Lisa Montgomery (52) recibió la inyección que provocaría su muerte en una prisión de Terre Haute (Indiana, Estados Unidos). "¿Tiene unas últimas palabras?", le preguntaron. "No", respondió ella, sin decir nada más. La enfermera procedió a introducir por vía intravenosa el fármaco letal. Falleció a las 01.31, hora local. Montgomery es la primera mujer condenada a la pena de muerte por el gobierno federal, desde hace 67 años.
La mujer fue ejecutada por un homicidio que cometió en diciembre de 2004. Bobbie Jo Stinnett, su víctima, de 23 años, estaba embarazada de ocho meses.
Lisa Montgomery y Bobbie Jo Stinnett se conocieron en internet a través de un foro. Compartían su afición por los perros, especialmente de la raza rat terrier. Montgomery, en ese entonces, ocultó su verdadera identidad. Se hizo pasar por una mujer llamada Marlene Fischer.
El 16 de diciembre de 2004, Montgomery condujo unos 280 km desde su casa en Kansas hasta Skidmore (Missouri). Había acordado una cita con Stinnett para ver unos cachorros que ella tenía.
Cuando Stinnett abrió la puerta, Montgomery la estranguló y tomó al bebé de su útero. La abogada de Montgomery, Kelley Henry, trató de evitar la pena de muerte. Pidió misericordia a las autoridades y argumentó que ella cometió ese delito porque ya no se encontraba sana mentalmente. Montgomery en su infancia fue una niña abusada, añadió.
"El gobierno no detuvo su empeño por matar a esta mujer herida y delirante. La ejecución de Lisa Montgomery estuvo lejos de la justicia", dijo en un comunicado la abogada.