José Luis Villanueva puso la alerta en Twitter este jueves. "Me robaron un celular y estén tratando de entrar a mis redes, correos, banco, apps de comidas, etc... Fue hace tres días y siguen queriendo hacer daño. No les basta con el teléfono en sí..." , contó el ex futbolista. El comentarista de ESPN dice que el robo ocurrió el lunes, a las cinco de la tarde, cuando fue a comprar unos artículos deportivos al Portal La Reina y sufrió el hurto desde el interior de su auto. El teléfono estaba en la guantera.
Hace un mes, el ex jugador andaba con dos celulares de su uso diario. En sus últimas vacaciones en Estados Unidos, en enero, se compró el último iPhone, pero en Chile, por un tema legal, le exigían homologarlo y se lo habían bloqueado. "Fue la primera vez que salí con los dos teléfonos", agrega. Además del celular, le robaron unos anteojos y un bolso con artículos deportivos que utiliza para su empresa de eventos.
Como medida de protección obvia, Villanueva bloqueó su dispositivo a través de iCloud. Cambió todas las contraseñas que pudo, sus redes sociales estaban verificadas, excepto Twitter donde intentaron ingresar a su nombre.
Pero los problemas se profundizaron el martes, casi a la misma hora. "El iPhone lo bloqueé y de repente al otro día me llega un mensaje de que había sido encendido. Me metí y desapareció. No sé cómo lo hacen para desligarlo de la cuenta del iPhone. Deben ser bandas que se dedican a esto. Lo abrieron y tuvieron acceso a todas mis cosas. Y ahí se robaron 800 lucas en Uber Eats en copete. También hicieron una compra en el extranjero de Uber Eats, de 700 dólares", relata.
A las cinco de la tarde, le llegaron dos recibos de Uber Eats, aplicación en la que, como suele suceder, tenía enlazada su tarjeta de crédito. Una compra en una botillería de Santiago y otra en Macul. Ambos pedidos tenían el mismo destino: Placer 880, en el barrio Franklin, en Santiago. Uno de los pedidos consistía en cinco botellas de whisky Jack Daniels, cinco de whisky Chivas Regal 12 años y cinco promo de pisco Bauza de 1 litro, con bebida de 1,5 litros y papas fritas. ¿El monto? 394.630 pesos.
-¿Qué hizo después?
-De inmediato, llamé a mi banco para que no se siguiera repitiendo y lo dl como compra no reconocida.
-¿Tenía algún método para bloquear su celular?
-Sí, el número que pide siempre y el face ID (reconocimiento facial).
-¿Hizo la denuncia?
-Hice la denuncia en PDI, por supuesto. Lo que más molesta es que te sientes súper vulnerable. No solamente me robaron el teléfono, los tipos están tan organizados que roban el teléfono para seguir robando y ahí se pone peligrosa la cuestión.
Desde 2020, existe la ley N° 21.234 en Chile, que limita la responsabilidad de titulares o usuarios de tarjetas de pago y transacciones electrónicas en caso de extravío, hurto, robo o fraude.
-¿El banco le respondió?
-Los bancos funcionan súper bien, bloquean, inician la investigación, el cliente no paga eso, porque no corresponde que uno lo pague. La tarjeta de crédito tiene un seguro.
Andrea Huneeus fue víctima de un delito similar en enero, pero ella se contactó directamente con la aplicación de delivery. "Hice la denuncia a fiscalía. Nunca me contactaron. Uber Eats me reembolsó las compras", cuenta.