8 de noviembre atacó a cinco), propinando múltiples puñaladas, directo a matar".
"¿Es un sicópata Diego Ruiz? ¿Es un asesino en serie?", se pregunta Paz. "Nada de eso", responde tajante.
"Desde mi perspectiva, yo creo que ese joven es un enfermo mental. No creo que sea un psicópata en serie al estilo de series gringas, para nada, sino que tiene todo el perfil de un sicótico o de alguien que padece una enfermedad mental grave y que se desata básicamente con el consumo de drogas y alcohol".
-¿Por qué?
-El modo de operar de él no es el de un sicópata en serie, porque no tiene planificación. Los sicópatas seriales son astutos, se cuidan. Lo que hace este joven más bien aparece como una descarga sicótica, violentísima, sin ninguna planificación, que además ocurre en rachas, donde él en una noche mata a cuatro, en otra mata a otros más, pero no es nada organizado. Así que de sicópata no le veo nada; de sicótico, todo. No me sorprendería en absoluto que después de una pericia forense sea declarado inimputable.
-¿Por qué una persona sicótica mataría de esta forma?
-Sicótico es un paciente que actúa bajo el flujo de ideas y percepciones delirantes, que lo llevan a actuar de una manera no planificada, desorganizada y a cometer acciones a veces tremendamente violentas. Como el caso de Rodrigo Orias, que asesinó a cuchilladas a un sacerdote en la Catedral. El sicótico actúa privado de razón, privado de juicio, prisionero de una visión de sí mismo y del mundo completamente distinta y ajena a la realidad. Un ejemplo de delirio es creer que se tiene una misión de limpiar al mundo. Una persona así está enferma, y por lo tanto debe ser tratado como un enfermo y no como un delincuente.
-¿Y el sicópata, por qué mata?
-El sicópata, en cambio, no está privado de razón y actúa de una manera violenta buscando satisfacer impulsos sádicos y crueles. La diferencia es que los sicópatas planifican, porque detrás de ellos hay una pulsión sádica que busca satisfacer de una manera eficiente, fría, desalmada y muy bien planificada, y por eso es tan difícil atraparlos. Los sicópatas en serie no cometen este tipo de errores burdos: no cometen los crímenes en el mismo sector, se cuidan de las cámaras de seguridad, toman precauciones. Como el sicópata de Alto Hospicio, que tomó años atraparlo. Y los sicópatas no tienen remedio, en cambio alguien con sicosis, con el tratamiento adecuado, puede recuperarse.
-¿Por qué habrá elegido como víctimas a personas que viven en la calle?
-Pongámonos en la hipótesis de que se trata de un paciente sicótico. Es perfectamente posible que recibió una especie de iluminación esquizofrénica que le dice que tiene la misión de limpiar Santiago y al mundo de los vagabundos y sale delirantemente a cumplir su misión. Posibilidad dos, es un sicópata, aunque, repito, esta probabilidad es muy, pero muy menor. Sería una persona ávida de experimentar poder, sentirse dueño de la vida y la muerte y que tiene un complejo de inferioridad brutal y necesita reparar eso de la manera más cruel y despiadada asesinando gente indefensa. Y mientras más indefenso, más poderoso se siente y más adicto se hace a esa adrenalina sádica.
-¿Por qué la edad de Ruiz es importante?
-Porque a los 30 años está justo en la edad en que se desencadenan las sicosis esquizofrénica y maniacodepresiva. Si él tuviera 40 0 50 años, sería muy poco probable que sus crímenes se debieran a una sicosis. Así que, o tiene una sicosis esquizofrénica, o psicosis esquizoafectiva, o una sicosis maniacodepresiva. Lo que tienen en común todas ellas es que, cuando provoca conductas criminales, pueden ser extraordinariamente violentas y bizarras, con planificación muy precaria y donde actúa en base a delirios. Otra característica de todos estos cuadros psicóticos se dan en pacientes que no logran ejercer trabajos estables ni completar sus estudios, es muy frecuente es el consumo de alcohol y drogas.