La salud de Juan Carlos Orellana, de 66 años, ha sufrido un deterioro durante el último año y su familia ha buscado por todos lados una explicación médica del por qué el ex puntero de los 70 en Colo Colo, ha bajado tanto de peso: de 75 kilos a 48.
"Ten la tranquilidad de que mi papá no está en riesgo vital", aclara Pamela, una de sus hijas, sin embargo. Y explicaa Io que realmente vive su padre y que no es como apareció en redes sociales.
"Ayer supimos que salió publicado que la familia pedía cadena de oración, que mi papá estaba mal, casi crítico, lo que no es así, gracias a Dios. Está acá en la casa con nosotros y no queremos que escuche sobre este tema, porque lo que más nos preocupa es que tenga energías para salir adelante", agrega su hija desde su hogar en Puente Alto.
"Está en la casa, estable dentro de todo. Ha sido un proceso largo tratando de buscar la causa de este deterioro que sufrió mi papá y llevamos casi un año en este proceso. Lamentablemente, no encontramos la causa concreta de por qué mi papá tuvo esta baja de peso, todos los exámenes le salen buenos", cuenta Pamela, quien explica que el ex delantero casi no puede hablar porque, como tiene pocas energías, se agita mucho si lo intenta.
Hace un año, pese a la pandemia, Orellana era un hombre ágil, que trabajaba en su escuela de fútbol en la Municipalidad de Maipú. Todos los días cruzaba sagradamente Santiago para ver a sus pupilos. Sin embargo, el zurdo de Barrancas poco a poco fue adelgazando y de 75 kilos llegó hoy a 48. Son 27 kilos menos.
-Lo recuerdo jovial, hablando en Twitter, incluso. ¿Qué pasó?
-Sí, hasta que pudo trató de mantenerse haciendo lo que le gusta en su trabajo, pero llegó un momento en que se fue debilitando y no pudo ir. Se buscó en el corazón, en el estómago, con un escáner, TAC, miles de exámenes. Esta semana tenemos más y la otra también. Sólo pedimos que nos manden energías para dárselas a mi papá.