La suma de malones y convites, y la masiva presencia de amigotes circulando por su penthouse incumpliendo las normas sanitarias por la pandemia, le costaron caro a Iván Morales, delantero de Colo Colo y quien pintaba como uno de los grandes proyectos de la cantera alba.
El futbolista de 21 años debió dejar el departamento donde vivía en la comuna de Las Condes, luego que los propios vecinos del edificio se querellaran en su contra por transgredir de manera recurrente el aforo autorizado durante la emergencia sanitaria y por un hecho que terminó colmando la paciencia de todos los residentes: un improvisado show de fuegos artificiales en la noche de Año Nuevo.
"Ante las denuncias por el comportamiento de Iván Morales en su domicilio y enterados del detalle de estos hechos, hemos decidido que el jugador viva en la Casa Alba hasta el fin de esta temporada. De esta manera garantizaremos la disciplina que se requiere para su rendimiento deportivo", indicó un comunicado que desplegó Blanco y Negro durante una jornada marcada por las reacciones a la denuncia que reveló el noticiero de Mega, y que expuso una serie de barrabasadas del delantero de Colo Colo, autor de 12 goles como profesional en sus casi cinco años de carrera.
"Una conducta como la descrita por los vecinos no es aceptable en ningún joven y menos en un deportista del alto rendimiento de nuestros registros", añadió el texto de la concesionaria.
"El edificio Atenas era el lugar más tranquilo del sector, pero con la llegada de este señor se convirtió un desastre. Yo vivo en el piso 19, este joven vive un piso más arriba, y la noche de Año Nuevo no encontró nada mejor que tirar fuegos artificiales. Acá vivimos muchos adultos mayores, así que imagínese lo que pensamos cuando comenzó a explotar todo. Pensábamos que eran disparos o bombas. No, yo ya estoy demasiado mayor para aguantar tanta cosa", dijo Ana María Muñoz, jubilada de 72 años, y ahora ex vecina de Morales.
-Colo Colo acaba de anunciar que Iván Morales se va del departamento y se va a vivir a la Casa Alba.
-¿De verdad? iPero qué buena noticia! Escuchen (le habla a alguien): iSe va por fin se va! iPor fin se
vaaaaaaa! iBieeeeeeeen! Uuufff, que alegría. Mire, la verdad lo pasamos muy mal. Este joven era muy
irrespetuoso y para todos nosotros significa recuperar nuestra tranquilidad. La gota que rebalsó el vaso
fue lo de los fuegos artificiales en Año Nuevo, yo creo que eso terminó por agotarnos a todos. Yo sentía
que esa noche se me iban a reventar los tímpanos.
Pese a su salida del edificio, Morales de igual modo deberá responder ante la justicia por su comportamiento. La denuncia de los vecinos finalmente se tradujo en dos acciones legales que presentó la abogada de la comunidad Marisa Navarrete, y que durante la jornada también se hizo parte el propio municipio de Las Condes.
"Interpusimos una querella ante el 40 Juzgado de Garantía de Santiago, que tiene que ver con el artículo 318 del código penal, que castiga a quienes vulneran las normas sanitarias por la pandemia, que es un delito que ha sido latamente perseguido por la fiscalía. Y eso es porque el señor Morales hizo fiestas privadas en su penthouse, generando un peligro para la salud de los más de 150 residentes que perdieron a uno de sus conserjes en el inicio de la pandemia, justamente por coronavirus", dijo la representante de los habitantes del edificio.
"Y la otra demanda tiene que ver con el uso de fuegos artificiales y de no haber respetado el reglamento de copropiedad. Recordemos que el domingo recién se promulgó la ley que configura el uso, venta y fabricación como un delito, entonces al momento que sucedieran los hechos en la residencia del señor Morales, se cometió una infracción administrativa", añadió la abogada.
Al respecto, el futbolista podría pagar una multa y, eventualmente, una indemnización a los vecinos si es que el juez así lo determina.
La Casa Alba donde fue a parar Iván Morales es una de pensión ubicada en el Estadio Monumental donde residen los jóvenes futbolistas de Colo Colo que no viven en Santiago o que requieren de mayor cercanía física con el club. En sus instalaciones funciona un centro de eventos que tiene salones de descanso, salas de reuniones, un comedor con vista a las áreas verdes y una acogedora terraza que cuenta con dos mesas de ping pong y dos juegos de taca-taca.
Pese a su salida del edificio, Morales de igual modo deberá responder ante la justicia por su comportamiento. La denuncia de los vecinos finalmente se tradujo en dos acciones legales que presentó la abogada de la comunidad Marisa Navarrete, y que durante la jornada también se hizo parte el propio municipio de Las Condes.
"Interpusimos una querella ante el 40 Juzgado de Garantía de Santiago, que tiene que ver con el artículo 318 del código penal, que castiga a quienes vulneran las normas sanitarias por la pandemia, que es un delito que ha sido latamente perseguido por la fiscalía. Y eso es porque el señor Morales hizo fiestas privadas en su penthouse, generando un peligro para la salud de los más de 150 residentes que perdieron a uno de sus conserjes en el inicio de la pandemia, justamente por coronavirus", dijo la representante de los habitantes del edificio.
"Y la otra demanda tiene que ver con el uso de fuegos artificiales y de no haber respetado el reglamento de copropiedad. Recordemos que el domingo recién se promulgó la ley que configura el uso, venta y fabricación como un delito, entonces al momento que sucedieran los hechos en la residencia del señor Morales, se cometió una infracción administrativa", añadió la abogada.
Al respecto, el futbolista podría pagar una multa y, eventualmente, una indemnización a los vecinos si es que el juez así lo determina.
La Casa Alba donde fue a parar Iván Morales es una de pensión ubicada en el Estadio Monumental donde residen los jóvenes futbolistas de Colo Colo que no viven en Santiago o que requieren de mayor cercanía física con el club. En sus instalaciones funciona un centro de eventos que tiene salones de descanso, salas de reuniones, un comedor con vista a las áreas verdes y una acogedora terraza que cuenta con dos mesas de ping pong y dos juegos de taca-taca.