Verónica Contreras, presidenta de la Confederación Nacional de Transporte Escolar y Turismo, cuenta que hace algunos días mandó 20 mensajes de WhatsApp. Eran para preguntarles a mamás y a papás si iban a requerir transporte escolar. Sólo tres le respondieron y apenas uno le preguntó por precios.
"Es que hay muchas dudas de los padres. En el colegio donde trabajo recién esta semana mandaron la información de cómo van a funcionar. Y hay muchos que tampoco se han puesto en contacto con los transportistas, porque siguen pensando que no es un tema de ellos", explica.
Con el regreso a clases presenciales a la vuelta de la esquina, los ministerios de Transportes y Telecomunicaciones y de Educación dieron a conocer el plan de seguridad sanitaria para el transporte escolar, en cuya confección también trabajaron el Ministerio de Salud y los transportistas.
Allí se detalla, entre otras cosas, el uso obligatorio de mascarillas durante el traslado y que los niños no pueden comer. 'Algo bueno, porque por más que uno les decía a los papás que no se podía comer, muchos les mandaban el desayuno y se lo iban comiendo en el camino", dice Contreras.
El protocolo además estipula que "tanto al inicio de cada recorrido como al final se debe seguir la rutina de limpieza y desinfección" del vehículo y que hay que "mantener una lista de pasajeros diaria, para poder realizar trazabilidad en caso de que ocurra un brote de la enfermedad". A los niños se les debe tomar la temperatura, dato que será anotado en esa planilla.
"Acá es fundamental que los colegios se pongan en contacto con sus transportistas. Para muchos es un asunto de la reja para fuera", explica la líder del gremio.
Contreras describe que en su colegio ahora permitirán a los furgones ingresar al recinto y dejar a los niños adentro. Y acordaron que los transportistas entregarán diariamente al establecimiento el listado de los niños, con sus respectivas temperaturas. "En la tarde nos entregarán la planilla con la temperatura tomada. Si hay algún cambio lo dejarán aislado hasta que venga el apoderado a retirarlo. Así se va a saber cuáles fueron sus contactos estrechos".
Respecto de la ventilación, algo fundamental para evitar contagios en espacios cerrados y dado que las autoridades no especificaron un número máximo de niños por furgón, el documento del ministerio explica que hay que "ventilar el vehículo cuando no se encuentre en servicio y, de ser posible, circular con algunas ventanas semiabiertas durante el trayecto".
-Verónica, ¿Cómo fue la discusión respecto a la ventilación?
-Nosotros trabajamos con un ingeniero en prevención de riesgo y él aconsejaba que cada ventana estuviera abierta 3 centímetros. Cuando vimos el tema con el ministerio, ellos tenían temor de que si la ventana estaba muy abierta los niños podrían sacar la cabeza y les podría pasar algo. Quedamos en que las ventanas vayan siempre un poco abiertas, como para que haya circulación constante. Cuando haga frío habrá que decirles a los niños que usen un gorrito.
La ministra de Transportes, Gloria Hutt, comentó que "este año el transporte escolar tendrá un desafío importante en el traslado de nuestros hijos. Hemos trabajado en una serie de exigencias para que viajen seguros. Se trata de recomendaciones similares a las que hemos hecho en el transporte público y privado".
Según cifras del ministerio, en Chile hay 29.196 conductores de transporte escolar. De ellos, 8.981 están en a Región Metropolitana.