Siete estudiantes de la Escuela Domingo Santa María de Renca tuvieron este lunes su primera clase de Ciencias Naturales en realidad virtual, gracias a que la tecnología 5G permitió que todos se conectaran al mismo tiempo a software de realidad inmersiva, con el que pudieron observar cada parte del cuerpo humano como si estuviesen dentro del propio organismo. Todo eso sin que las imágenes se quedaran pegadas.
Maureen Sepúlveda, profesora de la asignatura, cuenta que nunca había utilizado la tecnología 5G, pero sí estudió los beneficios de la red en cuanto a velocidad y latencia, que en palabras simples, es el tiempo que demora en llegar la información al dispositivo conectado a internet.
"Esperamos que las clases se modernicen. Queremos motivar a los niños y niñas porque la clase tradicional ya no va. Los minutos de atención cada vez son menos y los estudiantes esperan aprender otras cosas", asegura la profesora.
Las clases con 5G
Valenzuela fue de las profesoras que la sufrió con la pandemia. Hacer clases por internet, dice, fue difícil porque la calidad de la conectividad era desigual en los hogares de sus alumnos y alumnas."En pandemia nos dimos cuenta que trabajar con 3G 0 4G era complicado para las clases virtuales porque había que apagar todas las cámaras para que no se quedara pegada la clase. Con 5G esa situación cambia positivamente", celebra la profesora.
La clase de anatomía con realidad virtual en el colegio fue posible porque Entel y Ericsson llevaron la tecnología 5G al establecimiento. En la actividad, además, Claudio Castro, alcalde de Renca, firmó un acuerdo con Entel para promover el desarrollo tecnológico y favorecer la inclusión digital en la comuna.
Roberto Cabanillas, director de Servicios Digitales de Ericsson para Chile, explica que el 5G abre las posibilidades que tiene el ser humano de interactuar con las máquinas debido a que tiene diez veces más velocidad que el 4G y hasta 100 veces menos latencia. De hecho, la clase de anatomía se hizo con solo 17 milisegundos de latencia.
"Los alumnos no necesitan gafas de realidad virtual sofisticadas porque el 5G logra la conectividad y que se ven bien las imágenes. Las gafas Io único que hacen es entregar una visión estereoscópica, pero no tienen ninguna electrónica. Solo se les pone el celular en una ranura y los alumnos ven la imagen que transmite", destaca Cabanillas, quien agrega que el 5G puede llegar a tener una latencia de un milisegundo. En cambio, dice, el 4G en zonas rurales tiene latencia de 100 milisegundos.
Antonio Büchi, gerente general de Entel, cuenta que hace unos días fue invitado a probar una aplicación de Facebook que simulaba una reunión en una oficina. Lo novedoso, dice, era que las personas podían transformarse en avatares, hablar y escribir cosas en la pizarra, tal como si fuese una reunión en la vida real.
"Es notable. Son nuevas formas de interactuar con el 5G. Acá vemos cómo un profesor dirige una clase de biología centrada en anatomía. Integrar la tecnología al proceso educativo es posible. En Renca tenemos 43% de cobertura 5G. Además, hemos desplegado 669 antenas en el país, lo que se traduce en 60% de avance de nuestro proyecto de 5G. Estamos en catorce regiones y 80 comunas", asegura Büchi.
Durante la pandemia, cuando había confinamiento y los estudiantes debían asistir a clases virtuales, circularon varias fotos en que se veía a niños y niñas subiéndose al techo de sus casas para poder conectarse a una clase virtual. Claudio Araya, subsecretario de Telecomunicaciones, destaca que justamente la meta es que si alguien no se conecta a internet sea porque no quiere y no porque no puede.
"El acceso, cuando no es equitativo, genera inequidades posteriores. Esos niños aprendieron menos que los que sí teman acceso. Buscamos que nunca más los niños tengan que estar en los techos para estudiar", asegura.