Hasta marzo del año pasado, Camila Nash, ex participante de "Calle 7" y "Mundos opuestos", vivía en su departamento de Providencia y se mantenía gracias a su salón de manos y los pitutos varios que le salían. Un año después su realidad es muy distinta: este miércoles entregó para arriendo su depto, trabaja en la Panadería Arlegui, ubicada cerca del terminal de buses de Viña del Mar, y vive en una cabaña en 6 Norte, en un espacio justo para ella y su gato Romeo.
Como a muchos, el Covid-19 le cambió el presente. "Yo había abierto el salón en 2018, pero la pandemia empezó a dificultar el trabajo y lo tuve que cerrar en mayo. Después me vine a Viña porque mi mamá estaba con un proyecto de una panadería que abrió en junio", cuenta ella.
-¿Dónde vive?
-Arrendé una cabaña en 6 Norte, chiquitita, para mí y el gato. El miércoles fui a desocupar mi departamento. Lo puse en arriendo (amoblado) con todo el dolor de mi corazón. Sería rico tener dos casas, pero no es mi realidad, hay que tomar decisiones que duelen.
-¿Qué hace en la panadería?
-Soy la jefa pulpo, porque hago de todo. Recibo a la gente, hago caja, administración, soy un salvavidas y los ojos de mi madre. También veo el Instagram de la panadería (@panaderia_arlegui).
-¿Qué horario tiene?
-Habitualmente descanso domingo y lunes. Llego como a la hora de almuerzo y generalmente me quedo toda la tarde, que es muy movida. Abrimos a las 8 y cerramos a las 20:30.
-¿Cuánto vale un kilo de pan batido (marraqueta para los santiaguinos)?
-1.490 es el más barato, después subes a las dobladitas, el pan con cebolla, con aceituna y el pan de hoja, que son más caros porque tienen más materiales y más trabajo.
-¿Pero sabe algo de pan?
-He aprendido, ya sé cuando un pan es del día, cuando es de ayer, cuando está bonito, cuando no está bien hecho. No digo que si falta el panadero voy a poder salvar haciendo el pan, no tanto.
-¿Y si hay una emergencia?
-Jajajá, noooo, no creo, es que los hornos son muy fuertes, yo les digo el infierno . Las máquinas son nuevas y requieren de un conocimiento. Yo vendo, te vendo lo que quieras.
-¿También es pastelería el local?
-Sí y todo Io hacemos nosotros. Tenemos rotisería con embutidos normales y un rincón de Chillán, helados, chocolates, detergentes hasta Y mascarillas, es un mini market.
-¿Con lo que gana ahora se puede mantener?
-Con el sueldo de la panadería y los pitutos, que bajaron un 60 por ciento, sí. No genero deudas, estoy tranquila, sin derroche. Voy feliz a trabajar, me encuentro con los chiquillos y me río con las tallas de los clientes. Ha sido un bonito cambio. Aprendí a bajar las revoluciones, a relajarme. Claro que a mí me gusta la tele y estaría dispuesta a volver a Santiago si me saliera un contrato.
-¿Pololo?
-Ehhhh, no, estoy soltera. Hay algunas, no sé cómo decirlo, propuestas, unos prospectos. Yo me dejo querer.
-¿Qué me dice de Julio César Rodríguez (fueron pololos)?
-Le tengo un cariño enorme, lo adoro, tenemos súper buena relación. Él sabe que cuenta conmigo para Io que sea. Lo quiero y lo respeto muchísimo.