Ileana Rivera es un agente de bienes raíces mexicana, con más de quince años de experiencia y actual presidenta de la sección inmobiliaria de la Cámara de Comercio de Guadalajara. También es la esposa del ex futbolista chileno Reinaldo Navia, quien en los últimos meses decidió darle una mano para difundir los proyectos de su empresa "De Rivera Inmobiliaria" (ileana_derivera_inmobiliaria en Instagram).
'"Siempre me llamó la atención el tema de las propiedades. Como futbolista, uno está acostumbrado a comprar bienes raíces para nuestro futuro porque no se devalúan. Es la mejor inversión en ese sentido. He ido aprendiendo harto de mi mujer y me gustaría hacer cursos sobre el tema para estar mejor preparado", cuenta Navia, quien igualmente tiene una cuenta dedicada al negocio familiar (reinaldonavia_realestate).
-¿Cuál es su rol como agente de bienes raíces, Reinaldo?
-Llevo tres meses recién, pero la intención es asesorar a gente pública y sobre todo futbolistas. A veces se dejan llevar por amigos e invierten mal. Los bienes no se van a desvalorizar, la plusvalía crece y también sirve para asegurar una renta fija o arriendo a futuro. Tengo hartos seguidores en redes sociales y conozco a gente de nivel social alto. Entonces puedo ayudar a que nuestros productos sean más vistos.
Su esposa Ileana, con quien lleva catorce años de casado y tienen tres hijas, Antonella (12), Luciana (10) y Alessa (6), especifica la pega que cumple Navia. "Él tiene el tema de la difusión a su favor y o la experiencia. Ahora con la pandemia hemos trabajado en la oficina de la casa juntos, casi todo por Zoom", explica.
-¿No le dio lata que Reinaldo invadiera su negocio, Ileana?
-No, fíjate que no. Él tiene sus clientes y, después de ciertos filtros, yo me dedico a cerrar los negocios. También toca ir harto a terreno, a las propiedades, a las oficinas de los desarrolladores de proyecto. Entonces tampoco estamos todo el día juntos. Hemos funcionado bien.
DeRivera Inmobiliaria tiene tres ramas de trabajo. "Está el área de corretaje, que es cuando tú, como propietario, quieres vender una propiedad o terreno. Nosotros ayudamos a comercializar. Después están los proyectos especiales, que son de preventa. Ese es mi fuerte: preventa a inversionistas. Por lo general son condominios cerrados con lotes o en vertical, es decir, edificios. Cuando apenas va a salir el proyecto pueden invertir con mejores precios y tendrán mejor rentabilidad cuando esté terminado. Y la otra pata del negocio son proyectos de playa, como en Puerto Vallarta, Playa del Carmen o Tulum (México). Son para inversionistas que no van a vivir ahí, sino que lo usan para vacaciones y arrendarlos por plataformas como Airbnb", dice Ileana.
-¿Tienen proyectos fuera de México?
-Para que los clientes puedan diversificar en otros países, tenemos un proyecto hotelero llamado Casa Marella en Miami, Estados Unidos. Te invita a ser propietario de la tierra, del inmueble y, además, el negocio hotelero. Es interesante porque ganas en dólares y al tener acciones de un hotel te crea un precedente si el día de mañana quieres sacar la visa de inversionista en Estados Unidos porque estarías generando empleos. ¿Chile? Esperamos que pronto podamos comercializar algunos proyectos allá también. El tema turístico en Tulum, Playa del Carmen o Miami puede ser interesante para alguien que viva en Chile. Miami está lleno de brasileños que van de vacaciones o invierten, entonces la distancia no limita.
-¿Cuáles son los montos de los proyectos que manejan?
-Normalmente los proyectos que promovemos andan en un rango de 500 mil dólares. El mínimo debe ser 200 mil dólares. Manejamos un mercado de clase media alta a muy alta.
Tanto Ileana como Reinaldo están conscientes de la responsabilidad que conlleva su trabajo. "'Es algo delicado porque tienes el patrimonio de las personas en tus manos. La falta de experiencia puede meter al cliente en problemas o pagar impuestos altísimos", dice ella. "No te creas que porque soy Reinaldo Navia me llaman montones de gente. Tengo que ir paso a paso para ganarse un nombre y la confianza. Hay que tener paciencia", cierra el ex delantero.