Nació con el nombre de Alfred Thomas Highmore el 14 de febrero de 1992 en Londres, en el seno de una familia artística. Su padre, Edward, era actor y su madre, Sue Latimer, una famosa agente de actores. Por eso no fue sorpresa que el pequeño Freddie comenzara a actuar y en 1999 interpretó al hijo de Helena Bonham Carter en "Women talking dirty".
Luego destacó actuando en "Descubriendo la tierra del Nunca Jamás" ("Finding Neverland", 2004) junto a Johnny Depp y ambos se reencontraron en "Charlie y la fábrica de chocolate" ("Charlie and the chocolate factory", 2005). Su fama se consolidó con su interpretación del joven Norman Bates en la serie "Bates motel" (2013-2017). Highmore coronó su buena suerte protagonizado "The good doctor" (se emite por T VN y también está disponible en Amazon Prime Video), donde tiene el rol de Shaun Murphy, un joven doctor autista con síndrome de Savant o síndrome del sabio (la gente con dicho rasgo se caracteriza por tener alta capacidad cognitiva: muchos tienen memoria fotográfica y son capaces de hacer cálculos matemáticos complejos) que integra un equipo médico en un hospital de California.
De su vida amorosa poco se sabe y si bien algunos medios señalaron a un par de actrices (Dakota Fanning y Abigail Breslin) como sus parejas en el pasado, actualmente se desconoce si está en una relación y tampoco tiene hijos.
-¿Dónde está viviendo?
-En Vancouver, Canadá, donde filmamos el programa. Este es mi décimo año allí porque también hicimos "Bates motel" en esa ciudad. Me siento como en casa, aunque mi verdadero hogar se encuentra en Londres, donde crecí.
-¿Qué extraña de Londres que no puede encontrar en Vancouver?
-Una buena taza de té, jajajá. Creo que el teatro, la cultura y el fútbol. Mi equipo es el Arsenal. En mi familia tenemos 2 entradas para todos los partidos. Ahora los estoy reemplazando con partidos de hockey sobre hielo en Vancouver. Es mi nuevo deporte. También extraño el pescado frito con papas fritas. Vancouver es un lugar muy hermoso, una ciudad pequeña, donde uno se acostumbra fácilmente, es tranquila y calmada.
-¿Le ha afectado su popularidad?
-A pesar de todo, no he estado expuesto a crecer frente a las cámaras de los paparazzi y siento que tuve una niñez normal. Mantengo una distancia con el mundo actual ya que por ejemplo no estoy en Instagram o Twitter. Crecí en Londres en un ambiente distante de Hollywood, donde me fue posible asistir al colegio y luego a la universidad, periodo en que dejé de actuar durante dos a tres años.
-Eso fue importante para usted.
-Por supuesto, sobre todo a la edad de 18 años, cuando muchos jóvenes hacen esta transición y yo logré ser uno de ellos, postergando mi carrera de actor para vivir esta experiencia. Asistir a la Universidad de Cambridge fue una vivencia excelente para mí, muy normal y no actué mientras estuve ahí aunque ofrecían actividades teatrales excelentes. Me sirvió mucho conocer el mundo sin actuar para aprender de la verdadera realidad y usarla posteriormente en mis interpretaciones.
-Ha pasado mucho tiempo de su vida en sets de cine y TV. ¿Extraña tener una vida personal aparte?
-Siento que tendré tiempo para ello, jajajá. Ahora estoy concentrado en estas oportunidades excitantes que se me están presentando, pero por supuesto tengo momentos solitarios viviendo en Vancouver durante 8 meses del año, sin ver a mis amigos ni mi familia. Quiero decir que el elenco es fabuloso, pero obvio que también deseo tener más vivencias personales.
-¿Cómo ve su futuro?
-Creo que trabajando en "Bates motel" y escribiendo, dirigiendo y produciendo 'The good doctor", me hicieron tener metas más claras en cuanto a lo que me gustaría continuar haciendo en esta industria. Pero es difícil planificar, aunque soy un planificador por mi carácter y me gusta la idea de continuidad. Luego de "Bates motel", nunca me imaginé que seguiría en otro programa de TV y tres días después me reuní con David Shore (creador y productor de "The good doctor"), leí el guión que me presentó y acepté su propuesta. En mi futuro, probablemente regresaré a Inglaterra, donde me gustaría comprarme una pequeña casa en el campo y tener una vida sencilla, aunque por supuesto no ahora a los 29 años. Es bueno tener todas estas oportunidades trabajando alrededor del mundo, pero sé que más adelante vendrán momentos más tranquilos, cuando ya nadie desee que yo siga haciendo algo, jajajá.