¿Cómo elegir?
Cuando todo parece más caro que nunca es normal buscar
el ahorro como sea. Pero si se trata de cosméticos o
perfumes, siempre es mejor optar por productos que
cuenten con un sello de calidad y estén autorizados para
su venta en Chile. El riesgo de echarse encima un cóctel de
químicos y terminar con daños a la piel es alto. 
Por lo general, las fragancias falsificadas se venden online en sitios genéricos (que suelen incluir delivery para entregar más confianza) o bien en cunetas y ferias libres (donde se les suma la exposición a altas temperaturas). "Son un riesgo, ya que pueden contener solventes de baja calidad o con residuos tóxicos, colorantes o compuestos no autorizados que pueden generar efectos adversos", advierte Lucía Martínez, presidenta ejecutiva de la Cámara de la Industria Cosmética.
El problema es que la piratería es cada vez más refinada y muchas veces los falsificadores usan envases vacíos de perfumes de marca, los lavan y los rellenan. La primera gran luz de alerta es una oferta demasiado tentadora.
"Siempre es mejor preferir los canales de comercialización formales porque son productos que fueron aprobados y catalogados como seguros. Además, el consumidor recibe boleta y puede ejercer sus derechos", recomienda Martínez. Sus consejos son fijarse en que el producto esté debidamente aprobado por el Instituto de Salud Pública (ISP), que venga sellado y en su caja de cartón (que previene el contacto del líquido con la luz), que incluya el listado de ingredientes, el número de lote y país de fabricación o fabricante.
¿Un buen dato para chequear rápido? Lorena Taborga, directora de Belleza en Dafiti, explica que un perfume original tiene un código de barras único ; su caja contiene una codificación con letras que debe coincidir con la codificación del frasco. Un perfume legal, además, se caracteriza por la fijación del aroma, que dura mucho tiempo y no deja una sensación grasosa en la piel: "Una prueba rápida para verificar la autenticidad es agitarlo; si la espuma se desvanece rápidamente es verdadero , si no Io hace es falso", agrega.
Palabra de dermatólogos
Irene Araya, dermatóloga de la Clínica Santa María, advierte que los cosméticos falsificados suelen contener compuestos que camuflan olores muy agresivos para la piel: "Lo más típico son las irritaciones o las dermatitis de contacto irritativas; son productos que pueden generar el taponamiento del folículo piloso, Io que lleva finalmente a un acné. Incluso tienen solventes tan tóxicos que pueden producir algún grado de obstrucción bronquial", añade la también profesora asociada de Dermatología de la Universidad de Chile.Concuerda Andrés Lehmann, dermatólogo de Clínica Dávila Las Condes, quien precisa que comúnmente estas lesiones se presentan en la zona del cuello, detrás de las orejas y en la cara. "Se ven lesiones de dermatitis de contacto, enrojecimiento, lesiones ampollares, alergias, picazón, ardor o hinchazón. Algunos de estos productos son fotosensibilizantes, por lo que hacen que la piel esté más sensible a la luz y se produzcan manchas", detalla.
El seguimiento
Aunque un cosmético cuente con autorización sanitaria (y sea etiquetado como hipoalergénico, natural, artesanal u orgánico), su uso no está libre de ocasionar efectos no deseados debido a la composición, mal uso o características propias del usuario. En el caso que esto le ocurra, puede solicitar al Instituto de Salud Pública que realice un seguimiento, analice las sospechas y , de detectar algún riesgo, "tome medidas que contribuyan al uso seguro para prevenir o mitigar los problemas de salud asociados a su uso".¿Cómo hacerlo? En Ispch.cl debe buscar el menú"Cosmetovigilancia" y llenar el formulario de notificación de reacciones adversas a cosméticos (RAC).
Una última recomendación: si tiene dudas sobre algún producto, puede hacer una prueba de sensibilidad cutánea antes de usarlo, aplicando una pequeña cantidad en alguna zona de la piel y esperando un par de horas.