Hablando de historia, Gabriel Boric distendió el ambiente durante el acto por el Combate Naval de Iquique que se desarrolló en la Plaza Sotomayor de Valparaíso. La ceremonia estuvo precedida por una semana tirante entre La Moneda y la Armada. En primer lugar, por la decisión de remover al contralmirante Jorge Parga como jefe de defensa del Biobío y Arauco. También por las declaraciones del exjefe de la marina Miguel Ángel Vergara, quien durante un acto en la semana habló de amenaza interna y conminó a los marinos a lanzarse al abordaje.
El mandatario llegó al monumento porteño minutos antes del mediodía y fue recibido con algunas pifias de los asistentes apostados en las calles aledañas. Tras el discurso del comandante en jefe de la Armada, almirante Juan Andrés de la Maza, las autoridades ingresaron a la cripta donde están los restos de los principales participantes del combate, incluyendo a Arturo Prat y Carlos Condell.
Ya en el monumento, Boric escuchó al sargento Aldo Escobar, quien relató la historia del insigne mausoleo y describió la forma en que los restos heroicos llegaron a ese lugar. El mandatario aportó lo suyo: "La construcción de la figura de Arturo Prat no es algo posterior, sino que inmediato. O sea, las tropas que estaban combatiendo en la Guerra del Pacífico o la guerra del salitre, como también se le llama, ya eran conscientes de la hazaña de Prat y ya era inspiradora en ese momento".
A continuación vino un intercambio de pareceres y comentarios con alusiones a libros y a cronistas que relataron las vicisitudes bélicas de fines del siglo XIX. El momento de máxima distensión ocurrió por un dato numismático que lanzó Boric. "El billete de diez mil pesos que tiene la cara de Arturo Prat, en la parte de atrás antes estaba el pueblo de Ninhue y eso no sé por decisión de quién se cambió", acotó el presidente, quien recordó la molestia que eso había generado en la localidad de la Región de Ñuble.
Luego, espontáneamente, preguntó: "¿Alguien tiene un billete de diez lucas? Para ver que hay atrás ahora". Los uniformados y las autoridades políticas sonrieron ante la petición. "Hay puras tarjetas de crédito", comentó una de las personas. Un uniformado de la comitiva sacó de su billetera la denominación solicitada y se la pasó a Boric, quien comprobó que en el dorso figura una estampa del Parque Nacional Alberto de Agostini, ubicado en Magallanes, la región de origen del mandatario.
En vista del interés presidencial por el tema, De la Maza mencionó el trabajo que la Armada hace en la hacienda San Agustín de Puñual, lugar de nacimiento de Prat, adonde invitó a Boric cuando él Io estimara pertinente para que conociera directamente ese monumento nacional. El mandatario asintió y luego siguieron recorriendo el mausoleo hasta que llegó la hora del desfile frente a la comandancia naval.
"Buscar el encuentro"
Al final del acto, la señal televisiva oficial recogió declaraciones de Boric sobre el estatuto especial que rige en Arauco y la Araucanía. "En los momentos difíciles que vivimos, todos tenemos que hacer los máximos esfuerzos por buscar el encuentro entre quienes habitan nuestro territorio. A eso está dedicado este gobierno, garantizando la seguridad de sus habitantes y también los procesos de más largo aliento, que nos garanticen el encuentro entre nuestros pueblos", dijo.La jornada terminó sin contratiempos y con un comunicado enviado por la Armada clarificando la postura institucional sobre los dichos del exalmirante Vergara. "Ni el comandante en jefe ni los miembros de la institución presentes en una actividad de la Liga Marítima de Chile tenían conocimiento del contenido del discurso pronunciado por al almirante (r) Miguel Ángel Vergara".
Sus dichos "corresponden a una opinión personal " Armada hace presente que trabaja en pos de todos nuestros compatriotas y reitera que no comparte los dichos de la existencia de un enemigo interno", concluyó el comunicado.