Sergio Rojas, panelista de "Me Late Prime", prefiere no ser muy específico en decir cuánto pesa. "Eso no se cuenta, la edad tampoco". Pero reconoce que toda la vida ha luchado contra la balanza y que sus hábitos alimenticios no son los mejores. "Como muy mal. Hay días en los que llego a mi casa en la noche y el refri tirita".
El sábado 20 de febrero Rojas se sometió a un procedimiento para dejar esa mala costumbre: se puso un balón elipse. ¿Y eso qué es? Una cápsula que en un procedimiento ambulatorio se inserta en el estómago y se rellena con unos 500 ml de líquido, hasta inflarse como un balón que ocupa espacio y produce una sensación de saciedad. Después de cuatro meses, el balón es eliminado por las deposiciones. En un caso óptimo, acompañado de dietas y ejercicios, se podrían bajar de unos 10 a 12 kilos.
"Pero tienes que cambiar tu mentalidad, si no es difícil mantener una baja de peso", advierte Rojas.
Durante el procedimiento, reconoce que tenía un poco de miedo. "Sobre todo cuando vi que la cápsula (balón) era más grande de lo que yo pensaba. Me asusté porque mi principal temor era atorarme, que quedara a mitad de camino. Pero el doctor me explicó que no hay ninguna posibilidad de que se quede atravesada la cápsula, así que me bebí otro trago de agua y bajó".
El lunes, martes y miércoles pasados Sergio se ausentó de "Me Late Prime" por algunos efectos colaterales del procedimiento. "Tengo un poco de asco. Siento que estoy embarazado y lo que tengo, en vez de contracciones, son retorcijones muy fuertes. Es que el estómago, al ver que hay un cuerpo extraño, rechaza al balón y se demora unos tres a cuatro días en aceptarlo y volver a la normalidad".
-¿No pensó en una cirugía más drástica?
-Todo lo que sea que te abran me da mucho miedo. Como el balón era tragable dije "ya okey".
Lo que dicen los doctores
La doctora Magdalena Bravo, especialista en cirugía bariátrica y metabólica, realiza este procedimiento para la Clínica High Care. "Hace que el paciente Explica que el balón es un método restrictivo: tenga saciedad precoz con pequeños volúmenes de alimento ingerido" Está indicado idealmente para pacientes entre 18 y 65 años con sobrepeso y obesidad leve, o pacientes con mayor obesidad que no deseen una cirugía bariátrica. La principal ventaja, dice, es que es un procedimiento ambulatorio que no requiere sedación, anestesia ni endoscopía.En High Care el tratamiento tiene un costo de $2.890.000, con asistencia de nutricionista y sicólogo. Tienen disponibilidad para mediados de marzo.
-¿No hay riesgos de rebote?
-Sí, hay riesgo de efecto rebote, porque el estómago no sufre cambios en su anatomía. Si el paciente no mejora sus hábitos alimentarios durante el período que tiene el elipse, cuando ya no lo tenga puede recuperar el peso perdido. Para evitar que esto suceda es recomendable mantenerse en control nutricional y realizando actividad física.
A cargo del procedimiento de Sergio Rojas estuvo el cirujano digestivo y bariátrico Cristóbal Davanzo (@doctordavanzo en Instagram). Para él, el balón viene a llenar un espacio de mercado: gente que está con algo de sobrepeso, pero no es tanto ni tan poco como para recurrir a una cirugía. ¿Cómo es eso? Explica que las liposucciones son idealmente para remover grasas localizadas y dar contorno corporal; las mangas gástricas y bypass se usan para obesidades más severas. El balón es un tratamiento intermedio: en su caso, con la instalación, el procedimiento cuesta $2.400.000.
-¿Es necesario comer mejor tras este procedimiento?
-Absolutamente. No funciona si el paciente no hace cambios de alimentación o estilo de vida; hay que ordenar los horarios y hacer algún tipo de actividad física mínima, que es donde está la variabilidad de los resultados. La mayoría de los pacientes que he tratado les ha ido bien.
Un año después
Gonzalo Valdebenito (40) se puso el balón en marzo del 2020 con Davanzo. "'Estaba asustado con que el Cowd era un factor de riesgo fuerte para los más gorditos (...) Después del procedimiento sales con el abdomen un poco tenso, como si te hubieras comido una parrillada. Los primeros días no son muy agradables, pero después se te quita el hambre y comes menos". Llegó a bajar 10 kilos (pero luego subió 2). "Estoy en 104", cuenta. Dice que se pondría otro balón sin problemas. '"Vas, estás diez minutos en el procedimiento y listo".-¿No pensó en inyecciones de liraglutida? Están muy de moda para bajar de peso.
-Lo probé, pero en mi experiencia el efecto fue menos duradero. En mi caso me quitaba el hambre, pero tu cuerpo se acostumbra rápido a la dosis y tienes que ir doblando. A mí me funcionó bien para bajar de 2 a 3 kilos, pero no es tan violento como el balón.
-El balón no deja de ser caro para durar sólo cuatro meses.
-Es caro, no tiene cobertura con la Isapre, pero de las alternativas para bajar de peso que no sean tan radicales como una cirugía es una buena opción.