Jason Avellaneda visitó Chile por primera vez al terminar sus estudios de técnico profesional en gastronomía. Fue el 2012 y le encantó. "Para la mayoría de los colombianos, Chile es como la Rusia suramericana. Y efectivamente lo comprobé cuando lo visité por primera vez. Chile es un país muy desarrollado, fue impresionante ver cómo evoluciona y crece día tras día frente a otros países del sur de América".
El 2017 regresó para un concurso de danza y decidió radicarse en Santiago. "En esa época había buenos trabajos para los extranjeros y la conversión monetaria se cuadruplicaba, entonces era más fácil ayudar a mi familia". Alcanzó a vivir tres años y medio acá e hizo de todo: desde planificación de eventos hasta trabajar para una compañía de telecomunicaciones.
"Fue enriquecedor. Nunca en Colombia habría hecho algo parecido a lo que hice allá. En Colombia no hay continuidad en una empresa, hay mucha rotación. A mí en Chile no me echaron, sino que era porque los proyectos se finiquitaron y tenía que buscar otro trabajo".
-En Chile había más trabajo que en Colombia.
-Cuando llegué había más oportunidades, pero ahora que han llegado tantos extranjeros se ha vuelto más difícil y los sueldos desmejoraron bastante.
Tras el estallido social y la posterior pandemia, Avellaneda se vio obligado a volver al municipio de La Calera, cerca de Bogotá. "Me quedé sin trabajo en Chile, además que todo se puso costoso y no contaba con los recursos para subsistir. En Colombia cuento con el apoyo de mi familia y mi propio apartamento, entonces no era razonable endeudarse cuando aquí lo tengo todo".
Hoy trabaja como asesor de ventas y durante las noches en una escuela cultural de artes performáticas; los fines de semana las oficia como maestro de ceremonias en el centro de eventos Rincón del Tesauca, y además es wedding planner . "Me siento muy bendecido de tener trabajo pese a las circunstancias que estamos viviendo mundialmente", reflexiona.
El bajón de la pandemia
El colombiano Darwin Martínez (33) llegó a Chile el 2016 y alcanzó a vivir cinco años. "Me fui hace unos cuatro meses", cuenta. Actor, trabajó para una productora y en paralelo en un OK Market. "Después del estallido quería buscar otras opciones que le dieran un peso diferente a mi currículum; trabajar en bancos o entidades financieras. Pero con la pandemia mis planes se vieron truncados".Como actor no aparecía trabajo alguno, cosa que lo bajoneó. "En la productora no salían presentaciones y nadie tenía trabajo". Así fue sintiendo que no tenía posibilidad alguna de generar buenos ingresos.
"Me vine de vacaciones hace unos meses a Colombia para pensar si regresaba a Chile o me iba para otro lado, pero he visto que la situación en Chile no mejora; se vienen elección, la nueva Constitución y siento que sigue habiendo mucha tensión social, aunque lo más jocoso que me pasó fue que me vine a Colombia y estamos en las mismas. Pero acá, independiente de la situación, estoy con los míos".
Actualmente Martínez reside en Palmira Valle, sureste de Colombia. "Estoy estudiando en el CENA, que es una entidad gubernamental que ofrece cursos gratuitos. Estoy haciendo varios cursos virtuales, de administración de recursos humanos, diseño y ahora un curso de francés".
De regreso a España
Los doce años que Mónica Sánchez pasó en Chile fueron bien provechosos: se casó, tuvo dos hijos y armó"Tentadas", blog de temas femeninos. Pero la periodista catalana vuelve a España a finales de este mes, una decisión que asegura no fue determinada por nuestra situación país ."Queremos retomar la vida allá y cuidar a mis papás, que son mayores", cuenta. Su idea es seguir en modo teletrabajo y con el tiempo ir buscando trabajo en España. "Lo que más voy a extrañar son las relaciones personales: en Chile encontré a gente muy cercana y amigable".
Nuestro atractivo local
Carmen Luz Morales, gerente general de la empresa experta en empleabilidad People & Partners, recuerda que a mediados de la década pasada (especialmente en 2014 y 201 5) Chile recibió un interesante flujo de profesionales de Europa. "Venían atraídos por la estabilidad, tasas de crecimiento y el hecho de que Chile era de alguna manera el lugar más adecuado de toda Sudamérica para trabajar y emprender. Tras eso, por la crisis migratoria en Latinoamérica llegaron profesionales de Venezuela, Perú y Argentina", explica.Tras el estallido y pandemia, el atractivo de Chile cayó y eso ha hecho que los profesionales europeos elijan otros destinos. "Van a algunos países como Irlanda, Bulgaria, República Checa, Estonia o Croacia, que se están desarrollando y creciendo a tasas importantes, y empiezan a ser opciones bastante más interesantes". En su opinión el flujo de profesionales de Latinoamérica a Chile, eso sí, no va a cambiar: "Pese a la crisis sanitaria y a las repercusiones en el mercado del trabajo, nuestra economía aún es la que presenta mejores proyecciones laborales".