El actor de 36 años le dio un giro a su vida y se transformó en luchador profesional. El Campeonato Nacional de Lucha Libre de Chile, donde debutó en 2015, le quedó chico y se mudó a Estados Unidos. Llegó a Orlando en la primera semana de noviembre del año pasado, alojó en una casa arrendada por Airbnb y ya el 29 de diciembre lo llamaron para subirse al ring en la All Elite Wrestling (AEW), categoría Dark, competencia que le quiere hacer el peso a la antigua WWE.
En la primera pelea le tocó hacer dupla con El Cuervo, de Puerto Rico, perdieron, pero el chileno cumplió un buen papel y le pidieron que se estrenara en solitario el martes recién pasado, donde le tocó enfrentar al experimentado Scorpio Sky, quien le aplicó un dropkick (patada voladora con las dos piernas juntas). Levy respondió con varios golpes y técnicas, pero el estadounidense le dio un TKO (nocaut técnico) que terminó con la batalla.
-¿Duele mucho?
-Todo lo que ves en el ring duele, incluso correr las cuerdas y rebotar en ellas, pero nosotros, en los entrenamientos diarios, aprendemos una forma de recibir los golpes para que sólo duela y no generen lesiones. Scorpio Sky es un megapro, por lo que sabe cómo aplicar técnicas sin matarme. Lo primero es ir sin miedo y con toda la confianza del mundo en que el otro sabe lo que está haciendo. Y lo otro es manejar la forma de caer, porque, cuando uno va al piso, tienes que poner la cabeza y las manos de cierta forma que se amortigüe tu caída y así no ir de cara a la lona para evitar que se te rompa la nariz o el cuello.
-¿Cómo son sus entrenamientos?
-Entreno en un grupo acá en Orlando y simplemente me topo en el camarín con los que voy a luchar, en el caso de la AEW. Lo que uno entrena es básicamente repetición, repetición, repetición y caer, caer, caer. La idea siempre es lograr caer hundiendo la cabeza para que sólo se golpee la espalda, que tiene más músculos para soportar los golpes. Luego de mucho equivocarse, vas aprendiendo e incorporando las técnicas en tus movimientos naturales.
-¿Su pasado como actor le ha ayudado en esta experiencia?
-Sí, mucho. De partida, AEW es un show de televisión, entonces el hecho de haber tenido experiencia con cámaras es un plus importante. Puedes ser súper buen luchador, pero si no sabes mostrar lo que estás haciendo para la cámara, es difícil que la gente te vaya reconociendo. Lo otro es la personalidad que tienes que exhibir, porque no solamente estás luchando, sino que debes transformarte en un personaje. Se cuentan historias. En ese sentido, el recorrido actoral ayuda bastante. Yo tengo que saber recibir los golpes y no me pasa nada, pero tengo que vender ese golpe como si efectivamente me hubiese dañado y hacer como si el otro me dejó nocaut.
-¿Es verdad que se ponen de acuerdo en qué piruetas realizarán?
-Todo se conversa atrás y se ve lo que vamos a hacer: la historia que queremos contar, cómo la ejecutaremos, los golpes que me aplicará mi rival y los que yo le haré a él. Después cuando estás afuera simplemente haces lo hablado. Cuando estás en un nivel más alto puedes improvisar. Pero si estás empezando, lo mejor es ir probando ciertas cosas en la semana y después hacerlas. Hay que evitar hacer cosas que no has ensayado simplemente porque piensas que se verán más bonitas en el ring. Lo mejor es irte a la segura porque si no, la puedes embarrar y lesionarte o lesionar al rival.
El actor considera que es "la única estrella chilena compitiendo en las grandes ligas estadounidenses" y lo retrata en la estrella que usa en su chaqueta cada vez que sube al escenario acompañado de la bandera chilena. Sin embargo, al conductor Justin Roberts, quien fue la voz por 12 años de la WWE, le costó pronunciar su nombre. "La primera vez que salí a luchar dijo Eriel Livi, megagringo. Entonces, cuando me tocó ir la segunda vez se me acercó Justin y me preguntó" oye, ¿dije bien tu nombre la semana pasada?" Y yo le dije "en realidad no, jaja. O sea, a mí me da lo mismo, porque entiendo que lo pronuncias como americano, pero yo digo mi nombre como A-R-I-E-L L-E-V- Y". Me dijo "ah, ok, lo diré así porque en el fondo así es como te llamas a ti mismo" . Después lo vi tras bambalinas pronunciándolo una y otra vez hasta que lo dominó".
Entre sus añoranzas, Levy quiere medirse con su ídolo, el ex luchador de la WWE, Chris Jericho, con quien ya tuvo la oportunidad de conocerse. "Lo conozco porque en 2015 hice una película que se llama "The green inferno" y que se estrenó en Estados Unidos. Es de terror y a él le gusta mucho ese cine, por lo que de hace un rato algo habíamos conversado por redes sociales. Entonces, le conté que vendría para acá y ahí nos juntamos. Estaba sorprendido porque tomé esta decisión de venirme desde tan lejos. Fue súper buena onda y aproveché de decirle lo muy fan que soy de él".