El pómulo derecho del rostro del concejal de Maipú Alejandro Almendares está hinchado y morado. Es el reflejo de uno de los tantos golpes que recibió el martes pasado, en la feria Cuatro Álamos de la mencionada comuna. El político RN era acompañado por su esposa, quien resultó con el tabique nasal fracturado.
A las 6:30 de la mañana del martes el concejal (RN) y su señora, terapeuta de Flores de Bach, ya estaban en campaña, en la calle, repartiendo calendarios, bolsas reutilizables y panfletos que aludían a su reelección. Junto a dos de sus colaboradoras y su esposa llegaron pasadas las 13 horas a la feria Cuatro Álamos donde minutos después su esposa quedaría con la nariz rota y él "con chichones y adolorido", tal como relata.
"Estábamos caminando por la feria y en eso se acercan dos hombres, pero solo uno participó de la agresión, el otro se puso a grabar como a modo de trofeo. Empezó a decirnos que nunca más la Cathy Barriga, nunca más la derecha. Yo respondí que eso hay que verlo en las urnas y en eso dos mujeres se acercan y le empiezan a pegar a mi señora", cuenta el político RN y detalla:
"Me interpuse para que no le pegaran, pero otro hombre se me abalanzó. Traté de reducirlo, pero tomé la decisión de dejar que me golpearan para proteger a mi señora con mi cuerpo. La puse entre mis piernas y el gallo me comenzó a golpear con los puños, porque yo estaba concentrado mirando al suelo para bloquear las patadas y golpes de puño a mi mujer. Me debe haber pegado 30 golpes en la cara como con un movimiento de martillo. El tipo se subió a unos peldaños de tierra y desde ahí me pegó como cuando uno le pega a la masa del pan, debe haber durado unos cuatro segundos", recuerda el concejal que fue elegido en su cargo con primera mayoría, con más de 7.400 votos en 2016.
"Esto no sale en el video (que circula en redes sociales), pero cuando mi señora logró salir de la zona de peligro yo caminé hacia una carnicería y vi que uno de los tipos tomaba un fierro, de esos con los que se levantan los toldos de las ferias, un fierro cortopunzante que sacó de ahí mismo", resume el concejal y cuenta que salió corriendo del lugar. Almendares ya presentó la denuncia correspondiente ante tribunales.
La testigo
Vinka Sepúlveda es vecina desde hace más de 30 años del barrio Villa Cuatro Álamos. A la hora de los hechos relatados ella estaba eligiendo frutas y verduras, caminando por el mismo pasillo por donde el concejal repartía su merchandising de campaña y donde dos mujeres de avanzada edad conversaban de sus preferencias políticas para las elecciones de este fin de semana. Según ella, la conversación de las mujeres detonó el problema. "Vi el momento en que la esposa de Almendares increpó a una de estas señoras. Lo que pasó es que mientras ellas conversaban sobre las votaciones justo iban pasando por ahí el concejal y su esposa. Una le preguntó a la otra por quien iba a votar y entonces la otra señora respondió que no iba a votar por nadie, porque todos son ladrones. Justo iba pasando el grupo de Almendares y la esposa escuchó eso y le dijo: "a quién le vienes a decir ladrón. Mi marido no es ningún ladrón' y varios vecinos salieron en defensa de la señora", cuenta Vinka. A modo de reflexión afirma que en el lugar, donde la mayoría de los vecinos se conocen hace años, no cabe la pelea por política. "La gente que defendió a la señora en ese momento ni siquiera son personas de un partido político, ni siquiera les interesa la política y las señoras solo estaban conversando como vecinas, porque con la pandemia, uno solo tiene acceso a ir a la feria. Pasas toda la semana encerrada e ir a la feria es también para compartir y conversar con los vecinos", dice Vinka y añade que "las personas tienen que tener educación política y no responder a cualquier cosa".La Brigadista
En el momento de la agresión las dos colaboradoras del concejal habían ido al auto para buscar más material para regalar a los feriantes y vecinos. "Cuando volvimos vimos mucha gente agolpada, mirando y gritando improperios. Tratamos de entrar a ayudar, pero no nos dejaban pasar porque vieron que éramos de su partido. Solo haciendo fuerza y empujando logramos entrar y sacar de ahí a la esposa del concejal", comenta una de las brigadistas.Sobre los autores de la golpiza el concejal Almendares agrega que el asunto está en investigación, pero que "se sabe que no se trata de feriantes", dice el concejal quien recibió el apoyo del también concejal del partido comunista Ariel Ramos. "Golpearon en el suelo a la señora del concejal. Es triste ver esas imágenes y no queremos que se repitan", comenta Ramos.